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Jimin colocó la comida en la mesa, YoonGi maldecía en voz baja aún en el sillón "Me las pagará ese chico del cordero".

—Venga a comer. —Jimin fue a la sala, lo observó sentado.

(Le tomarás captura a esta imagen, lo sé puerkis, no te juzgo, ahq, bye

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(Le tomarás captura a esta imagen, lo sé puerkis, no te juzgo, ahq, bye.
Y por cierto se supone que traía camisa, así que supongamos que sí la trae puesta)

—Ya no tengo hambre. —Soltó y recargó sus brazos detrás de su cabeza observando a Jimin, este entrecerró los ojos.

—No interrumpimos lo que estábamos haciendo por nada, ahora a comer.

—No. —Volvió a contestar.

—¡Ay por favor,parece un niño de seis y no un hombre de veintisiete! —Se cruzó de brazos. —Usted es mayor que yo, pero créame que su actitud...-

—Puedo ser ambos a la vez, no me pierdas Jimin. —Bromeó.

—¡Deje de actuar como un niño, ay!

—¿Debería de actuar como un hombre entonces? —Jimin asintió aún con el ceño fruncido. —¡Ay no me mires con esa carita por favor, lo que menos generas es miedo! —Dijo burlón.

—Estoy enojado. —Lo miró, pero YoonGi no podía tomarlo con seriedad, le parecía gracioso ver a Jimin en ese plan.

—Bien, bien, actuaré como un hombre entonces. —Jimin sonrió victorioso.—Siéntate. —Le ordenó, Jimin abrió sus ojos con sorpresa.

—A mi no me engaña, se supone que le dolía la espalda. —Dijo aún de brazos cruzados.

—Ahora me duele otra cosa, anda, ven. —Jimin se acercó y rió ante su comentario. —Se supone que tú me tienes que ayudar.

—Sí, pero no incluía el dolor de...-

—Solo siéntate sobre mi de una maldita vez. —Habló YoonGi.

—Que caballero. —Dijo sarcástico.

—Uh, disculpame. Oh, oh querido joven ¿sería tan amable de calmar el dolor en mi aparato reproductor masculino con sus suaves y delicados labios mientras observo su delicado rostro y comienzo a gemir como perra en celo?

—Retiro lo dicho, usted tiene mucha clase buen hombre, claro que le concedo el honor de sentir mi cavidad bucal alrededor de su...¿Qué demonios estamos haciendo? Bájate los pantalones de una vez ¿sí? —YoonGi sonrió victorioso.

—Es usted muy amable bello chico.

—Ya, ya YoonGi, Romeo se queda pendejo ante tu romanticismo.

YoonGi fingió verlo con sorpresa. —Que sucia boca,que lenguaje tan obsceno. —Bajó su cremallera y Jimin sintió una electricidad recorrer su cuerpo, todavía ni veía a Yoongo Junior y ya estaba tenso.

—Sí, sí, déjeme recordarle que con esta sucia boca voy a hacerle una mamada. —YoonGi asintió, tenía razón.

—Está bien, comienza bello damiselo. —Jimin entrecerró sus ojos y apretó su miembro. —¡Ouch, Ouch! ¡Retiro lo dicho, retiro lo dicho ya metela! —Chilló y Jimin negó divertido.

—¿Qué quiere que haga? —Cuestionó.

—¿Te lo explico con manzanas y peras? ¡No, no, mejor con una banana! —Bajó su ropa interior y Jimin quedó perplejo.—Lo sé, lo sé, es muy grande.—Habló egocéntrico.

Jimin comenzó a masajearlo de arriba a abajo con su mano derecha. —Mmm... he visto más grandes. —YoonGi frunció el ceño.

—¿Estás diciendo que...-

—¿Qué la tiene chica? Pues...—Jimin comenzó a meter lentamente la punta de su miembro,no pudo evitar sentir gracia al ver el rostro de Yoongi, estaba casi con los ojos en blanco.—¡Míreme!—Se quejó sacándolo.

—Es la mamada más rara que he tenido en mi vida, y eso que apenas comienza, hazlo rápido antes de que se me baje la calentura niño.

—¿Rara? —Frunció el ceño metiendo el miembro de Yoongi completamente de una vez.

—¡Ah, ah me retracto! —Colocó su mano derecha en la cabeza de Jimin y generó presión al tener el impacto de su miembro contra la boca de menor. —¡Es la mejor lo juro! —Cerró los ojos.

—Todo un hombre, claro.

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Jimin observaba divertido como YoonGi permanecía dormido en el sillon, si cayó rendido con una simple felación no quería ni imaginar como se pondría en pleno acto.
Pero sí se había pasado un poco con el pobre,fue demasiado y no ayudó en nada que tuviera experiencia, los gemidos de Yoongi permanecerán en su cabeza durante días, o tal vez por siempre, sí, lo último.

—YoonGi, YoonGi...despiérte. —Le habló y este abrió sus ojos, repentinamente se levantó del sillón observándolo fijamente.

—Wow. —Dijo para después ir a la cocina.

—¿Wow qué? —Jimin lo siguió y se sentó frente a él en el comedor.

—Jamás creí que fuera tan intenso. —Habló aún recordando. —Nunca antes...

—¡No sea payaso, fue una mamada! —Jimin rodó los ojos. —Ahora abra la comida que tengo demasiada hambre.

—¿Demasiada hambre? ¿eh? —YoonGi lo miró pícaro y Jimin negó.

—Hoy no fue su día definitivamente, creo que todavía está bajo el efecto de esas pastillas o no sé, pero es tan sensible que se puso a gemir cuando lo besé. —Jimin tomó la comida.

—¿Enserio? Lo siento, fue tan genial que...-

—Yo me esperaba quedar en silla de ruedas o no sé, algo por el estilo, pero quedó rendido en cuanto terminó en mi cara, EN MI CARA.

—Oh sí, lo recuerdo. —Sonrió como estúpido.

—Creo que estoy conociendo al verdadero YoonGi,un YoonGi que no es tan frío y serio. —Dio un bocado. —Un YoonGi que no aguanta ni la primera ronda.

—¡ANDO SENSIBLE AÚN, DÉJAME! —Tomó una brocheta de cordero con brusquedad.

Doctor Min | YoonMin +98  (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora