CAPÍTULO 62

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Caminé  hasta la puerta de aquella cafeteria mientras dejaba a tras mio a un Jimin que dejaba en mi muchas dudas ¿Qué tanto podria ocultar?.

Al tomar la manija de aquella puerta no pude evitar girar un poco mi rostro para ver a Jimin quien aún me observaba, le regalé una pequeña sonrisa e ingrese.

No fue mucho lo que tuve que avanzar desde la puerta hasta que pude encontrar a Suga sentado con un cafe entre las manos y bebiendo de este, levantó su mirada hasta que se encontró  con la mia, avancé hasta donde se encontraba, se levantó de su comodo asiento y me abrazó  fuertemente.

Pude escuchar un suave susurro en mi lado izquierdo por parte de Suga.

"Estaba tan preocupado por ti"

Correspondí a su abrazo, me alejé un poco y le sonrei.

Por supuesto que a su lado soy feliz.

______: Estoy aquí -me aleje y me sente al frente de donde el estaba.

Suga: Tú padre me contó lo que pasó, creo que...

______: Suga -interrumpí- No quiero hablar sobre ello.

Suga: Esta bien -tomó mi mano y no mencionó más sobre aquel tema.

Pues notar como cada cierto tiempo el tomaba su celular y escribía, tenía curiosidad por saber con quien hablaba pero opté por ignorar aquello.

A los minutos salimos de aquella cafeteria tomados de la mano, pude ver un auto estacionado fuera de la cafeteria, aquel auto no se me era extraño, muy por el contrario era un auto que se me hacia muy familiar.

_______: ¿Qué hace el auto de mi padre aquí? -pregunté a Suga.

Suga: Pensé que sería bueno que hables con él -Se que no podia evitar de por vida a mi padre pero no era momento de hablar con él, aún no.

_______: Pero Suga -gire a verlo, sentía y sabía que algo no estaba bien, su mirada lo decía todo.

Solo pude escuchar un suave murmullo por parte suya.

"Lo siento"

Su mirada era triste.

Suga...

La puerta trasera del auto se abrió y de esta bajó mi padre con una expresión no muy agradable que digamos, solté mi mano de la de Suga con brusquedad, se que el se sorprendió mucho pero en estos momentos no me importaba, mis manos sudaban y mi miedo hacía mi padre aumentaba conforme avanzaba hacía mi hasta llegar a mi altura.

Papá: Hiciste bien Suga -giré a verlo y el tenía la cabeza agachada y sus manos hechas puños- Sube al auto -me ordeno.

Nada quedaba de aquel hombre dulce y amable que había cuidado de mi desde pequeña, ahora era un hombre con unos ojos llenos de frialdad que me observaban con indiferencia.

Obedecí y me adentré en el auto, mi padre se sentó a mi lado y durante el camino no mencionó nada sobre mi madre ni sobre ningún otro tema, todo el ambiente en el auto estaba lleno de silencio.

Al entrar a mi casa pude ver en el sillón a mi madre leyendo el periodico.

Mamá: _______, ven.

_______: No quiero -respondí.

Un hombre de seguridad de mi padre tomó mi brazó y con brusquedad me lanzó al suelo y caí de rodillas frente a mi madre quien al observarme sonrió de costado.

Mamá: Cuando yo te llame tú vienes -habló mientras colocaba su mano sobre mi mejilla abofeteandome- ¿Escuchaste?

No respondí, sentí como mi labio ardia, probablemente me lo ha roto, pero ¿Por qué mi madre actua así conmigo?

Mamá: ¡Te estoy hablando! -gritó y levantó la mano para golpearme, por inercia dí un pequeño salto e intente cubrirme para luego asentir con la cabeza- Así me gusta -sonrió- Veo que no haberte educado durante todos estos años te hizo de una niña rebelde y mimada -tomo un pequeño mechon delantero de mi cabello que caía sobre mi rostro- pero aún no es tarde -aquel pequeño mechon de mi cabello lo colocó tras mi oreja- Las cosas a partir de ahora serán diferentes en esta casa, ya no tendrás auto y dejarás de gozar de muchos de tus privilegios, pero sobre todo ya no serás novia de Min Yoongi.

HARUMAN (Min Yoongi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora