Profesor. || Jeffrey D. Morgan

1.6

Salgo de clases y camino lo mas rápido hacia la salida, Martin me espera en la salida y tengo que pasar por la biblioteca. Amaría poder trabajar alli nuevamente. Mi celular suena y se que es él preguntándome donde carajos estoy, tomo mi celular y atiendo la llamada.
— Hola, donde estas? -escucho su voz y vuelvo a caminar.-
— Estoy en camino, no seas impaciente -escucho su risa y miro una de las puertas de los salones, ahí es cuando lo veo. Nuestras miradas chocan y yo paro de respirar, Jeffrey frunce el ceño y sale al pasillo cerrando la puerta. No puedo creer que después de tantos años me lo vuelva a cruzar en el mismo salón que nos vimos por ultima vez, hasta que Jeffrey no esta a 1 metro de distancia no salgo del shock.-
— Katherin? -escucho la voz de Martin en mi oido y sin pensar corto la llamada, miro a Jeffrey.-
— Hola. -lo saludo e intento no verle los ojos, su mirada esta clavada en mi. Aunque no puedo no escanear si rostro y darme cuenta que esta mas atractivo aun, es como el vino, cuanto mas viejo mejor se pone. Maldita sea.-
— Hola? Es lo unico que dices? -rie.- Crei que estaba loco cuando te vi. Pero dios... eres tu en carne y huesos.
— Lo siento, estoy un poco apurada -miro el pasillo.- Necesito irme. Nos vemos. -cuando me largo a caminar Jeffrey toma mi brazo, miro su mano y no puedo no fijarme en la alianza en su mano. Esta casado.- Que?
— Hablaremos, no creas que te vas a ir sin darme ninguna respuesta.
— Quedate tranquilo, no iré a ningun lado. Adios.

Entro a la biblioteca donde acontecieron tantas cosas importantes y memorables. Claramente con Jeffrey, aun sigo anonada de verlo. Busco con la mirada a Rose pero no veo ninguna señora mayor, sin embargo esta una mujer en el mostrador.
— Hola, que necesitas? -me pregunta amablemente.-
— Rose? -ella saca su vista de la computadora y me mira.- Soy Katherin, he trabajado aqui hace unos 5 años atras.
— Oh, tu eres la rusa! -sonríe.- Rose esta en su casa, se ha retirado. -me da la mano.- Soy su hija, Helena.
— Un placer. -miro alrededor y veo como un muchacho ordena los libros.- Venia a ver si tenía algún puesto libre, pero ya veo que no.
— Oh querida, tu eres adorada por Rose, si no te hago un lugar ella me matará. Dejame hablar con el encargado, seguro hay lugar para ti.
— Gracias -dejo mi numero anotado en un papel.- Cualquier cosa llamame. Nos vemos. -salgo de allí y le hago una seña a mi novio para que espere unos minutos mas, entro a la cafetería y a lo lejos veo a Selena en su puesto.- Hola Selena!
— Rusa! -se levanta de la silla y me abraza.- Cuanto tiempo... dios, te evaporaste o te tragó la tierra? Desapareciste de la nada.
— Me fui a Rusia, y bueno... he vuelto. Necesito una información -dudo si preguntarle o no, pero que mas da, necesito comprobar o no mis sospechas.-
— Claro, en lo que te puedo ayudar.
— Has hablado o visto a Margaret?
— Si, ella da clases en la facultad. Hemos hablado hace poco, ella vino un par de veces con un tipo...
— Ese tipo era Jeffrey? El profesor de Literatura? -pregunto y ya no se si quiero escuchar la respuesta ahora.-