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Tomo un sorbo de café y miro a Jeffrey, esta hablando por teléfono y se ve malditamente caliente.

Fue pésima idea decirle para venir a trabajar de traje, ahora quiero comerlelo en dos panes. Le hago un sonrisa inocente cuando el frunce el seño, hace como 5 minutos lo veo fijamente. Mierda.

Sacudo mi cabeza y vuelco mi atención a una de las tesis que estaba leyendo. Era media tarde, y sinceramente, tenía 0 ganas de estar sola en mi oficina... no le sconté? si, tengo mi propia oficina, no quise ser mal agradecida... pero me parece deprimente estar en el piso de los profesores, prefería estar aca en la oficina de Jeffrey. Hasta su café es mejor que el que nos dan a los profesores, malditos funcionarios. Sonrío sin poder evitar, Jeffrey se evanta de su silla y en menos de dos segundos, su cuerpo se sienta a mi lado en el sofá.

-- ¿Puedo saber que le causa gracia señorita Alekseeva?

-- Sabes que el café que sirven aqui es 10 veces mejor que el que da en la sala de profesores, no? -lo miro y el asiente riendo.-

-- He tomado ese cafe durante unos 20 años.

-- Bueno, es un tip para que hagas algo al respecto -le guiño el ojo.-

-- Ahora me va a dar ordenes?

-- Quiero lo mejor para mis compañeros... sino me veré obligada a venir todos los días aqui. -Jeffrey suelta una caracajada.- También está la opción que me mandes un cafe a media tarde -alzo mis cejas.- aunque eso es un poco egoísta.

-- Cierto que tu no vienes casi aqui...

-- Maldito subdirector que me pasa llamando a su oficina. -su risa vuelve a tomar la sala.- ¿Te das cuenta que ya nadie se cree el cuento del "tengo algo importarte que hablar con ella" -hago comillas con mis dedos.- cada vez que mandas a tu secretaria llamarme, no?

-- Lo sé. Es más, Andrew me ha preguntado si estrene el sofá contigo... -susurra en mi oido.-

-- Pues dile que sí, y el escritorio también... tu silla, a eso súmale los baños del piso 1, el salón de proyecciones, el salón de literatura, y el cuartito de limpieza... -Jeffrey vuelve a tentarse de risa, cuando abren la puerta de la oficina el apoya su cabeza en mi hombro.-

-- Señor, la profesora Lambert quiere hablar con usted.

-- Dile que pase -Jeffrey se levanta, aún con una sonrisa en sus labios. Se sienta en su silla y me mira.-

-- Eres una atrevida.

-- Que sorpresa verte aqui -dice Margaret al ingresar a la oficina y verme, yo solo entorno los ojos.- ¿Podemos hablar a solas? -pregunta a Jeffrey.-

-- No pienso moverme de aqui, si es quieres me coloco auriculares y así ni sabrás que estoy aqui? ah? -pregunto mostrandole los auriculares, ella mira a Jeffrey quien se encoje de hombros.-

No me había colocado los auriculares, cuando Margaret empezó hablar de cosas profesionales perdió mi atención. Creí que volvia a jodernos nuestras vidas personales, pero me equivoque. La veo levantarse y desvió mi atención del par de hojas que estaba leyendo. Jeffrey la despide y vuelve a sentarse a mi lado.

-- ¿Nos vamos?

-- Tengo que ir con Selena -mis manos pican por tocar su cabello, así que acaricio su cabello, para después descansar mi mano en su nuca.- Una pregunta... ¿cuando pensas informarse sobre el viaje?

-- Era una sorpresa -entorna los ojos.- Iremos a España -alzo las cejas sorpendida, vacaciones en España, wow.- no te emociones que no serán 100% vacaciones, iremos por unas exposiciones que ahí allí.

-- Y por qué tengo que ir?

-- Porque quiero que vayas conmigo, ambos necesitamos unos días solos... lejos de todo.

-- Podíamos escaparnos a Rusia un par de dias... así conoces a mi familia.

-- Estas segura?

-- Si no tengo pruebas de que realmente hay algo que me mantiene en Estados Unidos, me llevarán a rastras de nuevo.

-- ¿Cuanto tiempo se demora para aprender ruso? -dice riendo.-

-- Imbecil, hablan ingles. Así que no te vas a escapar de las preguntas.

Profesor. || Jeffrey D. MorganDonde viven las historias. Descúbrelo ahora