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Saludo a Rose cuando entro a la biblioteca y dejo mis cosas dentro de un armario, saco lo necesario, mis lentes y mi celular.
— Como te ha ido en las vacaciones, querida? -hace 2 años que trabajo en esta biblioteca, y aunque es un trabajo sumamente aburrido y que no gano mucho, me ayudaba porque podía trabajar y estudiar tranquilamente.-
— Vacaciones? -me rio.- pase estudiando para los examenes. De todas formas ahora me cambie a Literatura.
— Oh, que bien. -ella no dice mas nada, asi que tomo los libros nuevos y comienzo a acomodarlos en las estanterías.-
Trabajar por la tarde aqui era triste, pero lo bueno de que no viniera mucha gente, es que podía ir a la cafeteria de enfrente y charlar cuantas horas quisiese con Selena, una conocida de la universidad que trabajaba de cajera allí. Y eso es lo que estoy haciendo ahora exactamente, cruzo la calle y maldigo cuando veo que la cafetería esta bastante llena, no la dejaran salir del puesto.
Hago el pedido y por mientras que espero, miro a mi alrededor buscando una cara conocida, la encuentro, un rostro que lo vi hoy por la mañana.
— Rusa! Aqui tu cafe .- Selena me entrega en café y yo busco una mesa para sentarme, hay solo dos mesas donde hay una persona sentada en cada, una es con un señor que no conozco y la otra es sentarme con mi profesor, no lo dudo.-
— Buenas tardes Sr. Morgan, lo siento, no hay mesas espero no se incomode .-dejo mi bandeja sobre la mesa y el saca sus ojos del celular y me mira, discretamente sus ojos recorren el lugar para confirmar lo que estoy diciendo, asiente y hace un ademan para que me acomode.-
— Como te va Katherin? -me sorprende que le me tuteé.- No pronunciaré tu apellido aqui, no es necesario las formalidades cuando estamos fuera de un salon de clase -yo rio.-
— Muy bien. -le pongo azúcar a mi cafe y escucho su risa nuevamente.- Que? -lo miro.-
— Estas segura que no tienes diabetes con tanta azucar? -entorno los ojos, todo el mundo me dice lo mismo.-
— Quedese tranquilo, que por ahora no.
— Bien... y dime, si no te molesta, como es que de Rusia has llegado aqui?
— Mi hermana es vocalista de una banda -me encojo de hombros.- era una excusa perfecta para salir de allá. De todas formas Rusia no es el país que todos pintan, que principalmente los americanos pintan. Nos odian. -el rie.-
— Creo que es mas envidia que odio. Toda la vida fue una competencia para ver quien era mejor -yo asiento.- si lo vez así es algo sumamente infantil.
— Asi que... -miro mi café.- ademas de literatura, sabe historia también...
— En la vida hay que saber de todo un poco, Katherin.
— Espero no le moleste que me haya sentado aquí -digo porque lo ultimo que me dijo parecía un regaño.-
— Por qué?
— Puede entrar alguien de la clase y creer que lo estoy comprando.
— No soy un hombre fácil de comprar -me mira, y veo como sus ojos recorren mi cuerpo, una apenas visible sonrisita se forma en sus labios.-
— No parece muy seguro - termino de tomar café, el rie.- Repítase eso cada noche, capas asi se lo cree.
— No seas atrevida.
— Le ofendí? -pregunto asustada. El rie para tranquilizarme.-
— Lo contrario. -dice y se levanta.-  Nos vemos mañana -sale y me deja sola y un millón y medio de preguntas. Que carajos fue esto?.-

Profesor. || Jeffrey D. MorganDonde viven las historias. Descúbrelo ahora