La última vez [JackBum]

VEINTIDÓS

¿Prometer algo? Pero si todas las cosas en su vida eran pasajeras desde que se mudó a la ciudad gris. Las promesas eran un compromiso que no podía ni debía asumir, pero era Jackson y era la siempre nostalgia envuelta en un tibio paño de felicidad que le brindaba, lo que le permitía romper cada vez con más de sus "reglas".

Ambos se vistieron y salieron a la calle reluciendo. Había en los dos la señalización de un nuevo comienzo, algo que les cambiaba la forma de ver la vida segundo tras segundo. Emoción y expectativa.

Jaebum se sorprendió a sí mismo permitiéndose sentir aquello sin atemorizarse por lo que vendría después. Prefirió conservar aquella característica de su actual personalidad y simplemente disfrutar el momento.

Esperaron a que el tren hacia la ciudad llegara y sorpresivamente, Jackson se subió también. Aquello lo extrañó puesto que recordaba que vivía en un vecindario bastante alejado. Inclinó un poco la cabeza, cuestionándolo y cuando el otro se dio cuenta sólo imitó el gesto.

-¿Qué? Tengo que ir a la ciudad para tomar el autobús a casa. No es que es te esté siguiendo ni nada parecido. Eres apuesto Im Jaebum, pero tampoco para que no pueda pasarme un segundo lejos de ti.

La traviesa sonrisa apareció en los labios de Jackson y flotando en aquel ambiente de comedia romántica, viajaron hasta su destino.

-¿Crees que pueda pasar esta noche?

Para el momento en que tenían que separar sus caminos, otra pregunta inesperada llegó a los oídos de Jaebum. ¿No era demasiado rápido? La habían pasado bien la noche anterior y también esa mañana, pero volver a su casa...

-Oh, lo siento ¿debería haber usado alguna excusa como que dejé mi reloj o algo así? ¿Esas cosas todavía funcionan?

-Yo...yo creo que es mejor que...

-¿No quieres? Bueno, está bien. No quiero que sientas que tienes la obligación...

¿Era aquel algún tipo de truco? Ciertamente, tuvo efecto en Jaebum y éste sintió el arrepentimiento segundos después, queriendo retractarse de sus propios dichos.

-¿Qué te parece si cenamos antes?

Fue la apresurada respuesta que le surgió, una manera de enfrentarse al pedido pero no totalmente. Todavía no estaba seguro del lugar hacia el que quería que las cosas fueran, y por eso la necesidad de tomarse las cosas con calma. Jackson, por otro lado, y a pesar de haber entrado en pánico en ciertas ocasiones, estaba más que determinado a quedarse al lado de Jaebum.

-Oh, ¿entonces quieres que sea a la antigua? Está bien, siempre quise que un joven apuesto me corteje.

Respondió, bastante entretenido, el asistente.

-No estoy...

Antes de poder negarlo, Jaebum fue interrumpido por un teléfono. Ambos iniciaron la búsqueda en los bolsillos y el ganador resultó ser la persona frente a él, quien tomó el artefacto y se despidió apresuradamente antes de contestar la llamada.