- ¿Y te disfrazaste de hombre? – preguntó el pequeño elevando sus cejas.
- Así es y gracias a eso pude conocerlo.
- Papá se veía tonto.
- ¿A quién llamas tonto? – preguntó él apareciendo.
Corrió hacía Jung Hee y ambos se abrazaron. Era extraño que ya estuviera de regreso. Aún no tendrían que haber terminado su gira por Corea pero... Simplemente era extraño. Jung Hee abrazaba a su padre como si hubiera pasado mucho tiempo y lo había hecho en verdad. Cuatro meses. Llevaban fuera cuatro meses.
No pude evitar sonreí al ver esa escena. Ambos estaban muy contentos. El padre le hacía ruidos de pedetes mientras jugaba en el estómago de su hijo.
Jung Hee era un chico bastante inteligente. Solo tenía cinco años pero era igual a su padre. Cuando ambos están juntos sentías que estabas en un colegio de infantes.
Entonces él dirigió su mirada hacía mí y ambos nos sonreímos. Había pasado tiempo desde que le había visto. Se veía genial. Su pelo estaba castaño aunque ahora era un poco más oscuro y su sonrisa... Su sonrisa seguía ahí, en ese rostro tan bonito.
- ¿Qué te ha contado la tía Hyeon para que me llames tonto? – preguntó a su hijo.
- La historia de cómo conoció al tío Chimchim.
- Pero no podía saltarme los detalles con su padre.
- ¿Le contaste que fui a comprarte...? –asentí- ¿Y que nos du....? –asentí divertida. -¡Estás pervirtiendo a mi hijo!
- ¿Yo? ¡Es igual a ti Hoseok! ¡Ha nacido pervertido!
Entonces ambos nos reímos. Corrí y le abracé.
- ¿Dónde están los tíos?
- Vendrán mañana a visitarte.
- ¿Y el tío Chimchim?
- No tardará en llegar. Al parecer se había olvidado de comprarle algo a la tía Hyeon y ha ido a comprarle cualquier cosa que encontrase.
- Siempre hace lo mismo. –rodé los ojos- Le he repetido mil veces que no es necesario que me traiga nada.
- Lo sé y cada vez ocurre lo mismo. Acaba comprando cualquier tontería en la tienda de aquí al lado.
- ¿Y a mí me has traído algo?
- ¿Debería? – miró a su hijo de forma extraña junto a una mueca- Claro que lo he hecho- sonrió antes de darle una bolsa llena de juguetes- Y luego las fans me imaginaban cuidando a mi hijo colgando por los pies. Aish, si es que soy demasiado buen padre.
- Hoseok, no sabías ponerle los pañales. ¡Usaste cinta adhesiva para que no se le cayeran!
- ¡Los pañales son complicados!
- Tú eres complicado. –se añadió una tercera voz.
Entonces dirigí mi vista a la puerta y no pude evitar sonreír. Se veía muy bien. Tenía el pelo castaño de regreso y llevaba una bolsa en la mano. Me reí y negué con la cabeza. Él se acercó y depositó un corto beso en mis labios.
- ¡Delante de mi hijo no! – le cerró Hoseok los ojos a Jung Hee.
- Papá, ya se lo que es un beso. Besé a Min Jee.
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Bangtan ¿boys? » park jimin
Fanfiction- Habíamos pensado en que usted podría hacerse pasar por él durante un tiempo. Un mes, dos máximo. - ¡¿Perdón?! ¡¿Están locos?! Un día como otro cualquiera puede aparecer alguien y cambiar tus planes para un tranquilo verano. Decidir jugar con f...