DayDream (En Emisión).

DESPIERTA - Introducción a DD

Los sueños. Para algunos sólo son unas simples imágenes que están dentro de nuestra mente para mantener frescos algunos recuerdos y regalarnos una pequeña oportunidad de revivir esos recuerdos, pero para otras personas son mensajes medianamente cósmicos de un mundo astral que llegan a ser muy difíciles de comprender y están esos soñadores que le encuentran sentido hasta al más absurdo sueño. Esas personas tienen una pequeña posibilidad de conocer un mundo increíblemente fantástico... DAYDREAM... Y seguro deben estar diciendo que el relato parece sacado de la imaginación de un niño pequeño, pero no, se trata de la experiencia de un chico que vivía su vida adivinando quien era y para que era bueno, ¿Que como lo sé?
Porque se trata de mi historia, se trata de mis sueños.

Bueno ahora les daré unos detalles de mí, Mi nombré es Zack Stiller, soy un chico de 16 años, recientemente tuve que cambiar mi vida, "empezar de cero"... Vivía en algún lugar de los estados unidos, pero no entraremos en muchos detalles con la locación exacta, debido a un problema tuve que mudarme a un pequeño pueblo en un país de Latinoamérica, era una tortura ya que no conocía a nadie era totalmente un desconocido y sólo estaba mi padre quien al igual que yo se encontraba aún perdido y fuera de está realidad, se mantenía suspendido en sus pensamientos casi hablar mucho.

Mi padre es un hombre alto de nombre Lawrence, a pesar de tener una edad moderadamente avanzada no se veía así, me trata igual que si fuera mi hermano mayor, ahora estoy llegando con el a mi nueva "Casa".

-Zack... ¿Hijo?... -me pregunto mi padre quien tenía los ojos un poco llorosos e irritados, ya que no tenían ese brillo que acostumbraba a ver, ahora estaban de un color rojo-.

-¿Si? -Fue lo que respondí aún con la mirada en la ventana del automóvil, sabía cómo se sentía y debo admitir que sin duda estábamos devastados-.

Mi padre estaba triste por lo ocurrido, y lo comprendo eso de que tu esposa te deje por tu jefe no es algo que cualquiera supere en 2 meses.

-Se que estamos empezando de cero... Y quiero que tú y yo seamos felices, tu madre nos dejo a la deriva y aquí será lo mejor.

Mi padre intento sonreír muy forzadamente mientras me daba una pequeña palmada en el hombro, a pesar de esta situación quería demostrarse fuerte ante mí aunque no sería la primera ocasión que hace eso, hace un par de años sus padres, o sea mis abuelos, fallecieron en un accidente catastrófico ya que ellos daban un paseo por el pueblo donde ahora trataremos de vivir normalmente, a pesar de tener pinta de un pueblo aburrido tendía a estar muy activo en desastres. Mis abuelos no corrieron con suerte ya que estaban en un supermercado en el momento incorrecto ya que hubo una explosión muy repentina en dónde aún no encuentran al autor de ese acto atroz.

-Claro papá, supongo que no necesitamos de alguien mas para ser felices.

-Si hijo... Ahora debemos instalarnos, mañana empieza una nueva vida.

Mi padre tenía un nudo en la garganta, sus ojos se llenaron de lágrimas, no quería llorar a si que solo se limitó a abrazarme, yo acepte su abrazo y pude sentir todo su afecto que me verdad me hacía mucha falta en estos momentos, ya sólo me quedaba él y no lo perdería por nada del mundo.

Ambos dejamos el automóvil, nos detuvimos frente a nuestro nuevo hogar, para ser algo "improvisado" estaba bien, bastante bien, era una mansión con habitaciones de sobra.

-Papá... ¿Es aquí?...

-Si, ¿te gusta?... ¿Era de tus abuelos?... Ahora es de nosotros debido a que... Pues ya sabes.

-Papá... Esto es demasiado a lo que yo imaginaba y sólo es para nosotros dos.

Mire muy emocionado la mansión en la que viviría ahora, estaba todo pintado de color blanco con algunos bordes azules en las ventanas, la puerta principal era de color café caramelo aunque tenía pequeñas manchas de tierra, era obvio ya que tenía al menos unos 10 años sin nadie viviendo ahí, pero la sorpresa fue más al entrar ya que habían muchos retratos cubiertos con sábanas blancas al igual que la mayoría de los muebles que a pesar de ser un poco viejos se veían en buen estado.