Chaparras al Ataque

15 | Excursión

*Narra Ryan*

Hoy haríamos una excursión con alumnos de otro instituto, tal vez y podría ir a un lugar con algunas chicas de el otro instituto.

Tomé mi mochila y me fui al lugar donde nos veríamos todos los alumnos para partir.
Cuando llegué, ya estaban algunos alumnos de ambos institutos. Me fui a inscribir para luego subir al camión. Busqué con la mirada a alguna chica sentada sola.

Y había una chica pelinegra, ondulada y bonita para mí gusto. Uff. Me acerqué a ella con una sonrisa seductora.

— ¿Puedo sentarme?—le pregunté coquetamente.

— si, claro— ronroneó.

—Soy Ryan—le dije extendiendo mi mano.

—Valentina— me dijo tomando mi mano.

Me lamí los labios con pervercion y subí una ceja. Esta chica debe ser especialmente para mi... buen regalo de Dios...

Me estuvo coqueteando y platicando por un buen rato, pero un grito llamó mi atención.

— ¡Esperen, faltamos nosotros!—

El autobús se detuvo y abrió su puerta, entró Laurel algo agitada y detrás de ella venía Antoní, Silvana y Alicia. Al momento que entraron, ella buscó con la mirada un asiento y su vista chocó con la mía, sin embargo, al momento de verme rodó los ojos y se fue a sentar con Laurel y Antoní.

Sé que está molesta conmigo por irme sin avisar, pero creo que ya está exagerando.

Crecí con ella y duele un poco saber que esté molesta conmigo por no decirle. No creo que sea el momento indicado para hablarle, ya que después de unas semanas que me fui ocurrió lo de Kelly y pues no sería un buen momento.

Aparte, sería incómodo dejar a esta preciosura para ir a discutir con Alicia.

Miraba repetidas veces en donde ella estaba, teniendo la esperanza que me viera aunque sea una vez, pero no, solo se la pasaba platicando con Antoní y las chicas.

No sé por qué no nota como le coquetea...

Y me enoja.

No tengo idea de qué hacer para llamar su atención, la conozco muy bien y todo, pero... Las personas cambian y ahora que la veo es distinta, y mucho. Ya no es la chica cariñosa y tímida de antes. Ahora es cerrada y alocada.

Pero lo peor es que de una u otra forma, siempre logra llamar mi atención...

***

Habíamos llegado a uno de los museos más grandes de la ciudad. Era enorme y con bastantes cosas de la historia.

Aunque bueno... era obvio porque es un museo...

—No se separen del grupo—habló la instructora.

Valentina estaba conmigo hablando de quién sabe que tanta tontada, pero me aburrí, tenía que hacer algo para alejarla pero no tenía idea...

Si antes pensaba que era guapa, ahora pienso que es burro, el de Shrek y Fiona.

—¡Señorita Hernández, no toque eso!— le gritó la instructora a Alicia, la cual estaba a punto de tomar una de las lanzas de una estatua.

Era de esperarse. Tomando en cuenta lo inquieta que es.

—Lo siento— contestó divertida para luego reír con sus amigos.

Tal Vez y si la asusto,  con eso haga que me hable, como la vez que nos conocimos...

*Flashback*

Estaba en el parque un tanto aburrido porque no había nadie con quién jugar, estaba dando vueltas por todos lados buscando algo para desaburrirme.

Cuando ví una niña de mi edad sentada en los columpios. La maldad creció en mi pequeño cuerpo y se me ocurrió la idea de asustarla. Me acerqué cuidadosamente y al estar lo suficientemente cerca...

—Bu— dije en su oído.

—¡AHAHAAHAH!— gritó y luego solo sentí un golpe en el estómago.

Me tiré al suelo con algo de dolor y apunto de llorar—esta niña si pega fuerte—

cuando el dolor se me pasó, la mire con profunda molestia y ella me miraba con preocupación.

Era morena, pelinegra, lacia, ojos color marrón, pestañas largas y pecas, traía puesto un pantalón negro, con una camisa blanca de rayas y unos Vans blancos.

—L-lo siento— dijo avergonzada.

Su voz... es la más linda que haya escuchado en mi vida.

Todo el enojo abandonó mi cuerpo. Decidí tratarla bien, por alguna razón ilógica.

—Descuida, fue mi culpa—dije levantándome de la tierra— Soy Ryan ¿Y tu?— pregunté con cortesía.

— Alicia— dijo con uno sonrisa algo forzada. Parecía estar incómoda ante un desconocido.

—Lo siento por espantarte, es que no tenía nada que hacer— le dije rascando mi nuca, incómodo.

Ella solo asintió, para luego darse la vuelta y subir al columpio de nuevo, seguí su acción para subirme al columpio de alado.

— ¿Y cuantos años tienes? — le pregunté inocentemente.

— seis ¿Y tu?—

—igual, oye ¿Y seremos amigos?—

— yo pensé que ya éramos— dijo divertida.

Wow, que fácil fue eso.

*Fin del flashback*

— Ehh... Valentina ahorita vuelvo— le dije con una sonrisa. La peli negra me regreso a ver, dejándome ver unos ojos verdes.

—¿A dónde vas?— preguntó alzando una ceja.

A kilómetros se nota que es celosa...

—Al baño— conteste rascándome la nuca para luego irme.

Alicia y Laurel se separaron del grupo y decidí seguirlas, caminé unos cuantos pasos atrás de ella en silencio, cuando ellas se sentaron en una banca a platicar.

—oye ¿Y de dónde conoces a Ryan?—preguntó Laurel.

Oh si, empiecen con lo bueno.

—Pues... Es mi ex novio, la verdad no sé por qué lo acepte.— dijo un tanto decepcionada.

Y más decepción me dió a mi.

—Desde mi punto de vista, debieron ser una bonita pareja, ya que ambos tienen casi el mismo caracter — respondió divertida Laurel.

En eso tienes razón...

—¿Acaso me vez cara de conquistadora? Pues no. Pero de todos modos eso ya quedó en el pasado— dijo encogiéndose de hombros.

—Buen punto, ¿Y que piensas de Antoní? Osea el es un buen chico y se nota a kilómetros que le gustas—

Lo sabía... ese hijo de puta que fingía ser su mejor amigo... ¡No dejare que te acerques a mi Alicia!

— P-Pues, lo sé. Él no es bueno mintiendo.— Ríe nerviosamente.— Es bueno, amable, cariñoso, caballeroso... pero no quiero romper nuestra amistad. Él conoce mis secretos y yo solos suyos. Si es que llegará a gustarme, no serviría. Nos destruiríamos.—

—Pero el amor consiste en...—

—¡Chicos! ¡No se pierdan! ¡Sigan a los demás!—

Estúpida instructora...

—Será mejor que vayamos con todos.—

—Si.— y se van.

Si quiero volver a conquistar a Alicia, debo alejar a Antoni antes que nada.

Y nada me lo impedirá. Porque yo nunca pierdo.