XXII: Odin.

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Mirar su delgado cuerpo tendido en el suelo le creaba un sabor amargo en la boca y odiaba sentir eso, le revolvía hasta el interior y no lo dejaba tranquilo.

Pero, ¿Qué podía hacer él?

Estaba encadenado al otro lado y no podía moverse mucho, su cuerpo estaba tan adolorido que cualquier movimiento le creaba malestar. Peter Parker observaba en silencio y se preguntaba cómo era que habían llegado hasta ese límite.

Y sin poder controlarlo, las primeras lágrimas resbalaron por sus mejillas, se las seco con la manga sucia de su suéter y soltó un suspiro

¿Por qué ella? Se preguntaba en aquella habitación.

Peter Parker no comprendía las razones de su cautiverio, había sido siempre muy cuidadoso con su identidad de Spiderman y en el tiempo que llevaban allí no habían mencionado ni una sola vez su nombre o si quiera le habían hablado. Entonces comprendió que a él no era a quien querían aquellas personas, sino que querían era a Kate, su mejor amiga. El miedo y los nervios lo invadieron, no podía permitir que le hicieran algo, no podía permitir que le siguieran haciendo daño.

Kate no merecía lo que le estaba pasando, había mentido algunas veces pero era para mantenerse salvo y eso Peter lo supo cuando ella dijo toda la verdad.

Ella solo quería estar a salvo, tener una vida tranquila y personas que la quisieran. Era ese tipo de personas que no quieres dejar ir nunca porque son incondicionales, simpáticos y graciosos, eso era Kate Sprayberry y muchas cosas más. A Peter siempre le gusto su forma de ver el mundo, le gustaba que siempre sonriera y fuera buena con todos. Le gustaba su risa estruendosa, su manía de burlarse de todos y de todo y su sarcasmo, la mueca de concentración cada vez que pintaba algo y sus ojos, creía en el dicho que se refería a que los ojos eran la puerta del alma y cada vez que Peter miraba aquellos ojos oliva terminaba de convencerse de lo encantadores que eran aquellos ojos felinos.

Sabía que estaba mal, ¿Cómo podía gustarle su mejor amiga? Era extraño pensarlo y más cuando él más que nadie sabía todo acerca de Kate, hasta la vida de falsa que había creado ella.

Patético, Kate se burlara de ti, pensó.

Liz Allan era aquel amor imposible, hermosa, amable, inteligente y buena, todos hablaban de ella y para Peter representaba a la chica perfecta. Por otro lado estaba, Kate, no queremos decir que sea mala y no tenga alguna pizca de bondad, solo que Kate era Kate y para Peter representaba ese sentimiento que produce el hogar, era como aquel refugio que siempre te hace sentir bien a pesar de todo.

- ¿No ha despertado la bella durmiente? –una voz femenina lo saco de sus cavilaciones poniéndolo alerta.- no importa, no me respondas.

Kali Black entro a la habitación y se acerco a Kate.

- Vamos, niña, te necesito despierta.

Zarandeo a la joven tratando de despertarla pero no tuvo ninguna reacción.

- Bien, no lo hagas, como sea haremos el siguiente punto del plan... -se levanto y se dirigió a la puerta.- ¡Patrow, te necesito aquí!

Rápidamente un hombre entro a la habitación tomando en sus brazos a la joven. Peter trato de levantarse pero su cuerpo estaba muy débil. Cuando pudo estar de pie, hablo.

- ¿A dónde se la llevan?

Kali detuvo su caminar y espero a que su compañero saliera con Kate rumbo al laboratorio.

- ¿Quieres la verdad o la mentira? –pregunto acercándose al chico.

- La ver-dad –respondió inseguro Peter.

- Kate Sprayberry tiene un gen muy valioso –respondió a escasos metros de Peter. Tentada paso su dedo índice por la barbilla de Peter pero antes de que llegara lejos Peter se alejo de su tacto.- desciende de un linaje de un antiguo poder místico, ¿Has oído mencionar a Odín?

La expresión de Peter cambio radicalmente, ¿estaba hablando enserio? ¿Debía creer en la mujer desconocida? No sabía pero temía que fuera verdad y que algo malo le pasara a Kate.

Kali al estar en el umbral de la puerta, le guiño un ojo al joven y luego cerró la puerta dejando con miles de pregunta a Peter y mas confundido que antes.

Pero un grito de auxilio lo desconcertó.

- ¡Ayuda! ¡Por favor déjenme salir de aquí! ¡Necesito ver a mi hija!

Kali en multimedia.


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Nota: Se acerca el fin.

Golden Sun: FIRE LINE ❖ PETER PARKERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora