Los Ojos Del Lobo [HunHan] #1

• V e i n t i c i n c o •

Sehun escuchó claramente como el eco de los llantos de los aldeanos comenzaba a perderse en torno a sus oídos, incluso ahora todos ellos parecían ser de una forma y figura difusa de la cual ya no tenía consciencia. La voz de su hermano se fue aglomerando en su mente ocupando toda su atención, su imagen, sus consejos y miles de recuerdos a lado suyo. Pero solo el mas importante para Sehun, acaparó su mente por completo, ese día, el primer día en que conoció a quien sería su mejor amigo y hermano. Aquél niño de ojos dorados que siempre sonreía y le enseñaba todas las cosas que amaba.

Aquel niño, que se convirtió en un gran alfa, ahora su hermano ya no estaba. Pero aun cuando escuchó que JongDae murió, el no lo creyó. De alguna manera sentía que JongDae seguía vivo aunque no sentía en ese momento su presencia. Jongdae no podía morir tan fácil, era uno de los mas fuertes alfas después de todo, uno de los mejores que la manada tenía.

- ¡¡Sehun!! - su mente volvió a recobrar conciencia, giró su rostro y vio a Luhan corriendo en su dirección, su agitada respiración se lo decía - Estoy aquí Sehun...

Sus cuerpos colisionaron sin decir nada, ni una sola palabra mas. Sehun abrazó a Luhan angustiado, en la ignorancia de no saber nada sobre el paradero de Jongdae y no creyendo que en realidad estuviera muerto. Pero aún así, el miedo permanecía ahí, acabando con él, rondando su mente, diciendole que ya todo estaba perdido. Dos voces que deseaba no oir en ese momento.

Luhan vio a los padres de Suho recargandose uno sobre el otro, llorando por la muerte ya dicha del menor de sus hijos. Porque Jongin tampoco había vuelto, el no estaba junto a los sobrevivientes. Luhan aún podía recordar a aquel alfa unos años atrás cuando permanecía constante alrededor de Kyungsoo, sus bromas entre risas que siempre mantenía junto a su bella sonrisa. El alfa al igual que muchos era muy joven, tan solo un año mayor que él. Y después tener a Sehun abrazando su cuerpo, presionando sus brazos mas fuerte que de costumbre, firmes para evitar temblar, aunque no lo oía llorar podía sentir su dolor encarnando en su piel. Hacía que para Luhan fuera mas difícil no dejarse llevar por la tristeza de tantos seres queridos perdidos.

La noticia se esparcio rápidamente en la aldea, cada lobo sabía sobre la masacre que los guardias habían sufrido en su viaje de retorno. Porque los únicos sobrevivientes se encargaron de relatarlo punto por punto. Quedando claro así, que fueron atacados al anochecer por la manada vecina cuando ellos venían de regreso. La ira y los lamentos no se hicieron esperar, el dolor estaba tan fresco en ellos que difícilmente podían hablar racionalmente.

- Primero perdimos al alfa Kim y ahora esto - un alfa se alzó esa noche en el silencio que todos trataban de guardar mientras honrraban tributo a los guardias caidos. El retrato de los doce alfas que murieron se encontraba en el centro del cementerio con flores alrededor. Las velas a montón iluminando los rostros de aquellos  jóvenes que ya no estaban mas - Estoy seguro que ellos fueron los que mataron también al alfa Kim. Quieren luchar contra nosotros...

- Tienes razón, ellos quieren tener una guerra - se sumó una omega - Mataron a nuestros hijos, aún cuando teníamos un acuerdo de paz.

- Somos mas que ellos es por eso que hicieron esto. Quieren iniciar una guerra

- Sí, si - el coro y el apoyo comenzó a escucharse en los demás integrantes de la reunión. En el perpetuo frío que hacía en aquella noche con la luz de ma luna y las velas por los seres amados, ellos podían ver a la perfección el rostro de cada uno.

- Es un poco precipitado hablar de esa manera - Taeyeon se abrió paso entre las voces y murmullos infundados de miedo - No podemos asegurar que los que atacaron sean de verdad los de la manada vecina. Porque nadie conoce a esos lobos...

- Pero es la única manada que está cerca de donde ellos fueron atacados. Claro que fueron ellos no trates de defenderlos - volvió a insistir el primer hombre.