Proyecto puto

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Inició la película, francamente no me atrae mucho la idea de ser puto, pero lo hecho, hecho está.

La película empezó, no sé qué película es ya que Brad compró las entradas.

Al parecer es una comedia romántica, que tierno de su parte, arrastrar a su amigo para poder salir con Alice.

La película avanzó normal, llena de cosas cursis, y graciosas pero en una parte se pudo observar una escena en verdad triste.

-No lloro por ser débil, lloro porque me cansé de ser fuerte- dijo el protagonista soltando algunas lágrimas.

Alice hice un sonido entre cortado, al parecer esa triste escena le afecto. Miré a Deby haciendo una fina línea con los labios, al parecer también afectada.

Le tomé la barbilla e hice que me mirara a los ojos- solo es una película ¿sí?

Ella asintió- lo sé- dijo en un susurro.

Miré a Brad que me observaba con atención.

Me acerqué más a ella, me incliné y la besé. Ella abrió la boca, permitiendo que nuestras lenguas se enredaran, ella abrazó mi cuello impulsándome hacia ella, técnicamente nos comimos la cara.

Tiempo después nos separamos, ambos recuperando el aliento.

-¿Quieres terminar de ver la película o podemos ir a mi casa?- dijo sonriendo y recuperando el aliento.

Miré a Brad, estaba algo impresionado-salgamos de aquí- dije parándome y tomando su mano.

Ella se paró y le guiñó a Alice, sip ahora sí, Brad estaba impresionado, sonreí y salí de la sala con Deby.

 Fuimos a su casa y bueno, tuvimos sexo. Y heme aquí bajo las sábanas de una cama con nada más y nada menos que Deby Dosom.

Ella sonrió tiernamente- ¿quieres ir por algo de comer?

-Claro- guiñé el ojo y me puse mis bóxers, consciente de que estábamos solos en su casa, ya que sus padres están de viaje y la mucama salió a hacer algunas compras, decidí quedarme así.

Ella se puso la ropa interior y un vestido muy revelador.

-¿No te vestiras?- me dijo sonriendo y poniéndose zapatos.

-¿Quieres qué lo haga?

-Nop- sonrió.

-Entonces vamos a la cocina, nena.

Fuimos a la cocina y comimos algo de comida chatarra, hasta que se escuchó la puerta principal abrirse.

-¿Quién crees que sea?- dije parado, apoyado contra la mesa, única prenda, mis bóxers. Mierda.

-Tranquilo, el ama de llaves tarda horas en venir, o es el jardinero, que nunca entra a la casa sino se queda en el patio o es Alice.

-Deby…- reconocí la voz de Alice.

-Estoy en la cocina- dijo lo suficientemente fuerte para que Alice escuchara.

Ella entró y me vio parado semidesnudo, casi se le cae la mandíbula.

-Hola Alice- le sonreí.

-¿Adam? ¿Qué haces aquí? ¿y dónde está tu ropa?- dijo sin parar de mirarme.

-¿Me creerías si te digo que la doné a caridad?

-No lo molestes- dijo Deby- y deja de mirarlo así.

-No puedo culparla- dije sonriendo.

Deby sonrió, se acercó a mí y me acarició los abdominales.

Brad entró a la habitación, tenía una expresión de real sorpresa, reí.

-Hola Brad- dije sonriendo mordiéndome el labio inferior mientras Deby seguía hurgándome.

Él abrió la boca para decir algo pero las palabras no salían.

Miré a Deby- ¿Te parece bien volvemos a tu habitación?- dije tocándole el trasero.

-Me parece genial- se mordió el labio.

Brad y Alice estaban paralizados, aguante el impulso de reír.

-Súper- dije violándola con la mirada y ambos nos fuimos sin mirar atrás.

La chica de mis sueñosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora