« one shots » [quinto escalón]

↪duki, parte 2

Suelto un bufido frustrado alejándome de Lola.

Amor, por favor. No es como pensás. —dice intentando agarrarme nuevamente pero me alejo.

¿Qué no es como pienso decís? Loca, es obvio que lo que pienso es verdad, ahora todo tiene sentido. ¡Solo volviste conmigo porque no querías que Paula sea feliz! Sos una mierda, la vez que nos viste en mi casa hiciste que se vaya de mi lado y todo porque se suponía que todavía me querías, cuando no era así y vos lo sabes perfectamente. —suelto molesto.

Ah, bueno. ¿Ahora la culpa es toda mía? Te recuerdo que vos fuiste el que salió detrás mio cuando me viste soltar unas par de lágrimas. —murmura con una sonrisa burlona.

¿Y como no voy a salir detrás tuyo si estabas llorando? —digo exasperado, su comportamiento solo hace que me frustre cada vez más.— No soy tan basura.

¿Y qué me decís del "amor" que me dijiste? Por eso ella se fue, se dió cuenta que en tu vida sobraba, siempre lo hizo. —asegura fijando sus ojos en los míos.

No, loca. En mi vida la única que sobra sos vos. Sí, la verdad es que sí te dije 'amor' ese día pero lo hice porque yo en ese momento confundí las cosas con vos, creí que no te había superado, pero no era así. Ahora confirmo que ya no siento nada por vos, ni un poco. —veo como en su rostro se refleja la sorpresa debido a mis palabras.

¿Qué? ¿Qué estás diciendo, gordo? ¿Con esto me estás dejando? —suelta.

Lola, acepta que ya terminamos hace dos meses. Ya está, no entiendo porque seguís volviendo a mi casa. Siempre venís y para lo mismo, para pelear, para dar vueltas con un tema que ya terminó. Dale, andate. —digo a la vez que con cuidado la voy llevando hacia la puerta de salida.— Seguí con tu vida, conoce nuevos pibes, hace lo que se te cante pero a mí déjame tranquilo. —una vez ella afuera de casa cierro la puerta.

Escucho como toca la puerta unas par de veces pero no le doy bola y me tiro en el sillón.
Agarro mi celular, lo desbloqueo y veo que tengo un mensaje de un amigo.

Ema:
Ponete las pilas gorditoooo

con q?

Ema:
Con tu wacha, pa
Bah, tu ex wacha😂

dale perro
q pasó con pau?

Ema:
Q te la están queriendo sacar,
eso pasa
Así q meteleeeee

Veo el último mensaje de Ema y no le respondo, bloqueo el celular y lo revoleo al otro lado del sillón.

Me paso las manos por la cara hasta llegar al pelo y tirar de este, en señal de frustración.

Saber que hay pibes que andan detrás de Pau me re caga, ya son tres meses desde la vez que Lola nos vio con Pau y todo el quilombo que se armó.
En ese momento salí detrás de Lola porque estaba seguro de que seguía sintiendo cosas por ella, pero a medida que pasó el tiempo me di cuenta que no, que estaba equivocado porque empecé a extrañar a Pau. Comparaba a Lola con Pau, algo que no me había pasado con otra mina antes que ella.

Tardé casi un mes en darme cuenta de que ya no sentía nada por Lola, intenté hablar con Pau pero como era obvio, me mandó a la mierda.
No sé qué hacer.
La extraño una banda.

En un momento de decisión me levanto, agarro las llaves de casa y me voy, en dirección al depa de Pau. Ya pasaron dos meses desde la vez que la fui a buscar, así que espero que al menos ahora me escuche.

Llego al edificio y subo hasta el piso 3, que es donde vive ella, obviamente en ascensor. Me acerco a su puerta y toco despacio, espero un rato pero como nadie responde, golpeo la puerta más fuerte.

No pasan ni diez segundos cuando Pau me abrió la puerta, al verme creí que me iba a sacar cagando como la última vez pero no fue así, al contrario, al verme me abrazó y enterró su cara en mi cuello.

Te extrañé tanto... —susurra, y ahí es cuando me doy cuenta que estaba llorando.

Y yo a vos, bebé. —la separo un poco de mí para ver su rostro bañado de lágrimas, a lo cual no tardo en secar con mis dedos.— ¿Qué pasó, Pau? —murmuro suavemente dejando un beso en su cachete.

Roco... —dice apretando sus labios.

No necesite que me digas más nada, ya había entendido. Se preguntarán ¿Quién es Roco? Bueno, Roco es su perro, ya era grande y estaba enfermo, según me dijo ella tenía un tumor en el estómago. Y bueno si ella está así es porque se fue. Ustedes dirán que su comportamiento es exagerado para con un perro, pero no, ella lo quería mucho, era muy importante para ella. Lo tenía desde los 9 años y desde ahí no se despegaron nunca, fue el único perro que tuvo ya que sus viejos no le dejaban tener más, por lo que su perdida es muy dolorosa para ella.

Y la verdad que verla así de mal, me pone mal a mi también, solo quiero que ella esté bien.

Suelto un suspiro y acerco su cara a la mía, rozando nuestros labios para luego atraparlos con los míos.
Ella se deja llevar, y al momento de separarnos me lleva hacia el sillón y se acuesta conmigo a su lado abrazándome. Aferro mis brazos a su cintura, sintiéndome completamente bien aunque no sea el momento correcto para decirlo, pero es así como me siento.
Por al fin tenerla de nuevo, junto a mi, en mis brazos. Si bien, sé que esto se podría decir que es como "aprovecharme del momento" por el estado de vulnerabilidad en el que ella se encuentra, pero la verdad es que no me importa.
Porque lo único que pienso es aprovechar cada momento con ella a mí lado, así sea que en unos días cuando se sienta mejor me saque a patadas.

Aunque sinceramente espero de todo corazón que no sea así, porque no la quiero lejos mío, mi lugar está junto a ella y nadie más.