Capitulo 30 "Mi nueva familia"

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  —¿De verdad estas bien?

Lucy tomo la mano de Natsu, estaban en casa de Natsu, Nashi estaba dormida en el regazo de Lucy, con su otra mano Lucy acariciaba los cabellos rosados de Nashi.

  Lucy se limito a asentir con la cabeza.

—Bueno, mi padre tampoco aceptaba mi relación con Lissana.  

Lucy lo miro atenta, pero en el fondo no le agradaba que mencionara a esa mujer. 

  —¿Y que hiciste?

Natsu se sento y paso uno de sus brazos por la espalda de Lucy hasta tenerlo en el hombro de Lucy, centro la mirada en su hija quien dormía con una sonrisa en el regazo de Lucy.

  —Me pelee con mi padre.  

Lucy soltó una risa, eso era lo mismo que se esperaba que Natsu le contestara.

—Al final nos disculpamos, pero aun así ella siguió odiando a Lissana.

—¿Y eso en que me ayuda?

Natsu sonrió.

  —En que si hablas las cosas con tu padre puede que se disculpen, aunque me siga odiando claro.

Lucy negó con la cabeza.

—Yo te quiero a ti y quiero que los demás te acepten, mis padres, mis amigos, todos, quiero que todos mis conocidos te acepten como mi pareja. 

Natsu abrazo a Lucy estrechándola entre sus brazos, teniendo cuidado de no moverla demasiado para que Nashi no se despertase.  

  Los días pasaron, la relación de Natsu y Lucy crecia y se hacia mas fuerte con cada día, el padre de Lucy  dejo de transferirle dinero a su tarjeta, por lo que solo recibía lo de su trabajo como maestra.  

Ya no podía pagar una renta y gastar en cosas del hogar, Levy le ayudo los primeros meses, pero la falta de dinero comenzó a hacerse notar y al final Natsu le pidió que se mudara con el, ahí no tendría que pagar ninguna renta, al final, luego de que Natsu le suplicara que aceptara, lo hizo con la única condición que ella también ayudaría en los gastos del hogar. 

Lucy despertó, era el primer fin de semana después de que Lucy se mudara con Natsu, y no podía evitar sentirse como una invasora, sin embargo los brazos de Natsu los cuales la estaban estrechando con suavidad, sin embargo los echos actuales apuntaban a otra cosa la sujetaba con una increíble fuerza que Lucy no podía moverse, era como si alguien o algo le intentara quitarle a Lucy y Natsu se negara rotundamente. 

  —Mamí.

Y como siempre, no faltaba la pequeña Nashi quien igual que Natsu tenia sus pequeños y femeninos brazos sobre la cadera de Lucy. 

—Vamos... A levantarse.  

Y ese era el primer fin de semana de Natsu y Lucy como una pareja independiente, Lucy solo vivía del dinero que le daban como maestra, y no era mucho no podía darse cualquier lujo sin pensar antes si podía o no comprarlo, por otra parte Natsu tenia muchos gastos, su hija, su escuela, Lucy, el auto, su hogar; ah, y su leucemia. 

  —¿Entonces regresaras a la oficina?

Natsu asintió con la cabeza mientras Lucy le servia el desayuno, si bien Lucy se lo ponía a pensar parecían un matrimonio, se sonrojo con la idea.  

  —A si tendremos mas dinero y podremos salir a lugares caros.

—Sabes que no me importa salir a lugares caros, con estar contigo y Nashi me basta.

Papa solteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora