Mi Crush

No siento nada por ti

Estaba ebria en muy poco tiempo Thomas se puso a un lado mío intentando hacerme reír pero no funcionó yo estaba enojada con él por haber provocado a Alex.

—¿Estás enojada?

—Por supuesto que estoy enojada ¿Porque lo hiciste?

—Por celos estaban ahí bailando como si nada hubiera pasado, felices de la vida y yo—bajo la mirada—lo siento.

—Se supone que para eso era esta fiesta para que yo me divirtiera y me sintiera bien y la verdad lo estaba haciendo hasta que ustedes lo arruinaron.

—Lo lamento pero soy impulsivo y cuando lo ví ahí—señalo la pista—Nose me dió rabia ver cómo bailaban como después de lo que te hizo actuaste como si nada hubiera pasado.

—Quedamos en ser amigos y con el tiempo si yo podía.volver a lo que éramos antes.

—¡Después de todo lo que hizo, ¿Lo vas a perdonar?!

—Nose dije que vería nada es seguro aún.

—Para mi eso ya es seguro—se levantó y yo lo seguí

—No puedes enojarte por eso yo en ningún momento dije que tú y yo llegaríamos a algo siempre hubo límites entre nosotros.

—Pero yo tenía la esperanza de hacerlo y con esto que me dices me la has quitado.

—Mira—levante su cabeza con mi mano—Todo puede pasar en ese tiempo y tal vez yo decida no volver con él y conocerte más a ti no sé.

—No lo creó—se fue

Poco después ya estaba bailando muy pegado a una chica lo cual le resta puntos cada que le digo algo que no le gusta se va a beber o a estar con otra chica, todos se estaban divirtiendo excepto yo, estaba enojada conmigo misma

—Lamento lo que hice.

—Ultimamente he escuchado muchas disculpas de tu parte.

—Lose pero él empezó.

—Esta no es una competencia de haber quien mea más lejos soy un ser humano no un objeto  y ya están lo bastante grandesitos para seguir peleándose.

—Lo se pero aveces es imposible ignorarlo.

—Ya dejémoslo así se supone que esta fiesta es para que yo me divierta y te aseguro que no lo estoy haciendo.

—Entonces ven, vamos a bailar.

—Nose si pueda.

—Mira ten—me dió una botella de whisky—Con esto olvidaras todo y te la pasarás de maravilla.

—¿No sé supone que odias que yo tomé?

—No cuando se trata de que te diviertas.

Suspiré y la tomé le di varios tragos hasta que comencé a sentir la lengua dormida y un poco de mareo Alex me llevo a la pista de baile, Thomas y su pareja eran el centro de atención hasta que Alex y yo llegamos, bailabamos muy pegados y el pasaba sus manos por todo mi cuerpo mientras yo movía mis caderas al compás de la canción sentí una leve capa de sudor, bailabamos como profesionales era una sensación fantástica teníamos las miradas de todos los presentes y aplaudían eufóricos, después se unieron a nosotros dejándonos en medio.

—Bailas como una Diosa.

—Tú no lo haces nada mal.

—Que mentirosa eres.

—No lo soy—sonreí—Te extrañaba.

—Yo igual linda todas las mañanas quería ir a verte, quería ir por ti a la escuela o que saliéramos a algún lugar.