Otra oportunidad para amar |Jortini|

Capitulo 30: Un día muy especial - Parte II

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Tini aún no podía creer que Sophie le hubiera llamado mamá, pero el cariño que tenía por la pequeña era tan grande que no pudo negarse, Sophie era como su hija.

-¿De verdad quieres que sea tu mamá? – pregunto Tini.
-Si, así tendré dos mamás – respondió Sophie – una en el ciedo y una aquí.
-Si mi amor – dijo Tini abrazándola – ahora tendrás dos mamás.

Tini estaba emocionada y ansiosa, en menos de 24 horas sería la esposa de Jorge y junto a sus pequeñas formarían una familia, pero a la vez estaba muy nerviosa, porque luego de la boda se irían de luna de miel con Jorge, ñas niñas quedarían al cuidado de Mechi, Cande y Clari, yns pesar de que sabía que las niñas quedaban en excelentes manos, no sabía como pasaría  Gia  esos días, ya que nunca había pasado  más de un par de noches lejos de Tini.

Jorge aún no regresaba así que se dedico a revisar algunas cosas de última hora, mientras Sophie veía televisión, estaba más preocupada por estar lejos de Gia tanto tiempo que por la boda en sí, gracias a Mechi, Candr y Cari más otros todo estaba listo, Amy tenía todos los atuendos listos, ahora solo debía esperar y disfrutar el día de su boda. Un rato después, Jorge regreso a la habitación.

-¿Y las niñas? – pregunto Jorge.
-Gia aún duerme y Sophie esta viendo televisión.
-Esta bien – dijo Jorge – me tarde mas de lo que creí, porque quise asegurarme que todo esta listo para mañana.
-No hay problema – dijo Tini sonriendo - ¿puedes quedarte con las niñas un rato?.
-Claro - dijo Jorge - ¿Por qué?.
-Mechi me pidió que llegara – dijo Mechi – ni idea que quiere.
-Ve tranquila – dijo Jorge dándole un beso – yo cuido a las niñas.
-Gracias – dijo Tini tomando sus cosas – ya regreso.

Jorge vio a Tini salir de la habitación y sonrió, no podía esperar para unir su vida junto a Tini. Luego de un rato fue a revisar como estaban las niñas, al entrar a la habitación, encontró a Sophie tratando de sacar  a Gia de donde dormía.

-¿Qué haces mi amor? – pregunto   Jorge acercándose a Sophie.
-Gia deperto y quise sacaila – respondió Sophie – llamaba a mami también.
-Todavía estas pequeña mi amor  - dijo Jorge tomando a Gia en brazos – ven, vamos afuera.

Sophie se puso los zapatos y luego Jorge camino con ambas niñas hacia el balcón, ya que con Tini estarían fuera por poco más de una semana, quería asegurarse que las niñas estarían bien.

-Papi – dijo Sophie de repente.
-Si princesa – dijo Jorge viendo a la pequeña.
-Estoy feliz que Tini sea mi mami – dijo Sophie sonriendo – ahoda tengo dos mamás.
-Si mi amor – dijo Jorge dándole un beso a Sophie- ahora tendrás dos mamás, una en el cielo y otra aquí.
-Si – dijo Sophie emocionada – y tamben una hermanita.

Jorge sonrió al ver como Sophie le daba un beso a Gia, las pequeñas habían creado un gran vinculo entre ambas y eso le daba ánimos a Jorge, sabiendo que las pequeñas estarían bien, mientras estuvieran de luna de miel. 


Ya que Tini aún no regresaba, Jorge ya había pedido la cena, así podrían comer e ir a la cama temprano, mañana tendrían un día muy ajetreado y necesitaban estar descansados, mientras Jorge cambiaba el pañal de Gia, escucho como la puerta se abría y luego como Sophie gritaba mamá, al  salir para encontrarse con Tini y Sophie, Jorge sonrió al ver a Sophie llamando mamá a Tini, pensó que eso tomaría tiempo, pero la relación entre Tini y Sophie siempre fue especial.

-Veo que ya pidieron la cena – dijo Tini cargando a Sophie.
-Si, hoy tenemos que ir temprano a dormir – dijo Jorge sonriendo.
-Vamos a comer entonces – dijo Tini.

Los 4 se sentaron a la mesa y se pusieron a cenar, mañana seria un día de locura total y necesitaban descansar, comieron entre risas y una platica amena, mañana la vida de los 4 cambiaria para siempre.

Al terminar de cenar, les dieron un baño a las niñas, les pusieron la pijama y poco después ambas dormían profundamente, sin mas que hacer decidieron ir a dormir, necesitaban descansar y estar relajados para mañana.

-¿Lista para mañana? – pregunto Jorge mientras ambos se metían bajo las sábanas.
-Si – respondió Tini – más que lista.
-Hay que dormir entonces – dijo Jorge abrazando a Tini – buenas noches, te amo.
-Yo también te amo – dijo Tini sonriendo.

Luego de besarse cayeron en un profundo sueño, ansiosos por lo que mañana pasaría.


El día siguiente empezó desde muy temprano y luego de un desayuno a solas con las niñas, se separaron para arreglarse en habitaciones separadas,  así se verían hasta la hora de la ceremonia. Las niñas se quedaron junto a Tini ya que ellas las prepararían, los vestidos que Amy había diseñado y confeccionado eran perfectos y hermosos.

Ya más tarde, Tini estaba casi lista, su maquillaje y peinado ya estaba terminado y solo faltaba que fuera la hora perfecta para poder terminarse de vestir y algunos detalles menores, Tini aún se sentía nerviosa, pero gracias a su hermana, Mechi y Cande, sus nervios se habían reducido un poco.

-Cande – llamo Tini a su hermana.
-¿Qué paso? – pregunto Cande.
-¿Dónde están las niñas? – pregunto Tini mientras terminaba de arreglarse.
-Mechi y Clari están terminando de arreglarlas – respondió Cande sonriendo – se verán hermosas.
-Si lo se – dijo Tini sonriendo.
-¿Nerviosa? – pregunto Cande.
-Si, un poco – respondió Tini.
-Tranquila, todo saldrá bien – dijo Cande.
-Gracias por todo – dijo Tini abrazando a Cande.
-De nada – dijo Cande sonriendo – solo quiero que seas feliz.

Tini iba  a decir algo pero escucho pasos y la voz de Sophie, al voltear, vio como Mechi y Clari salían de la habitación con las niñas, las cuales se veían preciosas, Amy había diseñado unos vestidos hermosos, eran color crema hasta la rodilla con pequeños toques de rosa claro, además llevaban en la cabeza una preciosa diadema de flores, se veían más que hermosas, como dos princesas, Tini no podía estar más feliz.

-Mami – dijo Sophie acercándose a Tini.
-Te ves preciosa – dijo Tini agachándose a la altura de Sophie.
-Gacias – dijo Sophie dándole un beso.
- Las trajimos para que las veas antes de llevarlas con mi hermano – explico Mechi – me ha estado llamando porque quiere verlas antes de la ceremonia.
-Llévalas entonces – dijo Tini sonriendo – ya casi es hora.
-Esta bien – dijo Mechi sonriendo – nos vemos en un ratito.

Tini le dio un beso a cada niña y se dispuso a darse los últimos toques, estaban a pocos minutos del inicio de la ceremonia.

Jorge estaba en su habitación esperando que llegara la hora del inicio de la ceremonia, estaba nervioso y ansioso y quería que  empezara ya.

-Con permiso – dijo alguien mientras la puerta se abria.

Jorge volteo y sonrió al  ver a Mechi entrar con ambas niñas, se veían hermosas.

-Papi – dijo Sophie corriendo hacia Jorge.
-Hola mi amor – dijo Jorge cargándola – te ves preciosa.
-Gacias – dijo Sophie sonriendo.
-Ya casi es hora – dijo Mechi acercándose a Jorge.
-Lo se – dijo Jorge poniendo a Sophie en el piso para poder cargar a Gia - ¿Cómo esta Tini?.
-Lista – respondió Mechi – pero un poco nerviosa.
-Lo imagine – dijo Jorge sonriendo.

Jorge jugó un ratito con las niñas, hasta que llego la hora de irse al lugar de la ceremonia, él junto a Mechi y  Ruggero se dirigieron al salón donde seria la ceremonia,  Mechi se quedo con las niñas en el lugar donde saldrían para caminar hacia el altar como las niñas de las flores, poco después Tini se les unió, lista pero un poco nerviosa por dar este gran paso.

Jorge estaba en su lugar en el altar, esperando la ceremonia diera inicio, ansioso y emocionado, el lugar estaba lleno de amigos y conocidos, quienes estaban felices por Jorge y Tini.

Unos minutos después la música empezó a sonar y al fondo del pasillo apareció Clari, una de las damas de honor de Tini, luego de las demás damas y Mechi, aparecieron al final del pasillo, Sophie y Gia, todos se derritieron de ternura al ver a las pequeñas caminando por el pasillo mientras arrojaban pétalos de flores, Jorge no pudo evitar sonreír al ver a sus pequeñas, quien a pesar de su corta edad, se portaron como un par de ángeles.

Cuando las pequeñas llegaron al altar, todos los asistentes se pusieron de pie y la música cambio a una más lenta, luego al final del pasillo, apareció Tini, Jorge se quedo anonadado, ella se veía mas hermosa que nunca, todos la observaban detenidamente, admirando su belleza, al llegar Tini al altar, se situó  al lado de Jorge y la ceremonia dio inicio.

-Jorge Blanco – dijo el sacerdote -  aceptas a Martina Alejandra Stoesel como tu esposa, prometes, amarla y respetarla, todos los días de tu vida, hasta que la muerte los separe.
-Si, acepto – dijo Jorge sonriendo.
-Martina Stoessel – prosiguió el sacerdote – tomas a Jorge Gabriel Blanco como tu esposo, prometes amarlo y respetarlo, todos los días de tu vida, hasta que la muerte los separe.
-Si, acepto – dijo Tini sonriendo.

Luego de la imposición de los anillos y unas palabras más por fin llego el momento culmine.

-Por el poder que me otorga la iglesia, los declaro marido y mujer – dijo el sacerdote – Jorge, puedes besar a la novia.

Jorge tomo a Tini de la cintura y ambos se fueron acercándose  hasta unir sus labios en un tierno beso, ahora estaban unidos para toda la vida.

Luego de terminada la ceremonia, hicieron una sesión de fotos tanto con las niñas, como con la familia y amigos, no podían ocultar su felicidad y eso pudo notarse en cada fotografía.

Luego de las fotos, los invitados se dirigieron al salón donde seria la fiesta, Tini y Jorge esperaron fuera para hacer la entrada junto a las niñas, habían querido incluirlas, pero no sabían que era lo que Mechi había tramado.

-Aquí vienen las princesas - dijo  Mechi haciendo que Jorge y Tini voltearan.

Ambos no pudieron evitar sonreír, ambas niñas estaban sentadas en un hermoso auto eléctrico que había sido bellamente decorado y que era manejado a control remoto.

-Les dije que quería algo original – dijo Mechi riendo – Ruggero lo manejara y Cande y Clari serán encargadas de sacarlas del auto cuando lleguen al lugar indicado.
-Esta bien – dijo Tini sonriendo.

Luego de asegurar que las niñas estaban bien, se colocaron en su lugar y las puertas se abrieron, Ruggero manejo el auto hacia dentro del salón y por un monitor pudieron observar como todos sonreían y  aplaudían al ver entrar a las niñas.

Luego fue hora de la entrada de los novios, Mechi y Ruggero se fueron a su lugar y las puertas se abrieron nuevamente permitiendo a Jorge  y Tini entrar, donde fueron aclamados y aplaudidos por sus invitados.

-Demos un fuerte aplauso a el Sr. Y la Sra. Blanco – dijo el host de la fiesta.

Jorge y Tini se dirigieron al centro de la pista, listos para su primer baile como una pareja casada, habian escogido la canción perfecta.

-Te amo – dijo Jorge al oído de Tini mientras bailaban – te amaré por siempre.
-Yo también te amo – dijo Tini sonriendo.

Unieron sus labios en un hermoso beso,  felices de por fin estar casados, sabiendo que ya nada podría separarlos.

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Perdón por la tardanza, pero aqui esta espero les guste.

El fin de semana habrá nuevo capitulo