Capítulo 5

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Si decido quedarme es porque no existe un dolor más grande que la de perder un hijo, no importa si este sigue vivo, el simple hecho de haberlo perdido sin saber el porqué es razón más que suficiente para sentirse devastada

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Si decido quedarme es porque no existe un dolor más grande que la de perder un hijo, no importa si este sigue vivo, el simple hecho de haberlo perdido sin saber el porqué es razón más que suficiente para sentirse devastada...
Charlotte Johnson.

La mañana llegó, solo que esta vez me levanté más tarde que de costumbre y bajé a la cocina para hacer el desayuno. Había una nota de mi hijo diciéndole a su padre que era tarde para ir a la escuela y no podía esperarle, pero no había nada para mí.

   Decidí que haría todo por vivir esos días en paz y si no se podía simplemente le echaría.

    Me preparé algo para desayunar y justo cuando terminaba y salía de la cocina Colin entraba acomodándose la corbata.

    Lo vi husmear en la cocina pero solo caminé a la habitación y no saldría hasta saber que se había ido.

—Charlotte —dijo deteniendo mis pasos a la planta alta—. No hay nada para comer.

    No me giré pero tuve ganas de llorar al entender la manera en que era vista en esa casa, porque justo ahora comprendía cuál era mi lugar ahí a los ojos de Colin.

    Me giré con lentitud para encararlo.

—Mi hijo se ha ido ya y yo he desayunado —dije impertérrita—. No entiendo tu pregunta.

—No has dejado nada hecho.

    Su cinismo no tenía límites.

—Te recuerdo que anoche te quedaste sin esposa y con ello se fue también la empleada doméstica —dije resuelta—. Tal vez Coral sea capaz de llevarte el desayuno ahora a la oficina porque yo no.

    Me di la vuelta dejándolo parado y continué mi camino hacia la habitación.

    Apenas escuché la puerta salí de la recámara para llamar a mi amiga que antes de que me diera cuenta ya estaba ahí abrazándome y llorando conmigo tras haberle contado absolutamente todo.

    Después de confesarle mis problemas, mi dolencias, la humillación de verme desplazada de esa manera por una jovencita sin valores y peor aún de sentir que jamás podría reparar mi corazón.

—Tu hijo tiene que entender que la separación es inminente —dijo autoritaria—. No se trata de él sino de un bienestar para ti y aunque lo vea difícil ahora al final entenderá que fue lo mejor. Si se quedan juntos van a destruirse.

—Si decido quedarme esta semana es por él —dije segura de mis palabras.

—Pero te haces daño —replicó con brío—. Tu hijo tiene que entender, ya no es un niño.

Si decido quedarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora