Destinos Cruzados Nanatsu no taizai (zeldris x ti)

Capitulo 5

Comprensión y unión.

Sara se dirigía a tu habitación con un desayuno para ambos, se sentía bastante alegre porque era la primera vez que te veía con un hombre en mucho tiempo y aunque parecía que no soportabas su cercanía o su presencia, se notaba que en parte te agradaba.

Al ver que nadie respondía después de haber tocado, entro con cuidado y la imagen que vio le saco una sonrisa.

Zeldris y tu se quedaron dormidos abrazados, ambos estaban acostados en el centro de la cama, tu cabeza estaba sobre su pecho, su brazo izquierdo tenia rodeada tu cintura y su mano derecha estaba encima de la mano que tenias sobre su pecho.

Tu rostro mostraba tranquilidad y paz, una mirada que hace mucho no mostrabas.

Al ver que estabas empezando a despertar, Sara dejo la puerta entreabierta, y quedo fuera del cuarto solo para ver cual seria tu reacción al despertar junto a él.

Abriste tus ojos un poco somnolientos y lo primero que notaste fue un peso en tu cintura y algo cálido en tu mano, cuando fijaste tu vista en esos puntos buscaste a la persona responsable.

Cuando Zeldris noto que te habías quedado dormida en su hombro te acostó en la cama, pero antes de que él se pudiera levantar lo sujetaste de su manga y le habías pedido que se quedara a tu lado, porque no querías dormir sola, él accedió con duda, porque no sabia como actuarias en la mañana, pero al ver tu carita con lágrimas, no te lo pudo negar, se acostaron mirándose cara a cara y a cierta distancia, pero de alguna manera terminaron abrazados.

Todos los sucesos de anoche pasaron por tu mente en un flash y aunque normalmente lo primero que harías seria golpearlo, lo que había hecho por ti le salvaba.

Suspiraste resignada, para la siguiente no serias tan vulnerable, con cuidado te separaste de él para no despertarlo y te sentaste a la orilla de la cama, te sentías un poco extraña, las pesadillas no se hicieron presentes esta vez y aun que la sensación de tranquilidad era extraña la disfrutarias lo mejor que podías.

Sara seguía del otro lado de la puerta, esperaba algún alboroto por tu parte, pero al ver que solo te apartaste de él suspiro aliviada y finalmente entro al cuarto.

— buenos días Stella, ¿como dormiste?— preguntó con una sonrisa.
— bastante bien, gracias — respondiste — ¿se quedara aquí mucho tiempo?— preguntaste mientras veías al demonio dormido.
— dijo que iría a la Necrópolis, la capital de los muertos, al parecer la ciudad es real — respondió —¿no te gustaría ver si él esta ahí?
— él no esta ahí, es lo único que te puedo decir — comentaste cortante.
— bueno, por cierto, ¿no has visto a Gelda cuando llegaste?— preguntó preocupada — la ultima vez que hable con ella, me pidió que le reservara un cuarto, pero no ha venido desde entonces — comentó.
— no, no he sabido nada de ella, por lo que se, el sello donde estaba atrapada se rompió pero no la he visto — respondiste negando con la cabeza.

Zeldris se enderezó de golpe, ¿como es que conocías a su amada?¿y porque tenia un cuarto reservado si ella le pidió a su hermano que la matara? No tenia sentido.

— que bueno que te despertaste, les traje el desayuno y...— Sara dejo de hablar cuando vio la cara seria del demonio.
—¿te pasa algo?— preguntaste.
—no... No es nada, solo... Quede aturdido un poco — respondió.

Ninguna insistió, después de desayunar se despidieron de Sara y salieron de la posada por el túnel que habían entrado.
Al estar fuera del túnel, te decidiste por hablar.

— supongo que es un hasta aquí — dijiste extendiendo la mano hacia él — gracias por todo lo que hiciste para ayudarme, encontrare la forma de pagarte.

Zeldris veía tu mano, estaba pensativo, pero finalmente estrecho tu mano.

— quiero que vengas conmigo a la Necrópolis —.

                         *****
Merlín se encontraba metida en sus experimentos, aun intentaba encontrar la forma de traerlo de regreso, pero no sabia si su alma ya había sido absorbida por la espada al igual que su sangre, tenia que encontrar la forma de traerlo de alguna manera.

— Hola merlín, tiempo sin verte, ¿no? — dijo Meliodas entrando al laboratorio de la maga.
— lo mismo digo capitán, ha pasado tiempo, espero que mi hermana este intacta — comentó la maga con su típica sonrisa.
— no te puedo garantizar nada, nishishi — respondió el rubio — quisiera pedirte un favor, si no te molesta.
— tiene que ver con su hermano menor me imagino, estoy segura que él va a estar bien, regresara en poco tiempo — dijo la maga — tomaste la decisión correcta al decirle la verdad antes de que lo halla escuchado o si no las cosas hubieran sido peores.
— si lo se, por eso decidí decirle la verdad y aunque me preocupa él no es la razón de mi visita — dijo serio.
—¿y cual es entonces?— pregunto la maga.
— hace poco Ludociel y los otros arcángeles dijeron que una chica llego a Britania hace dos noches  y que fue enviada por el consejo de los clanes como supervisora, ¿sabes como sera eso? — pregunto al final, por alguna razón había algo en todo eso que le preocupaba al rubio.
— lamentablemente sí capitán, lo que ella supervisara sera su relación, por lo que tengo entendido esta prohibido que dos personas de raza diferente lleguen a tener una relación amorosa, especialmente si es un ángel y un demonio — respondió la maga — he escuchado que en algunos casos llega a haber excepción, pero no se sabe con certeza — concluyó.
— entonces...¿que pasaría si Elizabeth y yo no aprobamos la supervisión? — pregunto serio.
— ambos deberán de gobernar sus respectivos clanes por separado y tendrán prohibido acercarse o hablarse — respondió.

Eso ultimo no le gustaba en lo más mínimo, tenia que pasar la prueba sí o sí o podría perder a su amada otra vez, pero esta vez de forma definitiva.

—¿crees poder localizarla?

                          *****
“¿como demonios accedí a esto?” pensabas mientras seguías a Zeldris por los aires, ambos se dirigían hacia la Necrópolis.

Flashback.

“— quiero que vengas conmigo a la Necrópolis — dijo y su mirada seria daba a entender que no bromeaba.
—¿porque?— preguntaste confundida por su petición.
— porque estoy seguro de que querrá verte — respondió.
—¿quien?— estabas muy confundida.
— Gelda — dicho eso él extendió sus alas y segundos después lo seguiste.

Presente

¿Porque Gelda estaría en la Necrópolis? No tenia sentido, si ella estaba muerta ¿porque reservó un cuarto en la posada de Sara? Nada coincidía y lo que más te intrigaba era Zeldris ¿que relación tubo con tu antigua amiga?

Después de varias horas de viaje finalmente llegaron a su destino.

— ¿como piensas contactarla? — preguntaste.

— primero tendría que encontrar a alguien de la capital que me de la pista sobre como entrar y lo demás saldrá solo — respondió.

Caminaron por las calles desoladas del pueblo que tenia contacto directo con su destino hasta que por fin encontraron a alguien que los ayudaría.

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Hola mis lectores!!!
Espero les guste el capítulo.
Comenten que les pareció y den su estrella eso me motivaría mucho a escribir.

Diganme una cosa:

¿Van a querer lemon de Melizabeth?                ---->

Pongan aun lado de la flecha su respuesta.

Hasta el próximo capítulo.