¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
●●●
Hoy era un día agitado en el Cosy Bear Café pues mi "querida" jefa se le ocurrió ampliar el menú y poner unas recetas que jamás había puesto hasta el día de hoy. Y al parecer toda la maldita ciudad se enteró.
Los clientes se acumulaban más y más haciendo que la tarea se complique tanto para mí como para Hyun, mi compañero y amigo. Y para peor, Clemence tuvo que elegir justo este día.
Este maldito día en donde el profesor Rayan nos iba a dar una clase bastante importante según él, pero por más que insistí la jefa no me dejó ir. Hyun también intentó ayudarme pero era practicamente imposible comvencerla. Su única excusa era que no podía irme del trabajo bajo ninguna circunstancia y que tampoco podía dejar a Hyun hacer todo el trabajo solo.
-Lamento que debas faltar a clase hoy.- me dijo Hyun limpiando una mesa para otros clientes que llegaban.
-Tú no tienes la culpa.- suspiré y miré la hora, ya me había perdido la clase.- Espero que Rayan no se moleste...
-¿Quién?
-El señor Zaidi, es con quien me tocaba clase hoy.- el pelinegro asintió.
Por alguna razón me había acostumbrado a llamarlo por su nombre y eso, para algunas personas, se les hace extraño que le diga así al profesor. Yo no le veo lo malo, hasta todavía nos seguimos tratando de "usted".
Si me hubieran dicho que tendría una especie de amistad con un profesor me hubiera reido.
Cuando voltee me encontré con la mirada para nada agradable de Clemence. Creanme, no debo ser la única que nota que esa mujer tiene un problema conmigo y con cualquier mujer "joven y bonita" que se le acerca a Hyun.
-¿Por qué sigues allí parada? ¡Hay gente que espera!- hice mi mayor esfuerzo para no rodar los ojos y seguí con lo mío.
[...]
Mientras atendía a una abuelita sentí la silla de la mesa anterior moverse. ¿Acaso a todos se les ocurrió venir hoy a fastidiarme la existencia?
-Señorita camarera, ¿me va atender?- ¿y este quien se cree?
-Disculpe señor, pero debe esperar su turno como todos los demás sino vaya...-- cuando me giré inmediatamente cerré la boca.
¿Que hace Rayan aquí?
-Vaya alguien parece estresada.- sentí mis mejillas arder como fuego.
Mierda.
-Hola señor Zaidi, ¿q-qué desea?
-¿Ya no soy Rayan para ti?- levantó una ceja sonriendo, agh odio que haga eso lo hace ver tan... mejor ni lo pienso.
-No, o sea, sí. Es sólo que no esperaba verle aquí.
-Pues yo esperaba verla en mi clase, para serle sincero.- agache la cabeza, debe estar decepcionado, él mismo me dijo que adoraba verme en su clase por mi manera de ver las cosas y eso.- ¿Es por esto que no vino?
-No podía pedir el resto del día libre, mi jefa es un poco... estricta. Se le ocurrio hacer unos ajustes especiales al menú y parece que a toda la ciudad le gustó la idea.
-Ya veo... quiero un café.
-¿Con o sin azúcar?
-Cualquiera de los dos me gustan.- otra vez esa sonrisa encantadora aparecio en su rostro haciendo que este día no se convierta tan malo del todo.
Zaidi es bastante guapo, no mentiré, pero él y yo somos algo imposible por muchas razones.
-Está bien, enseguida vuelvo con su pedido, Rayan.- con una sonrisa en el rostro fui a buscar el café.- Un café... con azúcar, Hyun.
-Enseguida.
Cuando parecía todo tranquilidad y paz tuvo que llegar Clemence a cagarla.
-¿Y bien? Hay clientes que esperan su...--
-Aquí está el café, Sucrette.- sonreí y me fui de allí dejando a la jefa con la palabra en la boca.
-Aquí tiene su pedido.- Rayan me sonrió.- ¿Algo más?
-Sí, ¿Cómo piensas recuperar la clase de hoy?- seguro mi cara era de sopresa pues no lo había pensado.
-Se la pediré a Chani.
-Sabes que conmigo no se toma apuntes.- tiene razón.
Por segunda vez en el día, miré el reloj. Faltaban tan sólo unos cinco minutos para que termine mi horario; me senté frente a Rayan quitándome la maldita gorra de la cafeteria.
-Y... ¿Qué tal si usted me da la clase ahora?
-¿Cómo una clase particular?- de repente se acercó colocando sus brazos sobre la mesa.
Me alejé un poco ante los nervios de tener esos bellos ojos verdes tan cerca.
-Claro, sólo por si esto alguna vez vuelve a repetir. Aunque igualmente para la próxima intentaré convencer a...--
-Su, entiendo. No hace falta.- sonreí agradecida.
-¿Cuándo empezamos?
-Ahora mismo si quiere.- asentí.- Y si desea puede ser en mi casa, nadie nos molestara allí.
Casi se me cae la mandibula al oír eso.
¿Rayan Zaidi me está invitando a su maldita casa?
-Pero si usted no se siente cómoda...--
-¡No!. Con gusto iré a su casa.- volvio a sonreirme y bebió de su café.
Después de todo, no creo que sea tan malo ir a su casa ¿verdad?
¡Hola! Se me ocurrió este OS hace bastante y debía escribirlosobre todo porque Rayan es mi ruta. Espero que les guste♡
PD: seguramente en cada os ponga gif's como el del principio y quiero aclarar que sólo los saco de internet. No tengo ni idea sobre animes ni nada de eso asi que no hago ninguna referencia a nada ahre.
