28|Mi amigo

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Sirius Black ya no podía esperar más, necesitaba estar cerca de su amigo; el amigo que le había hecho tanta falta en los últimos años, en donde su vida se había  convertido en una verdadera miseria.

-Ya regreso ..- murmuró  el animago  y se levanto de la mesa muy rápido.

-¿A dónde vas? -le pregunto Remus con una ceja alzada -. ¿Me dejaras solo con Peter?

-Necesito ver porque James no viene a desayunar, es muy extraño que no esté aquí, el siempre era el que más temprano se levantaba cuando se trataba de comida ..

-Estuvo un poco extraño esta mañana, no me dirigió la palabra -dijo  Peter tímidamente-. Creo que estaba enojado por algo que hice, el problema es que no se que hice.

-Tal vez solo estaba algo cansado- dijo Remus restándole  importancia al asunto-. Será mejor que no lo molestemos, ya vendrá.

-Oh, tal vez ...¡ Por Merlín!-gimió Sirius todo aterrado-. De seguro el muy idiota se cayó de las escaleras por venir corriendo.

-¿Es enserio?

-Debo  ir a verlo, Remus, no puedo quedarme con los brazos cruzados- dijo Sirius todo nervioso y salio con rapidez del gran comedor.

Mientras caminaba  hacia la sala común de Gryffindor, vio pasar  a la tercera generación que se le quedaron viendo como si hubiera perdido la cordura, muchos quisieron preguntarle a  donde iba con tanta prisa pero el no contesto por lo nervioso que se encontraba. Llegó al cuadro de la Dama gorda, dijo la contraseña ( la cual fue incorrecta ) y al ver que no lo dejaba ingresar, se empezó a desesperar.

-¡Solo quiere ver si James está bien!-protesto -.  ¡Me conoces, sabes muy bien que soy Sirius Black!

“ No ingresaras hasta que digas la contraseña correcta ”

- ¡Pero! ¡¿Como quieres que sepa la contraseña?! ¡siempre la cambian y ya han pasado más de veinte años!

“ Entonces me temo que no ingresaras ”

- ¡Voy ingresar aunque tú no quieras!-se acercó al cuadro e intento abrirlo con todas sus fuerzas pero todo intento era inútil, la Dama gorda se lo impedía.

-¿Sirius, que haces?

Escucho que alguien decía a su espalda. Volteó y vio el  rostro sonriente de James.

-Quería ingresar a la sala común.

-¿Para que? Me sorprende que no estés en el gran comedor acabandote todas las salchichas- le dijo con una sonrisa.

-¿Porque no llegaste a desayunar?-le pregunto con los brazos puestos en la cintura-.Pensé que te había pasado algo malo, mi mente empezó a crear posibles accidentes.

-Me desperté temprano porque  quería darme una ducha, pero lunático no me dejó ingresar al baño del dormitorio, decía que quería tener su momento íntimo-se cruzó de brazos -. Intente despertarte, es decir a Canuto, juntos armaron un escándalo y al final me botaron del dormitorio y decidí mejor ducharme en el baño de los prefectos.

-Pero, creí que nadie podía ducharse ahí.

- ¿No lo sabes? Al parecer  no hay nadie en el colegio- le dijo James con una sonrisa-. La suerte me sonríe amigo, encontré a mi hermosa pelirroja  y le propuse ducharnos juntos.

-¿Crees que nací ayer ?- le pregunto Sirius con una  ceja alzada-. Lo único que puedes conseguir proponiendo eso, es una buena cachetada.

- Sí,  tienes toda la razón, es imposible mentirte- se  acaricio  el rostro  con dolor-. Desde ahora nunca  le  volveré a proponer algo así ..

-Oye, James, ¿Ya sabes?...es decir ¿Harry ya te contó sobre lo de Peter? -le pregunto Sirius con temor.

Al escuchar la pregunta, James se  olvido de  toda la  felicidad,  se sentó en  uno de los escalones con pesadez y suspiro un par de veces antes de responder.

-Sí, Harry ya me contó todo-le dijo con la mirada baja-. Es feo saber que no puedes confiar ni en tu mejor  amigo.

-Eso no es cierto-le dijo Sirius mientras se sentaba  a su costado-. Sabes que siempre puedes confiar en mí, yo ...yo no soy como la rata. James, sufrí mucho por tu muerte, también fue  muy estúpido de mi parte cambiar el guardián.

-Sólo querías protegernos, querías proteger a mi familia, eras capaz de dar tu vida por nosotros -le dijo James con una sonrisa de agradecimiento-. Jamás pensé que podrías hacer eso por mi, no pude dormir pensando en toda la horrible vida que pasaste en esa maldita prisión.

-Azkaban, no es tan mala ...

-Deja de mentir, esa prisión es el verdadero infierno.

-Sabes, todos los recuerdos que me quitaban los dementores  solo eran los tuyos; eran momentos realmente hermosos que pasábamos, las tonterías que hacíamos, las rabietas que le dábamos a lunático cada vez que rompiamos las reglas -le contaba Sirius con una sonrisa nostalgia- .Y el peor recuerdo que me hacían vivir a cada momento, era el de tu muerte ...

-Ya olvida todo eso, mejor recuerda ... ¿Recuerdas la ves que fuimos a una fiesta muggle?

-Cómo olvidarla, era Halloween-dijo mientras reía con nostalgia-.Te disfrazaste de una luna muy gorda, lunático casi te mata con la mirada.

- Pero tu disfraz fue el mejor, era el más sexy - le dijo James  mientras movía sus cejas- .Estabas muy caliente.

- Era un hot - dog

Ambos hombres rieron por un momento olvidándose  de todo lo malo que habían pasado.

-Sabes amigo, jamas pensé que te llegaría a perder- le dijo Sirius-. Siempre soñé con tener una verdadera  familia y la encontré el día en que te conocí en el tren,tu ...tu te convertiste en mi familia.

-Ya nunca te volveré a dejar, trataré de estar a salvo- le prometió James mientras le  palmeaba la  espalda-. Seremos la familia más grande, tu y yo nunca dejaremos de ser los hermanos más guapos de todo el mundo mágico.

-Seremos la pesadilla de Remus, lo haremos envejecer más rápido con cada tontera que hagamos.

-Sirius, escucha,  se que te enojaras por esto pero ...si algo no sale bien ...si no logran salvar a Lily o a mi, quiero que te olvides de la venganza hacia Peter y  solo te preocupes por ser un buen padrino para Harry- le dijo James con la mirada baja.

-No digas idioteces, nada malo te va a pasar - se acercó para poder abrazarlo-. Tendrás una hermosa familia, cuernitos, dijiste que nunca me dejarías y debes cumplir tu promesa o juro que cuando muera y te encuentre en la eternidad, te golpearé.

Después de un momento ( cuando escucharon el estomago  de James  rugir )  decidieron ponerse de pie y bajar hacia el gran comedor  para poder desayunar en familia.

Caminaron con tranquilidad mientras recordaban momentos grandiosos  de sus vidas y reían por cada tontería que decían. Cuando estuvieron a  seis  metros de  la puerta del gran comedor, vieron que  un rubio salia a  toda velocidad mientras el hijo de Harry lo seguía.

-¿Que tendrán ?-se asustó James -. Parecían algo perturbados, ¿Crees que pelearán?

-De seguro solo quieren conversar en privado- le respondió Sirius -. Ahora mejor vamos a comer, por cierto...no te vas a sentar  cerca de Peter.

VIAJE AL PASADO / Tercera Generación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora