Liza miraba el techo, o lo que creía que era el techo. No sabía cuánto tiempo llevaba cautiva, su habían pasado días, horas, semanas. Solo sentía pasar el tiempo.
Se encontraba encadenada sobre un viejo colchón, estaba sucia y maloliente, seguía con la misma ropa que había llevado a su cita con Jack. En la habitación solo había oscuridad, literalmente, no había ventanas o puertas que dieran luz. La única luz que veía era la que traían los hombres cuando le llevaban comida y la llevaban al baño, que se encontraba en esa misma habitación.
La estadía no podía ser peor, al parecer Lucas sabía algo que los secuestradores querían, por lo que muchas veces se lo llevaban para golpearlo, mientras que Liza escuchaba todo, sus gritos y su dolor, después solo lo traían a rastras y lo volvían a encadenar.
Mientras que con ella no eran mejor, también se la llevaban y golpeaban pero no le hacían preguntas solo querian que sufriera. Aún no la habían violado pero ella sabía que sólo era cuestión de tiempo para que lo hicieran.
Cuando no dormían, o no se los llevaban para torturarlos. Lucas y Liza hablaban muchísimo, sobre varias cosas, tenían diferentes temas de conversación, a veces se contaban chistes o anécdotas. En ocasiones él le hablaba sobre los casos más estúpidos que le había tocado resolver.
Mientras estaba a punto de dormirse los hombres abrieron la puerta, llevaban aquellas máscaras blancas y una lámpara.
-Sonrian -dijo uno de ellos mientras tomaba una foto, esa luz cegó de sobremanera a Liza.
Llevaban una cámara, y les tomaron una foto a ambos, después solo se fueron.
-¿Para que querrán esas fotos? -preguntó Liza cuando se fueron.
-Lo más probable es que sea una prueba para el rescate -respondió Lucas.
Liza se quedó reflexionado un momento.
-¿Le puedo hacer una pregunta? -dijo Liza cuando se le vino una idea a la mente.
-No tengo de otra.
-¿Por que se hizo policía?
Lucas suspiró y se quedó reflexionado por algún rato.
-Tengo un hermano gemelo.
-¡¿QUE?! -dijo totalmente incrédula. Y sin saber que tenía que ver eso con el ser policía.
-Se llama Louis, vive en Londres, acaba de terminar su carrera de doctor.
-Creí que sólo eran usted y Rose Marie.
-Lo éramos -se explicó al darse cuenta que Liza no decía nada- Mi mamá era una bailarina de Ballet como Marie, era una de las mejores, tenía eventos casi cada semana, y mi padre trabajaba en Wall Street, Al parecer vivíamos con mucho dinero. Pero después mi padre enfermo de Cancer y murió... Cómo nos dejó dinero pudimos sobrevivir bien sin él, hasta que mi madre... -parecia que no podía terminar la oración- fue asesinada por el El Fan Asesino.
Liza alzó las cejas sorprendida, el Fan Asesino fue quien mato a muchas personas que tomaban fama en Nueva York, sus asesinatos eran brutales, y escandalosos.
-...no teníamos a nadie, Louis y yo teníamos dos años y Rose Marie era una recién nacida. Nos llevaron a diferentes orfanatos después de unos años el mío cerro y me llevaron al de Rose, ahí supe que era mi hermana. Después de eso nos volvimos ella y yo contra el mundo... -añadió su voz sonaba con bastante tristeza.
Liza volteó a donde escuchaba su voz y sintió cierta lástima por él.
-A los 16 años supe la verdad y que jamás pudieron atrapar al asesino, y desde ese día decidí que sería policía.
