Dulce Aroma. →HyunMin←

Momento esperado

- ¿Qué estás haciendo? - la voz conocida dijo mientras intentaba asimilar este encuentro más raro agonizando en el suelo del susto.

De verdad me había asustado bastante este niño, encima justo aparece después de estar pensando en mis sentimientos reales por él. Aish, ya le vale...

Puse una mano en mi pecho tratando de calmar todo mi ser atemorizado. Si hubiese sido un desconocido, le habría dado una cachetada de las buenas que deja marca.

- Tonto, me has dado el susto más grande de toda mi vida. - acalorado, solté aire para mi frente que ahí caían unas gotas de sudor.

Primero, me tenía que preparar lo que venía; estaba seguro que ahora le diría mi amor a SeungMin y no estaba muy presentable.

El menor, que aún se encontraba literalmente delante mío, se hizo a un lado para sentarse a un costado apoyando sus manos en el césped.

- Lo siento, hyung, me dirigía a casa tras comprar unas cosas pero te vi tumbado aquí y me entró curiosidad saber qué hacias... No era mi intención hacerle gritar, de nuevo me disculpo. - suspiré poniéndome en la misma postura que el contrario, le miré.

El aire fresquito en ese momento, vino en dirección opuesta de donde dirigía la vista y movió mi cabello. El perfil de rostro de SeungMin, era realmente genial con ese toque del viento también moviendo sus pelos.

- SeungMin, te perdono, ahora deja esa cara larga y alégrate. - subí las comisuras de mis labios formando una pequeña sonrisa.- Sobre aquel día... - nada más mencionar eso, me miró con velocidad y ojos brillosos.

Mi corazón dió un vuelco por la imagen visualizada para después comenzar a palpitar desenfrenadamente. ¿Debería en estos instantes?

Tragué saliva acumulada de los nervios mientras los dos teníamos la mirada fija entre nosotros. No podía quedarme callado si él esperaba una respuesta mía.

- Hyung, espere. - me pilló por sorpresa cuando abrí la boca.- No fue una declaración al 100% lo del otro día, por eso hoy quiero hacerla correctamente. - tomó una gran bocanada de aire antes de seguir mientras sentía todo mi cuerpo inundarse de una sensación cálida.

Siendo sincero, tenía ganas de escuchar su confesión; me era tan esperada. Por fin, lograría lo que anhelaba.

- Empecé a sentirme demasiado raro el día que agarré tu teléfono sin permiso para agregarme, ¿recuerdas cuándo me acorralaste contra la pared? Fue desde ese momento que surgió lo extraño en mí. Las siguientes mañanas intenaba evitarte a toda costa, pero en una de ellas tú me perseguiste hasta casa y ahí no tuve más opción que cruzar palabras contigo. Gracias a un amigo, me hizo darme cuenta que era amor lo que estaba sintiendo y no simplemente una fuerte amistad; me estaba engañaba a mí mismo y no lo notaba. Ahora sí que puedo decir que estoy muy enamorado de ti, HyunJin hyung; mi corazón lo grita con sus energéticos latidos. Yo le amo muchísimo... ¿Me corresponde? - escuché atentamente todas sus oraciones y frases observándole, le podía notar intranquilo hasta que yo le contestara.

Era mi única oportunidad, y no la desperdiciaria por nada del mundo entero.

- Sí, SeungMin, trás unas horas aclarando mis propios sentimientos por ti... Puedo decir que te amo, no lo olvides. Uhm... Esto... - rasque mi nuca sonrojado y súper nervioso por lo que iría a preguntarle, respiré profundamente y... Ese aroma, uno dulce parecido al de las palomitas de colores, se integró en mis fosas nasales tranquilizandome.- Minnie, ¿quieres ser mi novio? - pude cuestionar sin titubear.

Como aparté mi mirada de él, la volví a poner en su hermoso rostro y este estaba pintado de rojo en sus mejillas haciéndole ver muy adorable. Dentro de sus ojos parecía haber pequeñas estrellas junto a su cielo azul oscuro; era demasiado bonito e hipnótico. Entonces vi gotas cayendo de sus pupilas.

Creo que su contestación, era más que obvia si los dos nos amábamos.

- Sí, sí, ¡sí! - luego de eso se lanzó a mis brazos, tenía una enorme sonrisa en mis labios.

Devolví el abrazo rodeándole la cintura y aspiré, oliendo por segunda vez el aroma anterior dulce... Entonces me di cuenta de lo tonto que fui; todo este tiempo, esa fragancia venía de él, creo que de su piel o cabello. Si me encuentro estresado o enojado, ya sé donde debo acudir.

Siento tanto por tardar en actualizar! De verdad lo siento, he estado ocupada :'c

Aquí tenéis el siguiente capítulo de la la historia, espero que sea de su agrado.

Pd: Gracias de corazón por los votos. ❤