Entre árboles

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Tras mucho sufrimiento y valentía por parte de mi novio, consiguió la aceptación de mi padre en este día que parecía irse a la mierda. Minnie puso todo su empeño en explicarle a mi progenitor varias cosas que memorizó anteriormente escritas en una hoja de papel cortada por la mitad.

Al principio papá se mantenía serio, con los brazos cruzados y mirada penetrante hacia el más menor. Creía que con esa actitud no iría a decir algo positivo, pero estaba equivocado dando una vuelta a mi favor y a la de SeungMin.

Nos quitamos el peso de encima, bueno más bien para mi novio, porque él no sabía que mi padre fingía alejarle de mi familia. Quién iría a decir que el último mencionado, hubiera actuado mejor que yo escondiendo una simple mentira.

Al escucharle soltar por su boca las palabras que tanto mi novio anhelaba, este los primeros segundos lo estaba asimilando, luego una enorme sonrisa de oreja a oreja se dibujó en sus finos labios. De la emoción incluso un par de lágrimas de felicidad se escaparon de sus ojos mientras daba pequeños saltos. Yo por mi parte, observaba el acontecimientos alegremente sabiendo lo que ocurriría.

Un abrazo de Minnie hizo que rodeara mis brazos alrededor de su abdomen aplazando mi mano derecha por su espalda.

- Jinnie, te amo, te amo, te amo... - le dió la vena por decirme esas cinco letras tres veces repetidamente, yo sonreía.

Entonces en esa posición, planté un suave y delicado beso en su cabello a la vez que mi mano seguía con su acción en la espalda contraria.

- También te amo, Minnie. - le respondí en tono dulce algo avergonzado, pues bueno... Como que tus padres estuvieran delante no era lo mejor para una escena romántica o podría decirse íntima.

De reojo pude ver a mamá fangirleando por nosotros como si fueramos una couple que acababa de confirmar su relación de un grupo famoso de música o casi similar. Papá tenía una sonrisa de esas típicas de estar orgulloso sin mostrar la dentadura.

- Cariño, nuestro hijo se está haciendo muy mayor. ¿Puede volver a ser un lindo bebé? - logré escuchar de quien me dió a luz a punto de llorar.

Eso me hizo reír en bajito por varios segundos y a mi niño hermoso separarse de mí para entrelazar dedos uniendo ambas manos.

Deseando encontrarme a solas con mi novio, le arrastré hasta la puerta principal; saliendo así de casa mudo hacia la calle.

- ¿A dónde vamos? - preguntó cuando empecé a caminar en dirección desconocida pero repleta de viviendas.

- Si digo la verdad, no lo sé. Quiero estar solo contigo... - sentí mis mejillas calentarse.

La sensación estando a su lado me era la mejor de toda mi existencia. Sin ni siquiera tocarnos, podía sentir su calidez recorrer cada parte de mi cuerpo con la mirada. El destino ha hecho su deber juntándonos; ahora sé que es mi alma gemela, mi media naranja, mi mundo entero.

Nadie se hace una idea de cuánto amo a SeungMin, el niño de mis hermosos ojos.

Por estar deambulando en pensamientos propios, me tropecé con un asfalto más alto que los otros. Gracias a dios que no caí por reincorporarme rápido, estando así rígido y recto.

- ¿HyunJin? ¿Estás bien? - cuestionó preocupado aunque no haya chocado contra el suelo de cemento.

- Sí... Prosigamos. - comenté a la velocidad de la luz continuando a mover mis pies hacia delante.

Lo más seguro que estaría caminando como un robot ya que aún me sentía tenso tal cual piedra. Unas risas detrás mía me confirmaron mis sospechas por completo. Las ignoré con un gruñido logrando andar normal.

A lo lejos pero no tan distante, visualice un pequeño parque infantil rodeado de árboles altos y bastante robustos. Fui ahí lo más rápidamente posible tomando de la mano todavía de Minnie.

Antes de entrar a las atracciones de los infantes, en un movimiento veloz, puse contra la corteza de un trozo de árbol alejado de la calle a SeungMin. De alguna manera teníamos privacidad así.

- ¿J-Jinnie? - ladeó la cabeza a un lado confundido, dejándome admirar varias marcas en su cuello.

Recordé lo que hicimos hace un par de días en mi casa formando una sonrisa socarrona en mis labios, saqué la lengua para moderla con mis dientes levemente y después volverla a poner en su sitio.

¿Así que aún estaban, eh?

- Bebé, ¿te gustaron mis chupones? - conté contento con mi creación de ese día, pasando dos dedos por las zonas rojas.

- Para tu información, sí, pero no quería que mamá me preguntara nada y por eso traté de esconderlos con maquillaje. - me explicó sin ninguna expresión. - Sigo teniendo un poco de color ahí a pesar de maquillarlos. - suspiró.

- Y... ¿Te apetece tener más? - de inmediato mi novio negó, reí.- Está bien, no los haré. - dejé un sonoro beso en la comisura de sus labios.





























Tuve un pequeño bloqueo mental de cómo avanzar la historia, pero ya estoy aquí~

Muchísimas gracias a los nuevos por gustar de este fic HyunMin 💝

Ah, y quiero informar que todavía quedan plazas para el rol que dije en el anterior capítulo. Quiénes queráis entrar como JiSung, JeongIn o WooJin, escribirme por privado :3



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