Capítulo 7: Clases de coreano

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- Hye- la llamó Asia sin obtener reacción alguna por parte de su amiga, quién miraba a la nada con la cabeza apoyada en la mano- ¡Hyeee!- parpadeó varias veces hasta darse cuenta de que la voz provenía de Asia- La clase ha acabado hace unos minutos... Se ha ido hasta el profesor- explicó mirando la clase vacía.

- Lo siento- se puso en pie rápidamente y salió por la puerta.

- ¡HYE!- gritó ya cansada de la actitud de su amiga. Ésta asomó su cabecita por el lindar de la puerta-. Te dejas la mochila- le reprochó señalando la mochila en el suelo.

Hye soltó un suspiro y esperó a Asia en la salida del aula, quien le traía su mochila. Ambas caminaron hasta la cafetería y se sentaron, haciendo tiempo para su próxima clase... matemáticas. Había dos clases de personas: Las que odiaban matemáticas y a los que se les daban bien. Luego estaba Asia. El asco que le tenía a las matemáticas era indescriptible. Era sentarse en clase, saber que tocaba mates y deprimirse. Por suerte ahora tenía amigos más capacitados para los números que podrían ayudarla.

Asia miró a Hye, quién seguía con la cabeza en las nubes. No en las nubes, en el mismísimo Júpiter. Estaba de cuerpo presente pero su mente ya la había abandonado de hacía horas. Asia pasó su mano repetidas veces por delante del rostro de su amiga. Parpadeó fuertemente antes de mirarla mal.

- ¿Qué?- gritó Hye con el ceño fruncido. Asia no se esperaba una respuesta tan brusca.

- Oye ¿qué te pasa Hye?

- No es nada- le pegó un sorbo a su zumo de naranja.

- Hye, llevas así desde ayer.

- Así ¿cómo?- preguntó confundida.

En lugar de responderle, Asia apoyó la cabeza sobre su mano y empezó a mirar vizca con una sonrisa bobalicona en la cara por lo que se llevó un leve golpe de Hye en el brazo. Ahora ya estaba más activa.

- A veces desearía ir con gente normal, que se asemejaran a mi ser- dijo Hye señalándose como una diva. Hye había despertado. Y Asia aún no había acabado de decidir si eso era bueno.

Hye fijó un punto de la cafetería y luego volvió la cabeza a Asia con los ojos bien abiertos. Hacía movimientos de cabeza "disimulados" señalando algo detrás de Asia. Su amiga la miraba desconcertada.

- A tus seis

- Hye, otra vez no- suspiró.

- Vale, vale, vale... Te acuerdas del chico ese, el rubio del metro?- Asia asintió- pues te está mirando- finalizó segura.

Asia recordó los encuentros fugaces que había compartido con el pelirrubio. Era un chico peculiar que parecía simpático, pero Asia no podía estar segura. Por curiosidad, se dió la vuelta 180º y comprobó que, efectivamente, el chico la estaba mirando. Hye le susurró un "Eres tonta, nunca te fías de mí" mientras el chico la saludó con la mano tímidamente. Un mechón rubio se resbaló de su pulcro peinado y aterrizó sobre uno de sus ojos. El chico, con un movimiento elegante, se lo volvió a colocar a sitio, aún mirando a Asia. Finalmente ésta se dió la vuelta. Hye la miraba contenta.

- Es muy mono- dijo Hye con una amplia sonrisa- Sabes que es bailarín?

- Ah sí? Y tú cómo lo sabes?- Hye se sonrojó levemente. Aún no le había explicado nada a su amiga sobre su encuentro con Hoseok.

- Sabes que acabas de mantener contacto visual por más de diez segundos con el que debe ser el chico más popular de por aquí ¿no?- dijo Tae abalanzándose sobre Asia.

- ¿De dónde llegáis?- preguntó sorprendida de ver a Jungkook y Taehyung.

- De presenciar el flechazo más grande de la história- gritó Tae gesticulando con las manos, por lo que se llevó un mamporro de Hye.

OtokéWhere stories live. Discover now