Capítulo 11 parte 2: Fresa

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Asia se acercó sonriente hacia Namjoon, que la esperaba ante la atenta mirada de los dos chicos del coche. Jin todavía no había arrancado el vehículo, y Jungkook miraba atentamente, analizando al chico con dos helados. No era el mismo chico pálido y herido de esa noche, lo cual agradecía profundamente, pero tampoco le hacía mucha gracia ese amigo desconocido de Asia. Era con él con quien iba a quedar? Tenía prisa para quedar con alguien como ese? Al joven le ardía el cerebro con tan solo imaginar las sucias intenciones que debería tener ese muchacho, el cual era sin lugar a dudas mayor que él y por lo tanto, mayor que Asia.

- ¿Vas a arrancar o qué?- espetó Jungkook, queriendo perder de vista esa escena.

-¿Quién es?- preguntó Jin con un intento de indiferencia mientras giraba la llave del coche.

- Y yo que sé. ¿Qué más da?- respondió éste, dándole a entender a Jin que sería mejor no hablar del tema. Jin arrancó, haciendo que los chicos partieran de allí en un silencio sepulcral donde solo los pensamientos inundaban el aire.

- Hola-dijo Namjoon claramente feliz, dirigiendo su atención a la chica después de haber estado intrigado por el coche que la había dejado.

Parecía ir más bien vestido que lo que solía... y no era para menos, pues se pasó un buen rato buscando ropa adecuada para la ocasión hasta que finalmente decidió tomar algo de Hoseok. Pocas veces se ponía tejanos ajustados, y su pelo, que caía libremente hacia un lado, le hacía parecer más joven e informal

-¿Cómo estás?- preguntó acercándose a ella y ofreciéndole lo que tenía en la mano-. Me he tomado la libertad de coger ya los helados... había poca cola... oye... ¿estás bien?- dijo cambiando la alegre entonación al ver la cara de la chica.

- Sí- dijo ella mirándolo y cogiendo el helado de fresa siendo casi incapaz de sonreír.

- ¿No me vas a contar qué te ha pasado?

- Una historia muy larga- dijo Asia, empezando a caminar hacia los bancos.

- Tenemos toda la tarde- contestó Namjoon, cogiéndola suavemente del hombro para cambiar la dirección hacia unas largas escaleras. Se sentaron en estas cuando el chico le volvió a preguntar.

- Me he discutido con un amigo. No es nada- dijo ella esperando que él dejara de insistir, cosa que siguió haciendo.

- ¿Algo grave?- siguió, tratando de no molestar a la chica al preguntar. Asia negó con la cabeza, haciendo que Nam solo se preocupara más-. Si quieres desahogarte... quiero decir, no es para presionarte, claro que no, pero... por si quieres soltarlo, que sepas... que me tienes de tu lado para lo que sea... - sonrió acercándose más-. Aún y así un helado siempre ayuda a superar malos momentos- dijo divertido tratando de quitar importancia al asunto.

- Creo que todo es culpa mía- dijo ella cabizbaja mientras miraba su comida-. Él... es... raro, pero yo tampoco es que ponga mucho de mi parte. A veces trato de comprenderlo pero no sé... nunca lo consigo. Y hoy hemos vuelto a discutir. Otra vez. Creo que cuando parece que las cosas van bien, de golpe se complican.

- A lo mejor él tampoco aporta mucho de su parte- dijo Namjoon, imaginándose al chico que describía Asia. ¿Era el que la había traído en ese coche?

- Creo que no le gusto- dijo ella mordiéndose el labio inferior sumida en sus pensamientos-. A veces realmente actúa como un buen amigo, pero seguramente lo hace por sus reales amigos y no porque le caiga bien. Tampoco es mucho de confiar por lo que veo. No lo sé... a lo mejor...

- A lo mejor es porque es imbécil- espetó el chico, harto de escuchar eso. ¿Cómo un niñato podía tratar así a una chica como ella?

Asia lo miró, sonriendo por primera vez desde que estaban juntos. Namjoon siempre conseguía sacarle una sonrisa desde el primer día. Empezó a comer el helado, el cual comenzaba a derretirse por el calor. Helado de fresa. Su favorito.

OtokéWhere stories live. Discover now