Otoké

Capítulo 31: Tupac ft The Notorious B.I.G.

Namjoon cargó la última caja de cartón en su coche. El maletero lo llenaba una gran caja de cartón, y en los asientos traseros reposaban cuatro cajas más pequeñas. El chico resopló, mirando el vehículo nervioso. El coche estaba en sus últimas, pero no tenía por qué no poder con cinco cajas de mudanza. Si se le rompía ahora, adiós a la idea de tener coche durante unos años. Hasta que encontrara trabajo y ahorrara bastante no podría volverse a comprar otro coche destartalado que le durara unos pocos años más. "Venga, tú puedes machote" pensó mientras cerraba el maletero.

Se sentó en su asiento y puso las brazos sobre el volante, apoyando su frente en estos. Soltó un soplido. Odiaba pedir ayuda de esa manera. Se sentía inferior, y a la merced de los otros. Fue a Seúl para ser independiente y poder empezar a conocer mundo, pero sus planes no podrían haberse ido más al garete. Encendió el motor del coche y sonrió levemente. Tenía que buscar lo bueno de la situación. Ahora viviría con Hobi, su mejor amigo en Seúl. Sería divertido.

Mientras conducía, de fondo oía la música de la radio del coche. Agradecía que, de todas las partes del coche que estaban rotas, la radio fuera el que hubiera resistido al paso del tiempo. La música era su pasión, sobretodo el rap. Y un viaje sin música era un infierno, más si era largo. De su antiguo alquiler a la casa de Hobi había casi una hora de distancia, ya que por la ciudad no se podía pasar de los 30 kilómetros por hora. Namjoon escuchó la música más atentamente y, al oír la canción que justo acababa de empezar, sonrió ampliamente, centrándose en los recuerdos que acababan de aparecer en su mente. Era la canción rap Runnin', de Tupac, su rapero favorito, con The Notorious B.I.G., el favorito de su hermana 3 años menor, Kim Kyung Min. Cuando aún vivía en su ciudad natal, siempre discutían por cuál de los raperos era mejor, ambos con argumentos igual de válidos. Si ponían música en casa, sólo para fastidiarlo, su hermana elegiría poner los álbumes de Notorious.

Hacía más de tres o cuatro meses que no hablaba con su família. Hacerlo, le recordaba la mala posición económica en la que estaba, y que le había prometido a su família que si no le iba bien volvería a vivir con ellos. Les echaba de menos, pero volver allí sería enjaularse.

Cuando el coche estuvo parado en un semáforo, sacó su móvil del bolsillo y tecleó el número fijo de su casa. Su madre trabajaba en un bar por las tardes, así que a esa hora estaría en casa.

— Yeoboseyo. ¿Quién es?

— Hola mamá— la saludó alegre.

— Joonie— dijo ella con voz dulce, sorprendida al oír la voz de su hijo— ¿Qué pasa?— preguntó preocupada.

— Nada— rió él—. Sólo quiero hablar contigo. Puedo, ¿no?

— Esque nunca llamas, hijo. Pensaba que habría pasado algo. Debes llamarnos más a menudo— lo riño, pero de nuevo volvió a estar contenta. Las llamadas de su hijo no eran muy frecuentes, así que tenía que aprovechar el momento—. ¿Qué tal? ¿Qué haces?

Namjoon se quedó callado unos segundos. No le había dicho a su madre que había perdido su trabajo. Si se enteraba se preocuparía, y lo obligaría a volver con ellos. No podía fallarle a su madre de esa manera. Él le había prometido que estaría bien en la capital, que allí encontraría un trabajo estable. No podía decirle que se estaba mudando con Hobi, que iba a ser un mantenido. Que no podía pagarse su propia casa porque lo habían despedido.

— Voy a trabajar má. Estoy en el coche— mintió. Se sentía fatal por hacerlo, pero más mal se sentiría aún si le contaba la verdad.

— ¿Conduces mientras estás con el móvil? Eres un desastre hijo. A ver si vas a tener un accidente. Mejor hablamos luego...