Capitulo nueve: Esperanza se tiró por la ventana.

1K 45 4
                                    

Matías llegó al apartamento donde vivía Luciana, quería invitarla a un club de campo que estaba a las afueras de la cuidad. Tenía planes de pasar todo el día con ella porque la semana que entraba se iba a ir de viaje y no la iba a ver por varios días. 

- Señor. - Lo llamó el portero cuando pasaba por recepción. 

- ¿Que más, Carlos? ¿Cómo le va? 

- Bien señor, gracias.

- Me alegra. - Quiso seguir su camino hacia el ascensor.

- Señor.

- ¿Pasa algo?

- Si. - Carlos no sabía cómo decirle. - Es que mire... Bueno, la verdad es que no puede subir.

- ¿Qué? - Matías rió, el era de las personas que podía subir al apartamento de Luciana sin ser anunciado ¿Como que no podía pasar?

- Yo sé que usted va para el apartamento de la señorita Luciana, pero es que ese apartamento ya no es de ella.

- ¿A qué se refiere? - No entendía nada.

- Ella se fue.

Matías abrió los ojos como plato. - ¿Qué? ¿Se fue? Eso no puede ser. ¿A dónde?

- No lo sé, señor, ella no dijo nada. Solo comunicó que se iba. 

- Usted debe estar equivocado o confundido, ella no me ha dicho nada. - Arrugó el seño. - ¿Sabe qué? Voy a subir. 

- No señor, lo siento pero no puede. El apartamento ya está arrendado y aunque no hay nadie no lo puedo dejar pasar. 

- ¿Arrendado? ¿Qué mierda quiere decir? - A Matías ya le estaba empezando a dar un poco de rabia. 

- Si, mire... - Carlos sacó un papel del bolsillo de su uniforme y se lo dio. - Me pidió que le entregara esto. 

"Hola Matías, te juro que no sé por dónde empezar, no sé qué escribir y el pulso me tiembla. Sé que debes estar preguntándote dónde estoy o que es todo esto, pero solo puedo decirte que me he ido de la cuidad porque necesito estar lejos de ti. Ha pasado algo en mi vida que no planeé pero que es maravilloso, bueno, maravilloso para mí y quisiera, pero no puedo compartirlo contigo, por eso he decidido irme. No me busques porque no me vas a encontrar, espero me puedas entender. 

Tengo un nudo en la garganta y una opresión en el corazón por esto, pero es lo mejor para los dos. Deseo de todo corazón que tengas una linda vida y ojalá puedas ser feliz con tu esposa, yo por mi parte estoy decidida a serlo, porque tengo motivos.

Te amo con toda mi alma y nunca había sido tan feliz como lo fui contigo. Si algún día nos volvemos a encontrar... Le ruego a Dios que sea diferente.

Con amor, Luciana. "

Matías terminó de leer y quiso reír, por un momento pensó que Luciana aparecería en cualquier momento y le diría que era una broma, tal y como él lo hizo un día. Pero los minutos pasaban, él releía la carta y Luciana no aparecía. 

Sin que Carlos lo esperara, corrió hasta las escaleras y empezó a subirlas, tenía que subir y decirle a Luciana que esas bromas eran muy fuertes, pero mientras subía le entraba el miedo por comprobar que ella no estuviera ahí.

Llegó hasta la puerta del apartamento de Luciana y tocó el timbre varias veces, el desespero lo llevó a golpear la puerta fuerte.

- Luciana, abre por favor. - Gritó. - Abre. - Golpeó más fuerte.

Carlos llegó hasta donde Matías. - Señor, le dije que la señorita Luciana se ha ido, me está perjudicando a mí, por favor baje.

- Es que... Ella no pudo irse así como así, sin decirme nada. No pudo maldita sea. - Le dio un puño a la puerta.

Amantes Legendarios.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora