Desde mi cielo

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A la mañana siguiente de ese día pepper se baño, se maquilló y vistió de traje negro con playera azul, se miro en su espejo tratando de sonreír "sonrisa falsa, te odio" pensó pepper tomo su bolso y se dirigió a la empresa. Pidió estancia en la sede de New York para un tiempo no estando segura de regresar a Miami. Retomo todas sus reuniones, juntas y mensajes aplazados.

-Hola pepper -saludo Janet entrando a la oficina

-Hola Janet -saludo de regreso pepper levantando la vista de unos papeles

-¿Cómo estas? -pregunto Janet estaba preocupada por ella

-Bien... -hablo pepper con una sonrisa

-Señora Stark su cita de las 9 y el congresista George esta en la línea 2 -anuncio su secretaria interrumpiéndola no al propósito y sintió vergüenza por ello

-Gracias bambi -repuso Pepper "no te olvides de sonreír" se recordó así misma claro que su sonrisa no cumplía con su ojos

-Estas ocupada, puedo regresar en otro momento ¿comida? -pregunto Janet lista para salir de ahí, solo quería asegurarse de que pepper estuviera bien

-Si Janet ¿a las dos esta bien? -pregunto no del todo segura de que podría asistir

-Me parece prefecto -y con eso salió

Dos... tres... cuatro meses se fueron, pepper había corrido a través de la empresa manteniéndola en orden, todo estaba administrativamente bien y tenían contratos con científicos o las patentes de inventos tecnológicos, su mejor cerebro se había ido y ahora tenían que buscar y reclutar personas e ideas para mantenerse en pie. Todo iba bien mientras estaba en la empresa y al llegar a la torre se encerraba en la habitación, Banner y Rhodey se habían ido, Clint y Natasha seguían fuera, Thor había regresado una vez y se había vuelto a ir, Hank y Janet eran los únicos dentro de la torre.

¿Cuál es la razón de que la luna brille si no hay nadie quien la contemple?
¿Cuál es el motivo del sol si este no calienta?
¿De que sirve respirar si estas muerto?
¿De que sirve tener corazón si ya no hay sentimiento alguno?
La felicidad se extingue en cada respirar, en cada despertar.
No, ya no hay nada que sentir.
Nada por lo que llorar.
Nada porque sonreír.

Cada noche al acostarse en su cama lloraba hasta quedarse dormida pidiendo despertar de esta pesadilla y cada mañana al despertar deseaba que fuera un sueño, había sonreído pero nunca de verdad ¿cuál era el motivo de hacerlo? No, no había razones para reír.
Se mantuvo al margen de los vengadores y ya que no había nada que hacer en la torre regreso a Malibú.

Se acostó en la cama y abrazo la almohada de Tony quedándose dormida con lagrimas secas, a la mañana siguiente despertó creyendo que él estaba a su lado había tenido un sueño donde él estaba con ella, había regresado de una misión y besado a ella, incluso podía sentir sus labios palpitantes, se levanto de la cama en busca de él corrió a las escaleras y bajo al taller pero no estaba ahí solo vio la armadura colgando del techo sujetada por alambres y las demás al fondo acomodadas esperando.

El rojo brillante de la armadura se burlo de ella y Jarvis seguía en silencio como si hubiese muerto junto con su creador. La ira se mezcló con la tristeza de su soledad, tomo un tubo grueso que estaba cerca de ella y el escritorio.

-¡Te odio! -grito golpeando la armadura con toda su fuerza -¡te adió! -el tubo golpeo la armadura sin doblarla solo le hiso pequeños rasguños que borraron la pintura, sus lágrimas empañaron su visión sin darse cuanta de lo que hacia golpeo la armadura hasta no poder más.

-Pepper no lo hagas más -se congelo al escuchar esa voz, sus sentidos le engañaban, sintió frio erizando su piel, dejo caer el tubo de su mano provocando un estruendo en todo el taller, luces azules chasqueaban enfrente de ella hasta adquirir la figura de Tony -por favor, no quiero verte así, fue un error y ahora no puedo volver para estar contigo

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