Re-iniciar

Un nuevo integrante y un traidor

Estaba corriendo para ponerse a salvo, Tony le había pedido que fuera a la base mientras, los vengadores peleaban una guerra contra hydra, una guerra que ya había devastado gran parte de New York, las calles por donde corría estaban destruidas, había personas muertas en el piso o enterradas entre los escombros, otras más, como ella, corrían huyendo de las explosiones, había humo por todas partes lo que hacia que sus pulmones dolieran y que su garganta se sintiera rasposa lo que cada vez mas le dificultaba su respiración, cuando llego a una esquina un cowboy se atravesó en su camino y agentes de hydra, salieron de el rodeándola, se sintió  presa del pánico, no podría  llegar a la casa de seguridad, Dios ¿que serian capaces de hacer a ella o a su bebé?

-Señor, señor Stark -llamó Jarvis intentando despertarle
-¿Qué pasa? -pidió adormilado sin abrir los ojo, estaba por quedarse dormido nuevamente cuando escucho un quejido

-Señor -volvió a llamar Jarvis -mis análisis sugieren que la señora Stark, esta entrando en labor de parto -concluyo y Tony se incorporó de inmediato sentándose en la cama, pepper estaba sudando y quejándose como si estuviera teniendo un mal sueño

-Pepper, vamos cariño, despierta -pidió colocando sus manos en sus mejillas, las cuales estaban calientes, pepper se agito y abrió los ojos

-¡Duele! -fue lo primero que dijo tratando de respirar

-Jarvis dijo que ya es hora -dijo Tony comenzando a moverse fuera de la cama -okey ¿donde esta tu ropa? -pidió nervioso mientras se vestía

-Esta al lado de la maleta -señalo pepper hacia el closet respirando profundamente para calmar el dolor y tratando de levantarse por si sola, Tony tomo la maleta y la ropa llevándola a ella

-¿Crees poder vestirte? -pregunto

-Si -asintió con la cabeza más veces de lo que debía

-Bien -dijo, le ayudo a quitarle la playera de dormir para darle una de algodón y una sudadera, pepper tomo el pantalón de algodón para ponérselo y Tony la ayudo a ponerse en pie mientras ella terminaba de subirse el pantalón

-Jarvis llama a los vengadores y di les que ya es hora -ordeno colocando la maleta en su hombro y cargando a pepper en sus brazos -también llama al hospital y pide que estén listo -recordó antes de salir de la habitación e ir a la cochera para tomar su coche y salir.

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-¿Pepper? -llamo Tony sentado en su escritorio -Quiero un conejo -pidió
"Un conejo ¿para quiere un conejo?" Se cuestiono pepper levantando la mirada de su laptop

-Sabe señor Stark podría tener un gato o un perro... -trato de persuadirlo aun que sabia que seria imposible, cuando al señor Anthony Stark se le mete algo a la cabeza no hay nada que logre quitárselo

-Si pero yo quiero un conejo -protesto como un niño de ocho y "Joder este sujeto tiene veintidós años!"

-¿Para qué?

-El conejo va conmigo, ya sabes playboy/conejo -sonrió Tony pensativo tratando de mostrar la lógica en sus palabras

-Sin embargo no eres apto para cuidar un conejo -dijo no del todo consiente de sus palabras y lo que podría causar en él, tan pronto como lo había dicho se arrepintió de ello mordiéndose la lengua, la respuesta de Tony fue clara en su mirada triste que rápidamente pasó a una cara seria, y cuando eso paso las palabras de disculpas en la boca de pepper murieron rápidamente, se quedo callado y siguió escribiendo en su computadora.

-¿La siguiente junta es un una hora? -pregunto mirando en su computadora después de unos minutos

-Si -contesto

-Cancélala, tengo casas que hacer -y esa era la venganza de Tony, salió de la oficina rumbo a su casa dejándola sola ahora con mas trabajo que hacer "bien me lo merezco" reconoció regañándose. No una semana después entro en la mansión y pidió a Jarvis por él y que subiera a la cocina para comer

-Ten -dijo pepper cuando él se digno a aparecer en la cocina

-¿Que es esto? -pregunto Tony sosteniendo una pequeña pecera circular media llena de agua, piedras de diferentes colores estaban en la parte inferior, tenia una plantita muy pequeña de plástico y una casita de la cual salió un par de peces dorados

-Son peces -aclaro Pepper muy obvia

-Se que son peces pero ¿porque tendría peces? yo quería un conejo -se quejo

-Lo se, y yo quería un perro, pero no se puede -dijo pepper con pena

-Si se puede, hay mucho espacio en la casa -sugirió Tony

-Si no quieres los peces tráelos para acá, a mi si me gustaron -le quito la pecera de sus manos mirando a los hermosos peces que eran un regalo para ella cargado a la cuenta de Tony

-Yo quiero un conejo -se cruzo de brazos mirando a otro lado ahora sin sus peces

-Porque mejor no abres esa caja -señalo pepper a la caja de color blanco y listón azul en cima de la mesa

-¡Un conejo blanco! -dijo Tony agarrando al pequeño conejito con sus manos

-Como tu conciencia -señalo pepper con sarcasmo, probando los limites de su relación de trabajo

-Querida, mi conciencia es todo menos blanca -comento en lo obvio, con un sonrisa lasciva abrazando al conejo acariciándolo por el cuello, el conejo movió su nariz rosa olfateando a Tony

-De una vez te digo que no limpiare su popo y tu tienes que darle de comer -advirtió pepper

-Mmhu -dijo sin importarle lo que había dicho caminando al taller con el conejo en sus brazos

-¡Ah! Y Tony -lo llamo y él voltio a ella -no lo mates -dijo más como una suplica

-¿Duda de mi capacidad señorita Potts? -se burlo Tony continuando su camino al taller