El pecado de la venganza (Meliodas & Tú)

14. KING Y BAN

-¿Están seguros que esta es la capital?- Musito la gigante, pues esta tenía razón en cuestionar el lugar, ya que solo era un pequeño pueblo en ruinas, además de que estaba entremedio de colinas y muchos pinos que obstaculizaban un mirar hacia el horizonte.

-Dicen que es el lugar más cercano desde aquí- se rasco la nuca Meliodas, sospecho que igual cuestiona el lugar.- pero tenemos que abrir la taberna, necesitamos dinero y nos separaremos para ver mejor el entorno, además de conseguir información sobre King y la capital- concluyo sonriéndonos a todos.

Este lugar no es una buena opción, su aspecto daba mucho que decir, no se veía gente caminando para hacer compras oh solo intercambiar pequeños coqueteos, tampoco se podía apreciar las risas, ni juegos de niños, menos el boche de mujeres discutiendo con los vendedores por fruta, este lugar prácticamente era un pequeño pueblo fantasma.

-_______, escuchaste lo que dije- musito un ceñudo Meliodas acompañado de todas las miradas del lugar.

- Si- mentí- recolectar información, eso hare- gire sobre mis talones y decidí caminar hacia el lugar fantasmagórico que se hallaba bajo mis pies.

Tan pronto como comencé a caminar sentí como alguien corrió hacia mi dirección, ese alguien era Ban, pues este igual moría de ganas por saber que había en el sector al igual que yo, oh solo quería saber sobre mis "tácticas de husmear" lo cual era una opción más obvia.

-Pensé que ibas a ir solo a caminar-corte el silencio.

- Digamos que te estoy empezando a tener una minúscula estima- musito serio y con su mirada fija en el camino que tomamos

- Sí, claro oh solo vienes a averiguar lo que no entendiste hace un rato- el hombre pálido paro en seco haciendo que igual me detuviera, para luego pararme frente a él y encararlo.

- ¿Qué fue eso de "husmear el pasado de la gente"?.

- Digamos que en teoría te estimo para contarte- musite para luego girar y seguir con el camino que nos quedaba por recorrer, lo cual era un corto tramo para llegar al pueblo.

- Me lo tomare como un No me interesa contarte-  concluyo para volver a posicionarse junto a mí poniendo sus manos en los bolsillos de sus pantalones mientras íbamos retrocediendo al mismo silencio del cual yo nos había sacado.

Al encontrarnos con un camino de piedras desgastado y con vegetación filtrándose por las paredes de las casas, concluimos que en este lugar no había vivido nadie en muchos siglos, de pronto sentí a Ban en un pequeño susurro decir "Elaine", al girarme para preguntar ¿qué? ; El hombre ya no estaba conmigo, había desaparecido completamente luego de musitar una palabra, rápidamente empecé a buscar con mí vista al de cabellera blanca. Preguntándome cómo es posible que alguien de su contextura pudiera perderse de mi vista.

Mientras mi poca paciencia desaparecía escuche un grito. Corrí hacia donde estaba el sonido, para finalmente encontrarme con el idiota que ya daba por perdido, lo que me capturo fue que en sus brazos se encontraba una pequeña niña, se veía maltratada y muy débil. Mientas que en la otra esquina se halla un niño con Rastrillo en sus pequeñas manos listo para atacar en cualquier momento.

-Ban!! Quieres explicarme qué diablos estás haciendo aquí- musite algo cansada por la corrida que había realizado, no entendía como fue que llego tan rápido hacia este lugar,el cual estaba casi al otro extremo de donde estábamos.- y tú niño- llame la atención del nombrado- baja eso, él no quiere hacerle daño a tu hermana- este empezó a realizar la acción mientras que la chica retomo su sentido para dirigirse a su hermano.

- Siento haberte apuntado el arma, fui un pecador por ello- musito con lágrimas en los ojos el niño.

- Te diré solo una cosa niño, los pecados verdaderos no se pueden borrar- sonrió, pero luego de ello todo se convirtió en sangre, Ban chorreaba el líquido carmesí por su boca a causa de un chico que lo atravesó con un gran daga, perforándolo completamente.

- Hola Ban- musito risueño el pequeño hombre- en nuestro motivador reencuentro no tienes nada que decirme- volvió a reír. El nombrado iba a contestar pero fui yo quien lo interrumpió.

-Quien diablos eres tu- musite seria, el hombre saco su daga del toso de Ban colocándose a una distancia significativa por los aires.

- Nadie me reconoce que pena, pero tú- se dirigió al hombre perforado el cual ya no tenía nada en su cuerpo, tan pronto como la daga impacto contra él, este se curó por completo, ninguna cicatriz quedo que dejara rastro de lo sucedido. - Te hare recordar tu pecado ya que cometiste uno muy grave.- su cara lo decía todo, él quería venganza, yo sabía lo que se sentía, y su expresión reflejaba la mía perfectamente hace un tiempo atrás.- Para aclarar tu mente, sé que mataste a la santa de la fuente y así conseguiste tu inmortalidad- prosiguió.

- Niños váyanse ahora- dije, dicho y hecho los chicos salieron corriendo, sabía que esto terminaría mal, era mejor no involucrar a inocentes.

Ban se estaba preparando y el hombre pequeño nuevamente iba realizar tal acto de atacarlo, me interpuse entre Ban y la daga extendiendo mis manos, haciendo que el chico frenara secamente junto a su espada,- Que estás haciendo, no puedo moverme además esto no es asunto tuyo-. Gruño con ira.

-Puedes calmarte pecado de la pereza- musite- sabes que las cosas se pueden hablar como gente civilizada-. El hombre atrapado solo me miraba con desprecio, sabía que sus planes los había arruinado yo por el momento.

- ¿Que él es? ¿Qué?!! No puede ser King verdad?- la cara de Ban era graciosa, pues no reconocía a su amigo si es que se lo podía llamar así, el hombre volador seguía suspendido por mí en los aires, este de pronto empezó a botar sangre por su boca, esto era malo si usaba el poder de bloquear, mientras pasaba un periodo de tiempo la victima comenzaba a romperse interiormente, comenzando por sus vasos sanguinos, órganos para finalmente explotar; no era algo que luego puedes limpiar fácilmente.

Mientras Ban seguía consternado tanto por no reconocer a King y el poder que estaba utilizando; algo sucedió, la voz tan particular de Meliodas nos sacó del pequeño trance ya que este le alegaba a Ban de porque no estaba trabajando. Para luego acercarse Diane musitando

- Déjense los dos de..... Corto la gigante- King!!! Eres tu- sonrió la chica de coletas.

-Alguien me pude explicar que parte de ese chico es King porque sigo sin entender- seguía exasperado el alto hombre.

Meliodas musito que había perdido algo de peso explicándole peliblanco.  King estaba a punto de retiraste pero no pudo, volviendo a votar más sangre por la boca mientras que por segunda vez  frunció su ceño como regalo para mi. Tenia que liberarlo o lo mataría, los presentes quedaron mirándome y por sus caras quería saber porque estaba ocurriendo todo este lío . Finalmente libere al hombre volador y este tan pronto como lo libere se fue de aquel lugar dejándonos con muchas más dudas de las que ya teníamos. 

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Hola chicas; haré una historia centrada en Tomoe😍 pero tendra un harem xd pasen por mi perfil si quieren leer el primer cap 😚😙