El pecado de la venganza (Meliodas & Tú)

41. SOLO ES CUESTIÓN DE OBSERVAR

Liones ya no era lo que recordaba, la destrucción, el caos, el humo que desprendían las diferentes explosiones de los alrededores, demonios, almas, entre otros desastres.

Zeldris había tomado a la chica castaña entre sus brazos nuevamente al cabo de que las hordas de demonios rojos y grises se aglomeraron contra el reino de Camelot. Ambos se encontraban suspendidos en el aire mientras observaban concentrados el desenlace de la pelea de titanes que presenciaban, Estarossa por su parte los había estado mirando mal por haber roto las instrucciones que el había puesto a la pareja.

-Aquella presencia es...- dijo mientras batía sus alas oscuras contra el aire, y observábamos una muy dorada armadura avanzar entre los presentes estáticos por la magia causada del mandamiento.

-Es el pecado más fuerte.- complete con un susurro provocando que el chico observara a su acompañante, mientras procuraba atraerla más hacia él, aun así a pesar de los años seguía sin comprender lo que la mujer pensaba, era realmente buena guardando emociones.

La batalla entre ambos titanes se desenvolvió sin antes intercambiar ciertas palabras, podía sentir el calor que emanaba Escanor mientras luchaba con el albino en un golpe seco de la magia de dicho hombre de armadura dejo al de traje azulado de rodillas contra el suelo, sacando una que otra sorpresa del mandamiento de mi lado.

-¡Es imposible!-jadeo extasiado -Recibió el golpe mientras se cubría- musito.

-Yo te dije - aun así la pelea no termino hasta que utilizó el máximo de poder proveniente del sol sacando finalmente a Estarosa de la periferia de todos, aun así desde mi altura podía observar el lago completamente evaporado y en uno de los agujeros se observaba a una mandamiento inconsciente.

Podía sentir el enojo de Zeldris por la incompetencia de su hermano, aun así, no parecía querer hablar, hasta que ambos percibimos un poder que nos llenaba de recuerdos, aquel ser se volvía a levantar entre los muertos desde algún lugar de Britania.

Meliodas estaba de vuelta.

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-Borrare tu existencia hasta que no quede ni polvo- manifestó el pequeño rubio, su apariencia y voz cambio, he incluso las mismas palabras que salían de su ser eran toscas.

El mandamiento morado parecía volver a tener recuerdos de antaño con la nueva actitud de su ex capitán, definitivamente era la magia antigua que poseía.

Y no solo provocaba temor, sino que también despertaba la curiosidad de dos personajes, que se acercaban a todo pulmón donde el futuro enfrentamiento ocurriría.

-Mientras tu vivías un insulso sueño, nosotros nos preparamos para vengarnos de ti y del clan de las diosas- musitaba un perforado mandamiento, Meliodas había atravesado completamente la franja de no retorno con el hombre herido.

-Yo pase algo parecido- concluyo el chico exesmeraldas pues sus ojos ya no mostraban la simpatía de siempre.

-¡No eres el único!- gritaron desde los cielos, donde la silueta de su hermano era completamente opacada por la mujer que envolvía el cuello del chico de prendas carmesí para no caer al suelo.

La atmosfera no solo era tensa, traía un sinfín de emociones provenientes de todos.

-Deberías acabarlo- musito el pelioscuro al mandamiento que aun procuraba acaparar oxígeno. Mientras la pareja descendía hasta tocar el duro suelo de roca grisácea, el chico rubio aun en su estado de no control los observaba con seriedad.

-Y como diablos piensas que hará aquello- dijo seco observando aún más deseoso de sangre a su hermano menor.

Zeldris sabia el secreto del Meliodas, claro estaba, solo es cuestión de observar con precisión como el rubio había mirado a la chica de su lado cuando ambos aparecieron en escena. En un rápido movimiento el hombre de traje carmesí volvió a pegar de manera brusca a la mujer castaña, procurando esta vez tomar su barbilla con delicadeza y juntar sus labios con los de ella pretendiendo que el rubio tuviera el mejor asiento para presenciar el beso brusco y deseoso que su hermano le daba a la chica de traje gris.

Definitivamente el menor de los hermanos estaba ganando, pues había dado justo en el clavo y usaría este recurso contra el ex mandamiento que poco a poco parecía ir decayendo en la magia que había adquirido.

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Mejor tarde que nunca ( lo lamento subirla el 10 y no 9 soy una mentirosa).  

Dos noticias: 

1. Continuare la historia hasta la tercera temporada, si en esta temporada la dejan a medias tendré que tomar ciertas partes del manga (lo siento si no lo leen) 

2.Odie la censura del anime. 

Y por favor no sean fantasmas y comenten, comenten, comenten es entretenido leerlas xd. 

Adiós iré a hacer un informe :C las veo en el otro cap.