22.-LUJURIA ESTA EN EL AMBIENTE

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Pase la mayor parte del día encerrada en la pequeña habitación, haciendo que Elizabeth en reiteradas ocasiones viniera a verificar que estuviera viva, mientras utilizaba la típica mentira de "no me siento bien" en vez de un "no quiero ver a nadie"

El pasado y el presente era el poseedor de mis pensamientos, pero aun así a pesar de la gran cantidad de recuerdos los cuales venían a mí como una ola desalmada, Meliodas se posicionaba inminentemente contra mi cabeza derrochando paz mientras la sonrisa tranquilizadora del rubio se hacía presente como una imagen bien guardada por mis retinas.

-______¿Por qué le contaste?- se reprochó para tomar con ambas manos su cabeza hecha un lio.

-Le contaste porque confías en él- susurro su conciencias, a tal grado de casi estar burlándose de ella. Mientras la chica intentaba desesperadamente borrar aquel comentario verídico pero que aun así no admitía.- ¿confiar en él?- se preguntó- ja, yo no soy una persona que explique su pasado a personas que no conoce - se respondió victoriosa, pero nuevamente la conciencia la desarmo diciéndole:

-Anoche mandaste al caño tu oculto pasado solo porque era Meliodas, además.... tarde oh temprano le contarías lo sucedido al resto- se respondió quedando la conciencia invicta de la guerra interna.

Suspiro tras suspiro dejaba salir a través de sus labios rojizos a causa de morderlos con fuerza gracias al pequeño tic nervioso que comenzaba a desarrollar por sus respuestas y enredo estomacal que tenía en aquel entonces.

-______-sama- llamaron acompañado de tres delicados golpes en la madera de color verde-Hay una celebración afuera por la llegada de un nuevo pecado y si no se sigue sintiendo mal acompáñenos- rogó, Elizabeth detrás de la puerta, con todas las reiteradas veces que la chica albina vino a tocar su puerta podía incluso deducir la fuerza de sus toques.

-Lo intentare- conteste, consternada ¿nuevo pecado? Acaso escuche mal y el sonido no fue capaz de viajar por la madera hasta mi oído correctamente, ¿Qué paso mientras estaba aquí lamentándome por abrir mi boca?

Meliodas

-Meliodas, cuida bien de aquella espada- musito el viejo hombre que tan bien se mantenía, como en los viejos tiempos donde ambos combatíamos por el mismo reino.

Ambos nos habíamos alejado para así charlar más a gusto sobre mi obsequio el cual descansaba en mi espalda; los chicos celebraban alegremente con tarros de cervezas y un jabalí asado perfectamente condimentado que realizo anteriormente el albino que considero mi mejor amigo. Era degustado en el círculo de los pecados, eh incluso desde esta corta distancia mis ojos fugaces se depositaban en la muchacha de vestimenta floreada y bucaneras negras , mientras hacia su presencia por primera vez en todo un día.

-Lo hare.. después de todo alguien importante quería que lo conservara- conteste con mi sonrisa tonta llega de recuerdos y ojos fijos en cierta persona.

-Ten cuidado Meliodas- advirtió haciendo que girara mi vista hacia el anciano.

-¿Por qué?- cuestione.

-Esa chica, guarda muchos más secretos de lo que aparenta- respondió tajante, antes de que pudiera reaccionar de la intriga el hombre canoso y más pequeño que yo se encamino por el largo sendero verdoso, sin antes musitar "cuídate" y un "se precavido".

La mirada penetrante de ______ la sentía bajo mi cuerpo, ¿Acaso pudo oírnos? Oh solo era ¿casualidad?. Sin más y despejándome de mi ajetreada cabeza llena de pregunta, Salí de entre los pequeños arbustos para encaminarme a la fiesta de bienvenida para lujuria.

______..

-Tienes que aprender a leer el Ambiente- dijo Hawk el cual me hacía pensar que la manada del cerdo iba aumentando en número, quizás podríamos hacer una cuota de membresía para comprar implementos.

-¿leer... el...ambiente?- pregunto extrañado haciendo que su cabeza se inclinara un poco al costado.

El silencio rondo.... Pero desapareció al instante cuando el chico de gafas contemplo profundamente al rubio y Elizabeth que charlaba gustosamente sobre la comida deliciosa de Ban.

una bomba se aproxima, capitán.

-A la princesa le gusta el capitán- musito acomodando sus gafas.

Repito la bomba fue lanzada... controlen a Diane.

El caos se propago mientras Ban y King de manera desesperada calmaban a una chica ebria que dormía profundamente, todos en ese instante sentíamos que volvía nuestra alma al cuerpo y me refiero con todos a King, Ban y yo mientras que Meliodas posaba su mirada en diferentes lugares menos en nosotros y Elizabeth...bueno ella descubrió otro rojo en sus mejillas.

Luego de los incómodos momentos causados por el muchacho de pelo rosa, llego la hora de descansar, los presentes se adentro posiblemente preparándose para descansar y refugiarse de la fría lluvia amenazante, pero yo solo me limitaba en estar sentada en unos de los escalones observando la lluvia con firmeza que impactaba en el suelo verde.

-si sigues ahí te enfermaras- se acercaron, para acto seguido depositar en mis hombros una prenda la cual olía a Ban, su aroma era embriagadora y se sentía cálida a causa de que el hombre la estaba usando antes de dármela.

-No importa- corte, la verdad es que no me interesaba enfermarme solo necesitaba quedarme a observar la lluvia, este clima siempre me trasmitía tranquilidad como si las gotas me digieran metafóricamente "todo saldrá bien" y estas palabras las necesitaba más que nunca.

-Bien enférmate y muere- concluyo, pero el platinado se detuvo a la mitad de sus pasos, regresando hasta donde estaba yo nuevamente, depositándose junto a mí.

- Eres extraña- reprocho sentado a mi lado mientras mi sonrisa aparecía por primera vez en todo el día.

Quedarme a observar la lluvia con Ban fue aún más relajante de lo que pensé, en algunas ocasiones trasmitíamos unas cuantas palabras pero la vista que teníamos, nos robaba absolutamente toda la atención. Quizás pasar tiempo con Ban no era tan malo. Incluyendo que comenzaba a entender por qué esa pequeña chica rubia se enamoró de él.  

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Lo se me demore en subir, pero chicas me duele que no comenten oh sean fantasmas... de verdad una opinión oh una estrellita no seria malo, con el corazón herido me despido, un beso nos vemos en el otro capitulo.... 

El pecado de la venganza (Meliodas & Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora