Mi mejor jugada eres tú ||Marco Asensio||

XXVII

Jueves 17 de agosto del 2017. 20:00pm

"Y parece que cada vez la posible relación entre el fútbolista Marco Asensio y la hermana de Isco Alarcón figura a ser un hecho. Hoy fueron captados juntos por las calles de Madrid y muy felices. ¿Será que pronto confesarán su romance?"

Escuchar hablar de Marco y de mí en la televisión se ha vuelto muy común y es que todos quieren saber que pasa entre la hermana de Isco Alarcón y la joyita del Real Madrid. Me causa gracias, pues a mí también me gustaría saber que es lo que pasa entre nosotros.

Digo, él me gusta, yo le gusto y eso se sabe pero hay algo más, algo más fuerte que no logro definir, un sentimiento profundo e intenso. Pero ninguno de los dos se ha molestado en averiguar o hemos hablado sobre esto que sentimos. Besos, caricias y cursilerías las hay en nuestra relación de amistad, para qué mentir. Pero ¿estamos listos para llevar una relación seria conociendonos un par de meses y nada más?

—¿En qué tanto piensas bonita?— mi mirada se despega del televisor para mirarlo a él que acaba de salir de la ducha y se está secando el cabello con la toalla mientras se acerca a mí. Yo le doy golpecitos al colchón para que se acueste junto a mí y él sonríe por eso.

Se tira en la cama y gatea hasta que su cabeza se coloca en mi pierna. Yo empiezo a pasar mis dedos por su hermoso cabello mojado una y otra vez.

—En nosotros— Marco me mira y noto un brillo especial en sus ojos y una profundidad en su mirada a punto de provocarme un infarto al miocardio.

—¿Nosotros?— pregunta mientras se incorpora para acostarse boca abajo con los brazos apoyados en la cama.

—Nosotros— confirmo y él asiente dudoso.

—¿Quieres hablar sobre eso?

—Tal vez— él tiene sus ojos fijos en mí. Suspiro— no lo sé. Es sólo que me gustaría saber que es lo que hay entre nosotros exactamente.

—Eso debemos descubrirlo juntos bonita— dice con suavidad— pero yo quiero que sepas que estoy feliz contigo en mi vida, sea como conocidos, vecinos, amigos, novios o lo que sea, yo sólo quiero tenerte junto a mí y no niego que una amistad no me basta y me gustaría algo más pero eso vendrá con el tiempo, sé que no crees en el amor repentino y es por eso que no decido avanzar e indagar más profundo en nuestra relación. Tú estás bien, por ende, yo estoy bien y no quiero arruinar esto que tenemos apresurando las cosas, si tenemos que ir despacio, iremos despacio y esperaré el tiempo que deba esperar para estar contigo. No sé cuándo, no sé dónde pero algún día seremos algo más de lo que ya somos, el destino se encargó de hacer que nos conozcamos, ahora es nuestro turno de permanecer juntos. Pero creéme bonita que si de algo estoy seguro ahora es que quiero que tú permanezcas conmigo, yo te quiero a ti.

Sus palabras me aceleran el ritmo y siento como se me humedecen los ojos ante esas palabras tan lindas. No sé que decir y por eso, mejor me callo. No soy capaz de formular respuesta alguna que igualen sus palabras, no soy capaz de pensar nada en estos momentos, sólo puedo poner mi mano en su mejilla y sonreírle antes de acercar nuestros rostros y unir nuestros labios.

Él me corresponde de lo más encantado, este es un beso distinto, se siente distinto, es especial. Nos separamos y una sonrisa aparece en mi rostro y en el de él también. El tiene sus manos ubicadas en mis mejillas respectivamente y las acaricia suavemente, cierro los ojos disfrutando del contacto para luego con mis manos sujetar las de él.

—Si seguimos así, no falta mucho para que te convierta en mi chica— susurra rozandome los labios, yo me encargo de juntarlos por a penas un segundo.

—No te preocupes por eso Marquito, yo ya soy tu chica.

Y así como vamos, sé que no seré sólo su chica por mucho tiempo.