◆AXL◆
18 DE FEBRERO DEL 2011
Las heridas de mi frente y mi cabeza me escuecen por el sudor, es por eso que apenas lanzan los primeros fuegos artificiales, me escabullo a las duchas. Una vez bañado y vestido con ropas limpias, deposito mi uniforme sucio en el cesto correspondiente y me dirijo en busca de Major. El hombre estudió medicina deportiva y se encarga de nosotros cuando sufrimos alguna lesión, por lo que supongo que sabrá limpiar una herida del tipo de las que están en mi cabeza y frente.
Efectivamente lo sabe. Me ayuda limpiando con agua oxigenada y murmura algo sobre lo bien que está yendo la cicatrización. Le agradezco su ayuda y me despido de él para ir en busca de Matt.
El castaño tiene una toalla enganchada de su cintura cuando lo encuentro, está parado frente a su casillero. Calvin pasa a las prisas con una bola de uniformes sucios que lleva a la cesta donde hay que depositarlos y yo ruedo los ojos; esos cabrones abusan de él. No sé por qué les hace caso.
Matt se rocía las axilas de desodorante justo cuando llego a su lado para decirle que se dé prisa.
—Tranquilo, joder, ya voy.
Se desliza en una camiseta, me lanza la toalla sucia, lo que me hace rodar los ojos, y se pone la ropa interior para luego meterse en sus pantalones.
Llevo su toalla al cesto mientras él se pone los zapatos. Una vez que está listo nos ponemos en marcha; la fiesta en la casa de los Goodrich nos espera. Mejor aún, Shay me espera allí.
Sonrío automáticamente cuando parqueo mi auto frente a la casa de la fiesta. Matt estaciona el suyo justo en el espacio que queda detrás.
Ubico el carro de Jordan y le palmeo la espalda a mi amigo con emoción antes de medio correr a la casa para poder encontrar a Shay. La puerta no tiene seguro, así que entro primero. Matt grita que lo espere pero luego se encuentra con una chica y se olvida de mí.
—¡Reese! —Llamo a la pelirroja, que parece cabreada, cuando por fin la encuentro—. ¿Qué pasa? ¿Y Shay?
Ella se muerde el labio y mira de reojo a Jordan, lo cual no me da buena espina. Entrecierro los ojos y le insto a hablar.
—Okay, okay. Está con el británico ese, Will o lo que sea. El que conoció en Black Panther —confiesa de mala gana, la noticia no me cae nada bien—. Lo invitó a venir con nosotros y como el tipo no sabía llegar le pidió que lo acompañara en su auto.
—¿Y todavía no llegan? —pregunto con una mueca.
—No —murmura—. Trato de llamarle pero no responde. Salta directo al buzón.
—Okay...
Asiento, mordiendo el interior de mis mejillas.
No soy el tipo celoso al que le molesta que su novia tenga amigos, pero estoy molesto en este momento. Primero que nada porque Shay no es mi novia, las cosas entre nosotros están demasiado frágiles como para sentirme seguro y además no sé qué puedo esperar de ese chico.
Reese trata de decir algo más pero yo levanto una mano para impedírselo. Me alejo de ella, saliendo de la casa. Me siento en el porche y llamo a Shay un par de veces sin conseguir resultados positivos.
Vale, está bien, ella va a llegar pronto.
La música fuerte que sale por los huecos que encuentra en la casa comienza a molestarme, cada que alguien abre la puerta el ruido es peor.
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Plan B
RomanceTras descubrir un inesperado secreto, la tranquila vida de Shailene Miller se convierte en un desastre que ella no está segura de poder -o querer- manejar. Shay no soporta el drama, y, sin embargo, ha terminado en el medio de uno. His...