El Reencuentro

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Capítulo I

Quedó paralizado, se notaba el miedo en su mirada, ella igual mostraba una extraña postura, tal parecía que ni ella se sentía enteramente cómoda.


— Puede sentarse Señor Universe, es bueno verlo de nuevo. — pidió la pelo azul.


Otras palabras, tardaba mucho en reaccionar, apenas logró ver el asiento que estaba a su frente, agradeció a lo más santo el haber podido sentarse.


La mujer de igual manera lo hacia, era bellísima, los años solo la favorecieron, perdido en el pasado y deslumbrado por el presente, aún no emitía ningun sonido, solo la observaba.


La pelo azul notó ese extraño callar, uno diría que ella también estaría así; pero aparentaba lo contrario. Trató de hacer que la cita avance.


— Estoy consiente de tu brillante carrera musical, para serte honesta me sorprende que hallas recurrido a mí; pero me alegra el verte de nuevo, es una gran excusa para un reencuentro ¿no crees?

— Sí — contestó al fin. — disculpa mi actitud, es que estoy sorprendido. — contestaba algo más calmado

— Ja, es bueno el oírte. — expresó con gracia.


Aún tenía varias cosas que recordaba; pero esa mirada era nueva, más gallarda, más segura de si misma. Era una mirada de ganadora, una muy diferente a la que Steven presentaba.


— Te ves muy bien, parece que el éxito te a sonreído. — comentó el rizado.

— Bueno no tienes nada que envidiar, parece que tomaste la "decisión correcta". — comentó con una tonalidad algo irónica



Esas palabras fueron suficientes para aturdirlo, sentía que lo culpaba, el joven se levantó bruscamente con dirección a la puerta, necesitaba un momento a solas.


— Discúlpame un momento — expresó con torpeza saliendo de la oficina


Subió los escalones hasta llegar a la terraza del edificio, una vista entera de la ciudad y él al medio, alfin un respiro de esa asfixiante cita que tenía.


Trataba de calmarse, cientos de cosas pasaban por su mente debía ordenarlas. Quería estar solo; pero ya era demasiado raro.


Ella se ve tranquila ¿Por qué tú no lo estás? Olvídalo, algún día podía pasar esto, no tienes ninguna deuda con ella, no tienes ninguna relación con ella. Solo es trabajo”


Dió un pequeño vistazo más al abismo, estaba tan cerca de él. Ese nuevo aire lo relajó, fue demasiado por ese día.


Previamente ya habia tenido una discusión con su mujer, hace unos minutos atrás le informaron que su exnovia lo buscaba y para finiquitar todo se encuentra con su primer amor.


Volvió a la oficina, la secretaría lo vió y pidió que lo espere unos segundos. Entró corriendo a esa oficina dejándolo esperando afuera.

Tardó unos segundos; pero salió al fin.


— Ya está lista, digo, dijo que pase. — se expresó nerviosa la secretaría


El hombre obedeció y entró, la mujer estaba sentada en su escritorio algo pensativa.


— Lamento lo de hace rato, necesitaba un respiro, tuve un mal día.

Amores Compartidos (Quédate Conmigo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora