Enamorado Del Asistente. -|Jalonso|-

Chapitre 11

Canela terminó el beso y aun con sus manos sosteniendo por las mejillas el rostro del castaño besó sutilmente la punta de su nariz.

-¿Te ha quedado claro? -preguntó en susurro Jos.

Alonso aun con las mejillas coloradas y los ojos cerrados asintió, una risa adornó los labios de Canela.

-Andando, tenemos una junta que organizar -dijo e hizo que el castaño sonreirá para después asentir.

Bajaron del auto y salieron del estacionamiento, Jos tomó la cintura de su pequeño asistente y se adentraron a la recepción. Al ver que uno de los contadores se acercaba Alonso quito de golpe el brazo del ojimiel de su cadera, ganándose una mirada de reproche por parte de Jos.

-Buenos días señor Canela -dijo amable y miró al castaño- y joven Alonso.

-Buenos días Bruno -habló Jos a secas.

-Buenos días -sonrió Alonso y el tipo siguió su camino.

Canela camino hasta su oficina y se adentró a ella sin si quiera voltear a ver al castaño, después de unos segundos Alonso entró y cerró la puerta. Sabía de sobra que a Jos no le agradaba mucho el hecho de esconder su "romance" de los ojos de los demás.
-Jos...-fue interrumpido por la voz de Canela.

-Llama a todos a la sala de juntas, diles que empezamos dentro de veinte minutos -dijo y tomó asiento frente a su computadora de escritorio.

-¿Es todo lo que me dirás? -remarcó su ceño y habló con enojo.

Jos suspiro y sonrió con malicia, entrelazo sus propios dedos y enarco una de sus cejas.

-No...-suspiró y miró desafiante al castaño. - prepárame un café.

Alonso arrugó aun mas el entrecejo y miró de mala gana a Canela, mientras este aun mantenía una estúpida sonrisa engreída. Pero esto no haría que Alonso cediera a las tontas provocaciones de Jos, suspiró un poco y sonrió amable.

-¿Lo quiere descafeinado, señor? -hizo énfasis en señor.

-Con un poco de crema estaría bien, -sonrió y se recargó en el respaldo de la silla- ni tan frío pero tampoco lo quiero caliente, tibio sería la temperatura correcta.

Bien, Canela era el ganador de esta pequeña pelea de egos, Alonso desvío su vista de los ojos mieles de su jefe y se cruzó de brazos.

-Sino fueras tan lindo te golpearía la cara para borrarte esa estúpida sonrisa -dijo con enfado e hizo carcajear a Jos.

-Lo se cariño, lo se -habló con exceso de ego en sus palabras.

Alonso solo rodó los ojos y salió de la oficina de Canela, miró hacía el escrito de Evelin pero la castaña aún no había llegado. Caminó hasta la primera oficina y tocó antes de entrar, una voz de mujer con un sutil tono dijo un no tan alto pase. El castaño entró y miro a la señora que tecleaba algunas cosas en su laptop.

-¿Se le ofrece algo señorito? -alzo su vista y miro por arriba de sus lentes al castaño

Alonso quiso reír por el "apodo" con el que lo había llamado aquella mujer, solo sonrió y caminó hasta estar enfrente de su escritorio.

-El señor Canela organizó una reunión que dará inició dentro de veinte minutos -dijo aun con la sonrisa y un pequeño rubor en las mejillas.

La mujer sonrió al ver el rostro de Alonso y quitó sus lentes, ya había entendido el por que Jos estuvo sonriendo todo el día o mas bien diría por quien.