Lunes, 31 de diciembre, noche vieja. Violeta había organizado una cena en casa a la que irían Kiki, obviamente, Martin, y Juanjo, pues el resto, como dijeron, pasarían todas las fiestas en sus respectivas casas así que sólo se reunirían ellos. Se trataba de una cena simple, nada especial. Después de cenar, comerían las uvas y después Martin y Juanjo se irían a una fiesta que organizaban unos amigos de Juanjo, esos dos habían congeniado muy bien. Violeta no podía ir pues tenía una niña a la que cuidar, y Kiki insistía en que si la pelirroja no iba, ella tampoco, pues no quería dejarla sola.
- Kiki, deberías ir a la fiesta, no sé qué punto te ha dado de no ir porque yo no vaya.- Se quejó Violeta mientras sacaba las bolsas de la compra del maletero.
- Pues que no me apetece ir si no vas a ir tú. No quiero estar de fiesta y pasándomelo de maravilla, mientras tú estás sola, con el pijama en casa. Me dijiste que nunca habías pasado las navidades sola, pues este año no va a ser la primera vez.- Contestó Chiara a la vez que llegaban al ascensor.- Además que estos dos no sé que se traen, y no me apetece molestarles.
- Serías su sujetavelas.- Rió.
- ¿A quién le tengo que sujetar las velas? No hemos comprado velas, Vivi.- Respondió confundida, más aún cuando a Violeta casi le da un ataque de risa, contagiando a Olivia, a pesar de que no entendía la situación imitaba a su madre.- Oye! It's not fair! .- Se hizo la ofendida mientras iba a hacer cosquillas a la pequeña.
- No voy a estar sola, estoy con Oli.- Dijo Violeta empujando el carrito en el que iba la niña, una vez Chiara dejó de hacerle cosquillas, y a la vez que entraban al ascensor.
- Uy sí. Sabes que quiero mucho a Oli, Vivi, pero digamos que la niña se va a quedar sopa incuso antes de dar las campanadas.- Abrió la puerta de casa.
- No tienes remedio, Kiki.- Dijo Violeta suspirando.
- Soy muy terca, cada vez me vas conociendo mejor.- Contestó guiñando un ojo mientras dejaba las bolsas encima de la encimera.
A Chiara, cuando Martin propuso el plan de salir tras las campanadas, le pareció buena idea, pero claro, ni el vasco ni ella se habían parado a pensar que la pelirroja no podía ir porque tenía una hija a la que cuidar, así que tras la obvia negación de Violeta, ella decidió no ir tampoco. A Chiara le encantaba la fiesta, pero a decir verdad, desde que volvió a España solamente había salido un par de veces por la noche con Martin y Ruslana, pues el resto era más de hacer planes chill. No lo echaba en falta. Prefería quedarse en casa con Violeta que acudir a la fiesta del siglo. No sabía qué era exactamente lo que le pasaba con la de Granada, pero le traía loca. Le encantaba estar con ella, le encantaba estar con la niña, le encantaba cuando se quedaban hasta tarde hablando o haciéndose reír la una a la otra, o cuando a la pelirroja le entraba el bajón, que aunque no dijera nada, Chiara se lo notaba y hacía lo que fuera por entretenerla. Le encantaba Violeta, y punto.
Eran las nueve y cuarto, hora a la que habían quedado con sus amigos, por lo que estarían al caer. Violeta se encontraba dando de cenar a Lola un puré mientras Chiara ponía la mesa cuando llamaron al timbre.
- Hola maricones.- Dijo Chiara abriendo la puerta.
- Me ofendes Chiara, me ofendes.- Contestó Juanjo haciéndose el dramático.
- ¿Qué tal estáis chicos?.- Dijo Violeta desde el sofá riendo. Juanjo ya estaba fuera del armario, aunque le había costado mucho hacerlo, por lo que a veces se hacía el dramático imitando cómo era antes de dar el paso.
- Muy bien, ¿vosotras?.- Contestó Martin.
- ¿Dónde está la niña más guapa del mundo?.- Dijo Juanjo de forma exagerada cogiendo a una Olivia que lo miraba asustada.
- Juanjo, que acaba de cenar, como sigas moviéndola así te va a vomitar encima.
- Uy no, que voy muy guapo hoy para salir a la noche.- Contestó dejando a Olivia en el suelo, quien empezó a llorar asustada por el momento y por el cansancio.
- ¡EY! You're an asshole .- Le recriminó Chiara mientras se agachaba a coger a la pequeña .- Be careful with her.- Dijo mientras Violeta le daba una colleja y la pequeña se olvidaba del drama para empezar a reír.
- Todos contra Juanjo, genial.- Se hizo el ofendido.
- ¿Cenamos chicos?.- Preguntó Violeta llevando la cena a la mesa.
La cena transcurrió de lo más divertida, pues con Juanjo no se esperaba menos. Olivia se quedó dormida en el sofá efectivamente antes de las campanadas, por lo que Violeta la echó a dormir en su cuna, y después se pusieron a jugar al bingo mientras bebían un poco, a la espera de las campanadas.
A 5 minutos de las campanadas, cada uno fue a la cocina a prepararse sus doce uvas, y tras una pequeña discusión de las chicas porque Chiara se cogía las más pequeñas, fueron a la sala.
- ¡Es que no entiendo esta tradición! .- Se quejaba .- Si no me cojo las pequeñas me voy a ahogar.
Desastre. Así se define la forma de comer las uvas. Martin no las tragaba, por lo que al final, en un ataque de risa porque Chiara se había, efectivamente, atragantado, las acabó escupiendo todas. Pero fue muy divertido, por lo que el desastre daba igual. Eran su desastre.
- ¡FELIZ AÑO NUEVO JODER!- Dijo Juanjo gritando y abrazando a todos, para terminar dando un beso a Martin.
- WHAT!!!!.- exclamó Chiara, que los miraba asombrada junto a Violeta.
- ¡Venga ya! .- Exclamó Martin .- Si fijo que hasta teníais una apuesta.
- Kiki, te dije el otro día que teníamos que hacer una porra.- Vaciló .- Me alegro por vosotros chicos, espero que os vaya muy bien .- Finalizó abrazándolos.
Tras felicitarse todos el año nuevo, Martin y Junjo se marcharon, pues la fiesta comenzaba a las doce y media y tenían que ir andando.
Violeta, tras ponerse el pijama, fue a la cocina para recoger los platos y meterlos al lavavajillas. Violeta se sobresaltó cuando sintió como Chiara la abrazaba por detrás y le susurraba feliz año nuevo al oído, haciendo que se le pusiera la piel de gallina.
- Feliz año nuevo, Vivi.
- Feliz año nuevo Kiki, me asustaste.- Contestó Violeta dándose la vuelta para quedar frente a frente.
- ¿Qué me miras tanto?.- Preguntó Violeta ya algo nerviosa, pues Chiara no le quitaba la mirada de encima.
-I'm sorry, Vivi...- Dijo Chiara cagada por lo que iba a hacer, pero no se podía contener más.
- For what? Pero si no...- No le dio tiempo a acabar, pues antes de terminar la oración, Chiara ya había posado sus labios sobre los de ella.
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Me quedo contigo // Kivi
RomancePara Violeta, el haberse quedado embarazada con 23 años no suponía ningún problema porque lo tendría con la persona de la cual estaba locamente enamorada, su novio desde hacía tres años, Julio. Pero todo en su vida se derrumba en el momento en el qu...