Temores | Lapidot

Capítulo 9: Jasper Jones; algo de valor.

    Después de llevar mucho tiempo sin poner nada en aquella libreta por fin encontró algo: las noches de verano.

    Tal vez algunos días tenían un calor insoportable por las tardes, pero en las noches el clima era ligeramente cálido y el aire era tranquilo, lo suficiente para hacer que se relajara. Podía no ser la gran cosa, pero, ¿cómo es que nunca antes lo había notado?

    Recientemente había empezado a darse cuenta de que había perdido años y años pensando en cosas malas, manteniéndose ocupada en eso.

    Habían varias cosas que disfrutaba y ni siquiera lo sabía, pero haberlo descubierto al fin le alegraba.

    En lo que llevaba de vacaciones había estado trabajando, la mayoría de los días veía a Peridot en el restaurante, y algunas noches solían salir al parque y quedarse encima de algunos juegos platicando.

    Era fantástico, sólo conversar y disfrutar de la brisa de las noches cálidas.

    Y entre salidas, el trabajo y conversaciones de la vida su verano iba avanzando.

    Pronto volverían a clases, y con eso otra cosa vino a su mente.

    Jasper Jones pronto volvería a la universidad, y ya no lo vería dentro de mucho tiempo.

    Lo estaba recordando porque justo en ese momento se encontraba viéndolo, estaba llegando a su casa después del trabajo y el hermano mayor de Amatista estaba sentado junto a la puerta hablando por teléfono.

    Lo observó bien; cabellos claros y alborotados, piel bronceada, gran musculatura y ojos color ámbar.

    Desvió su vista antes de que se pudiera dar cuenta, con su rostro ardiendo continuó caminando a paso lento.

    Recordaba que alrededor de los doce le había empezado a llamar la atención, Jasper comenzaba a volverse atlético y ya estaba en la preparatoria, además siempre había sido gracioso y amigable, aunque a veces era algo tosco. Pero nunca le había hablado mucho, solo simples saludos o sonrisas cuando pasaba frente a su casa.

    Lo vio por última vez y el volteó hacia ella, haciendo un ademán y sonriendo, seguía atendiendo su llamada. Ella le sonrió y volteó aún nerviosa, cuando entró a su casa sonrió más y luego fingió no darle importancia, tenía cosas que hacer.

🔸🔸🔸

    —¿Pasa algo? —le preguntó la rubia.

    Ella continuó moviendo la pajilla de su jugo, ya llevaba un buen rato en silencio.

    —El verano casi acaba.

    —Sí, queda como una semana antes de volver a clases.

    —Mmm...

    —Has estado rara estos días, ¿por qué?

    Suspiró y levantó la mirada, sonriendo de manera nerviosa —Te voy a contar algo, pero no te burles.

    —Prometo no hacerlo —sonrió levantando la mano.

    —Bueno —asintió—. Amatista tiene un hermano que se llama Jasper... y él me llama la atención —decía aquello en voz baja—. Y he querido hablarle, pero no puedo, me da miedo.

    —Oh... —infló las mejillas, de una u otra manera eso la había hecho sentirse incómoda.

    —Sé que es algo tonto —rió y rodó los ojos—. Pero me gustaría perderle el miedo a varias cosas, y esto es una de ellas.