¡Otra Vez Tú!

Cap. 37.

-¿Barbara?

Jason: Si.

-¿Pero cómo?¿Ella que hace aquí?

Jason: No lo se, ayer la vi en el centro comercial y hable con ella. Me dijo que ya tenia varios meses aquí pero que no había tenido la oportunidad de encontrarse conmigo, pero nunca menciono porque estaba aquí.

- Luke tenia razón.

Jason:¿Luke?¿Luke qué tiene que ver en todo esto?

-Hace varios meses me dijo que Barbara vendría o estaba aquí, no recuerdo muy bien, solo recuerdo que ella estaba molesta por unas fotos que subiste a tus redes sociales donde salíamos los dos. Después de eso, el día que comencé a salir con Lucas, creí verla en la noche, la seguí pero desapareció de la nada y creí que todo eso había sido fruto de mi imaginación, pero ahora que me dices eso me doy cuenta de que no.

Jason: Entonces, si estaba molesta por las fotos...

-Pretende hacerme daño.

Jason:¿Daño?

-Si. Si no es a ti, es a mi, pero dañara a alguien. Luke dijo que Barbara le menciono que no dejaría que le robaran al amor de su vida. O sea a ti.

Jason: Pero ya han pasado varios meses desde que esta aquí, no crees que si hubiera querido hacerte daño, ¿ya lo habría hecho?

-Pero si esta esperando.

Jason: Esperando ¿qué? Fabiola.

-No lo se, pero tal vez sea eso.

Jason: No lo creo.

-Jason, esa chica es capas de mucho con tal de tenerte en sus manos, también deberías de preocuparte tú. Si Barbara esta molesta porque seguimos en contacto, no me imagino que hará cuando se entere que tienes novia, ella sufrirá más.

Jason: Es cierto, no lo había pensado. Tal vez que viva aquí en México no tiene nada que ver contigo, tal vez vino por Zusseth.

-O por las dos.

Jason: Si.

-Pero, ¿no se suponía que estaban en una relación cuando te viniste a México? Digo, ya tuvieron su tiempo, es hora de salir adelante y seguir con sus vidas así como lo hiciste tú.

Jason:¿Qué? No.

-No, ¿qué?

Jason: No tuvimos ninguna relación cuando me vine a México. Yo salía contigo en ese entonces.

-Ella no dijo lo mismo.

Jason:¿Qué dijo ella?

-Creó que será una larga historia, tal vez deberíamos sentarnos un rato.

Nos sentamos en una banca que estaba cercas.
Jason parecía deseoso de saber lo que había dicho Barbara.

Jason: ¿Ya me lo dirás?

-Si. ¿recuerdas la noche que tuvimos relaciones?

Jason: Si...

-Al día siguiente, desperté y no te vi por ningún lado. Pensé que habías ido a tu casa, pero no. No había rastro de ti por ningún lado.
Ese mismo día por la tarde salí a dar una vuelta al parque, ahí fue donde me encontré con Barbara, me dijo demasiadas cosas.

Jason:¿Qué cosas?

-Que tú solo me habías utilizado para acostarte conmigo, que habías venido a México para olvidarte de mi, que en esos momentos ustedes ya se encontraban en una relación. Me destrozó el corazón. Te amaba demasiado y no quería creer todo eso, pero conforme pasaron los días, nadie sabia nada de ti, no llamabas a nuestros amigos, tus padres no te mencionaban, era como si la tierra te hubiera tragado, y al no haber respuesta tuya, ni un mensaje, ni una llamada, decidí dar por terminado lo nuestro y le creí a Barbara. Comencé a odiarte, realmente te amaba Jason, ¿qué acaso no te diste cuenta?¿por qué hacerme daño?- dije mientras mis ojos se llenaban de lágrimas.

Jason: Nada de eso es cierto -dice en tomo muy serio.

-¿Cómo que nada es cierto?

Jason: Yo tengo otra versión de la historia.
Al día siguiente, si, me fui del lugar donde estábamos, y si, fui a mi casa. Pero no fui un marica que te utilizo solo para acostarse contigo. Me fui de ahí por que mis padres me llamaron, me dijeron que mi salida a México se había adelantado.
Cuando salia de casa, me encontré con Barbara, le conté que estaba apunto de irme a México, ta había escrito una carta y estaba apunto de ir a tu casa a dejarte la, pero ella se ofreció a llevártela ya que yo ya llevaba un poco de prisa. Se la di, y le dije que me diera su numero, que en cuanto tuviera un móvil nuevo la llamaría para que me dejara hablar con todos... Cuando llegue a México días después, la llame, le pregunte por ti, ella me dijo que habías decidido regresar con Luke, que no querías tener nada más conmigo, que nunca me quisiste en verdad. Demasiadas fueron sus mentiras por lo que veo.
Después de eso no tuve novia por mucho tiempo, y cuando te volví a ver, los sentimientos de hacia mucho tiempo volvieron a renacer, por dios Fabiola, te seguía amando.
Tuve la idea de pedirte que fueras mi novia de nuevo, no me importaba todo lo que Barbara había dicho, yo quería ser feliz de buscó contigo.

-¿Qué fue lo que te detuvo?

Jason: Lucas.

-¿Lucas?

Jason: Si, el te pidió antes que fueras su novia. Tú aceptaste.

-Oh dios, no puede ser que todo este tiempo hayamos estado engañados, fuimos separados sin saberlo, Barbara es una chica demasiado cruel. Perdón si algún día te llegue a odiar.

Jason: No te preocupes, tú perdona me a mi por no haberte dicho que me vendría a México, de haber lo hecho, nada de esto hubiera pasado, también quiero que me perdones por las veces que fui grosero contigo.

No me pude contener y le di un sincero abrazo.

No podría creer que eso había pasado en realidad, la culpable de todo era Barbara, ahora entiendo porque decía Jason que yo lo había dejado a él. Y ahora se que es verdad, ambos nos dejamos, nunca luchamos por lo nuestro.

-¿Y ahora?¿Qué pasara?

Jason: Seguiremos con nuestras vidas, tu eres feliz con Lucas, yo trato de ser lo con Zusseth.

-¿Tratas?

Jason: Si. Nunca habrá nadie que te pueda igualar.

Me quedé en completo silencio.
Jason aún sentía algo por mi y yo creía sentir algo por él de nuevo.

Rayos, necesitaba pensar las cosas muy bien, no quería arruinar todo lo que había construido, no quería lastimar a Lucas, porque lo quería, pero con estas revelaciones, también quería a Jason de nuevo.

-Tengo que ir me, nos vemos luego.

Me puse de pie y camine hasta mi auto y me monte en este. Me quede unos minutos en silencio pensando sobre todo ese lío, tenia que evitar a Jason lo más que pudiera pero que fuera algo disimulado, no quería que se sintiera rechazado por mi parte.

Encendí el auto y mire hacia donde unos momentos antes me encontraba con Jason. Él seguía ahí, seguía sentado con la cabeza cabizbaja.

-Pobre, ambos sufrimos demasiado.