...
Me abrió la puerta educadamente, se sentó en el lugar del piloto y arrancó el coche. Sentí la necessidad de observarle todo el rato, ya que, como había visto nunca conducía el, si no que tenía a su chófer a su disposición las 24 horas del día, sin importar la hora, el día o el momento. Verle conducir le hacia más masculino, no se si me explico.
Llegamos a la puerta de la mansión, el me miraba con una sonrisa y yo seguía observando cada uno de sus diminutos pelos de las pestañas, si es que el chaval tiene una pestañakas' que pa' que...
- ¿Bajamos? - preguntó cortandome todo el rollo. Asentí y bajé sin más.
Me di cuenta de que ya había oscurecido, y entendí que era muy tarde. Entramos dentro y Faruk me pidió que me quedará con mis amigas abajo, aunque su madre ya no estaba.
- Buenas noches bonita - me deseó en un susurro subiendo las escaleras.
- Tsabhy 3ala-Jir - respondí de vuelta bajando las escaleras.
Llegué a la habitación y las chicas me estaban esperando. Las dos corrieron hasta mi y me abrazaron con fuerza.
- ¿Cómo esta 3ami Ahmed? - la preocupación de Nour se hacia visible.
- Alhamdulilah, ha salido todo como estaba planeado, pero no he podido hablar con el doctor - preferí omitir la parte de la donación, quien lo hizo y que recibirá a cambio (beso).
- Alhamdulilah - pronunció Amira llevándose las manos al corazón.
- Amira vamos a rezar - le informó Nour arastrandola hasta el baño.
- Yo me echaré una ducha cuando salgais - dije tirandome sobre la cama y cogiendo mi teléfono móvil.
Decidí marcar el número de mama y darle las buenas noticias, además de saber algo sobre ella, ya que desconocía su paradero y su estado.
Llamada:
Madre: ¿Sí?
Escuchar su voz, consiguió en mi una emoción tan grande, tenía ganas de llorar, de reír y de gritar a la vez. Una madre, desde luego, es lo mejor que tiene una persona y sin duda yo sin ella no se que haría.
Amal: Madre...
Susurré con una voz apenada, no tenía porque estar así, pero me salió del alma. Tal vez el echo de pensar que ella no esta cerca, conseguía que asociara eso a que ella estuviera en peligro.
Madre: ¡Amal! (exclamó emocionada) ¿Qué tal estas?
Amal: Hay mama, bien alhamdulilah, ¿Y tú?.
Mama: Preocupada hija, no sabemos nada aún de tu padre...
La interrumpí rápidamente para darle todos los detalles sobre la operación, opiando la de la donación de sangre.
Amal: Alhamdulilah, todo estuvo genial mama, papa esta bien y in shaa allah, volverá pronto sano y salvo.
Dije dibujando una dulce sonrisa en mis labios, recordando todo lo que ha pasado estos últimos meses y como los males se convertían en bienes.
Madre: ¡Allahu-Akbar! (gritó emocionada) Me alegro mucho hija, espero in shaa allah que vuelva tu padre, pronto y podamos verle tan feliz como siempre.
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INTERESES© - muslima_letters [Completa] [Editando]
Roman d'amour«No dejes nunca de luchar, esta vida no esta echa para cobardes» La vida de Amal, cambia de una día para otro, todo le iba mal, pero las cosas empeoraron cuando la enfermedad de su padre lleva a su hermano a meterse en líos de mafias, pero... ¿Puede...