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El sonido de la alarma inundó toda la habitación de MingHao, y este con toda la pereza del mundo se sentó en la cama y procedió a apagarla. Hacía ya varias semanas que no iba a trabajar, por ende se había acostumbrado a levantarse una hora más tarde.

Tras tallarse los ojos, se dirigió al baño a paso desganado. Un par de minutos después, salió del pequeño cuarto y se dirigió a su armario para sacar las ropas adecuadas para ir a trabajar. Una vez estando ya vestido, bajó las escaleras hacia la cocina y se dispuso a preparar ambos biberones para sus pequeños.

Una vez que había preparado aquello, se dirigió con ambos biberones hacia la habitación de los gemelos y luego de un par de minutos de estar peleando para despertarlos volvió a la cocina para así, poder desayunar tranquilo.

Comenzó a revisar el teléfono mientras desayunaba, tenía varios mensajes de Hoshi y de Hansol. Ambos decían lo mismo, "cuando llegues al edificio dirígete directamente hacia la oficina de Jihoon, tenemos que hablar seriamente contigo". Suspiró y dejó de lado la taza. Por alguna extraña razón, ya sabía de qué podría tratar esa charla, y el solo pensarlo lo estresaba.

Dejó la taza en el lavaplatos y volvió a ir hacia la habitación de los gemelos para poder vestirlos, pues el que fueran a la guardería en pijama no le parecía correcto, por más que fueran aún unos bebés.

Media hora después, hizo que los niños entraran al auto, y tras asegurarlos bien, emprendió camino hacia la guardería. En cuanto llegaron los dos hermanos intercambiaron miradas y se negaron rotundamente a abandonar el auto. Solo bastó una mala mirada por parte de su padre para que ellos accedieran a bajar del vehículo muy poco convencidos.

— ¡Buenos días!— saludo la que parecía ser la secretaria del lugar— Xu MingHao ¿Cierto?— el asintio y la mujer le hizo señas para que lo siguiera.

Tras caminar por varios pasillos, llegaron a una habitación, esta tenía la puerta de un color celeste, y en ella podían verse los números uno y dos, ambos siendo separados por un guión.

—Señora Hong— habló la chica, quién se hacía llamar Rena, llamando la atención de una mujer que se encontraba dentro de la habitación— el es Xu MingHao, el padre de los gemelos— la mujer se le quedó viendo con sorpresa, y al cabo de unos segundos decidió hablar.

—No pensé que fueras tan... Joven— dijo la mujer y el simplemente atinó a reír.

—Muchos me dicen eso— respondió y dirigió su vista hacia los gemelos, quienes se habían quedado embobados al ver la cantidad de juguetes que habían en aquella habitación.

—Perdona si te incomodé, no fue mi intención— dijo la mujer haciendo una reverencia— el turno que solicitaste es hasta las cuatro ¿Cierto?— el asintió— perfecto, puedes irte si deseas, yo llamaré a una de las chicas para que se encargue de cuidar a tus pequeños — MingHao volvió a asentir y les hizo señas a los niños para que entraran a la habitación, estos lo miraron no muy convencidos pero al final ingresaron.

Tras despedirse del personal de la guardería, subió al auto y se dispuso a conducir directamente hacia su trabajo. Una vez que llegó, ingresó al edificio y se dirigió al ascensor para luego colocar el número del piso en el que se encontraba la oficina de Jihoon. Cuando las puertas del ascensor se abrieron, saludó a algunos de sus compañeros y luego ingresó a la mencionada oficina.

—Sientate que tenemos que hablar— le dijo Seungcheol en cuanto él estuvo completamente dentro de aquella habitación. Sin decir nada, procedió a tomar asiento mientras sus cuatro mejores amigos lo miraban sin expresión alguna.

— ¿Sobre qué debemos hablar?— preguntó para romper aquel incomodo silencio que se había formado. Jihoon suspiró y quién tomó la palabra fue Hoshi.

—Minghao, esos niños necesitan una madre—...

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Un Papá En Problemas / Xu Minghao [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora