Ambrose

¿Lider? ¿yo?...

-Todos te quieren seguir.-Afirmó andrew

-Así es.-exhalé-No estoy segura de lo que haré Andrew.- Respondí pensativa.

-Guiarlos,-me dijo con tono de obviedad.-rescatar a sus familias y darles una vida segura en la que no tengan que volver a ser esclavos de nadie.- Sentenció Andrew.

-Si, pero por ahora, debemos tomar turnos para hacer guardia.-Explicaba Colin mostrándome las armas de los guardias.

-¡Oigan todos!-grite llamando la atención de todos los presentes mientras Colin me ayudaba a levantarme.- Necesitaremos guerreros para hacer guardia en la noche, hay que protegernos en caso de animales.-Expliqué.- Hay pocas armas, así que necesito de los mejores guerreros.

-Señorita.-dijo un hombre con voz ronca en la lejanía.- Mi nombre es Lateef señorita.- Decía este hombre mientras se acercaba a el principio del gentío.- Estuve años siendo guardia en el clan 3, yo tomaré un turno.

-Perfecto, muchas gracias señor Lateef.- Dije mostrándole una sonrisa.

-Señorita, no hay nada que agradecer.-Dijo feliz.- ¡Vamos muchachos!-Ordenó el y seguida salieron diez hombres preparados para pelear.-Estos son: Kosei, Aswad, Sudí, Ramsis, Bastian, Uziel, Jacke, Gary, Arnaú y Einar. Sus nuevos guerreros.

Einar...

-No tengo armas para todos,-confesé- y la mayoría de las armas son látigos, todos los guardias tenían así que tenemos cuatro látigos, dos cuchillos y dos lanzas.- Expliqué.- Pero la guardia es necesaria y mientras mas personas mejor.

-Así mismo es señorita.- Accedió Lateef.

-Por favor, me pueden llamar Andromeda. Yo haré el primer turno con ellos dos.-dije señalando a Colin y Andrew.

-Perfecto señorita Andromeda.-Dijo Lateef.- El siguiente turno será mío y de Einar, luego va Kosei y Sudí...-Planificaba Lateef.

Los dejé planificando sus tunos mientras me volvía a sentar a el pie de aquél árbol. A medida que pasaba el tiempo el dolor y ardor en mi pierna se volvía solo un cosquilleo, hasta que no sentí mas dolor.

No obstante, cuando comenzó la noche y con ella mi turno, al levantarme nuevamente sentí el dolor del látigo en mi pierna. Tratando de ignorar tal dolor fui con los chicos a comenzar a patrullar el área.

-Ya comenzó nuestro turno, caminemos.-Ordene.

-Princesa...tu no vas a caminar así, mírate, estas cojeando nuevamente.- Dijo Andrew observando mi pierna.

-Andrew claro que voy a caminar, si no que les estaré demostrando a ellos.-Dije en vos baja.- ¿Que están siendo guiados por alguien débil?

-Te lastimarás.- reprochó Colin mirando mi pierna.

-Colin, Andrew.- dije mirandolos.- Iré de todos modos.

-Pues cada vez que necesites detenerte nos avisas y paramos. ¿Trato? -Dijo Colin con una leve sonrisa.

Y aunque sonreía, el no estaba de acuerdo con mi decisión y lo podía notar muy claramente.

-Trato...-Dije y rodé mis ojos.

Ahí estábamos, caminando bajo el brillo de la luna llena, preparados para el peligro de la noche en un lugar abierto; cuando de repente el silencio se volvió un estruendo al escuchar una respiración acelerada acercarse a nosotros.

Todos nos miramos petrificados con el solo hecho de pensar que fuera otro lobo o una manada completa de ellos. Todos los presentes en ese lugar se levantaron y con ellos los diez guerreros asignados a patrullar el área.