Calipso

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El velero mas grande que había visto en mi vida, claro que no había visto muchos, soy de un clan donde predomina la nieve y el agua es escasa. Pero solo sabía que era el mas enorme. Estaba echo de madera fortificado con una capa de metal, en la proa Calipso llevaba un gran lobo con el hocico abierto mostrando sus afilados dientes, estatua que, parecía fortificada con oro. A los lados llevaba 25 cañones y la eslora del barco media aproximadamente 380 metros, sacando conclusiones claro, podía medir mas, o menos que eso. Tal vez unos 68 metros de manga y mas de 440.000 toneladas de peso muerto en el mar.

Entramos a el gran velero llamado Calipso por una puerta como la de un garaje que se abrió cuando estábamos enfrente. Dejamos los vehículos ahí estacionados y subimos por unas escaleras de madera fuerte que nos llevaron a un almacén, había comida, combustible, armas y muchas cosas más que necesitaríamos como cuerdas y bolas de cañón. Al final de este almacén se encontraban las mazmorras que contenían mas o menos 30 "jaulas". Seguimos en acenso y al subir nos encontramos con un gran pasillo y un sinnúmero de puertas que daban a habitaciones por las cuales caminamos hasta el final encontrando la enfermería, era grande y espaciosa, tenía medicamentos y todo estaba muy limpio y ordenado. Adhara se quedo ahí ordenando unas cosas que llevaba junto con otra amiga que, supongo, era su ayudante.

Nosotros seguimos subiendo por las escaleras del final del pasillo y nos topamos con la cocina, la cocina mas grande que había visto en mi vida, tenía tantas estufas y neveras que era casi increíble, neveras que de hecho estaban repletas de comida, por lo menos tres de ellas. Salimos de la cocina y nos encontramos con un gran comedor, grande en verdad, contenía alrededor de tres filas de mesas y cada una de ellas se compone por cinco grandes mesas y un sinnúmero de sillas. Había un marco de puerta por donde salías y te encontrabas con la cubierta principal, que era un espacio abierto, parecía un patio pero sin flores ni grama, un lugar para reunirse con amigos. Si caminabas un poco mas había una puerta que te conducía a un área de armería, teníamos todo tipos de armas en ese lugar. Salimos de ahí, dimos media vuelta y nos encontramos con unas escaleras que daban a el Castillo de proa. Eso solo era un espacio cuadrado con vista al mar.

Enfrente podíamos ver la Alta cubierta así que subimos a ella, que no era mas grande o diferente que el Castillo de proa. Subimos las escaleras que estaban frente a nosotros y llegamos al Castillo de popa, este espacio era similar a los dos anteriores, solo que este tenía el timón del barco. Luego subimos a la cubierta de popa, un cuadrado aún mas pequeño y similar a los anteriores, solo que este era el final del barco. Cuando vimos bien habían unas escaleras que bajaban hacia algún lugar y cuando descendimos nos topamos con un cuarto de navegación. Algo que claramente necesitaríamos, bajando por esas escaleras encontramos solo una puerta que decía "habitación del capitán" ahí me di una vuelta, sabiendo que este era el fin de el enorme navío y dije;

-Myles, Kosei, eleven las seis anclas , Amonet y Saudi desplieguen las velas, todos los demás acomódense, busquen habitaciones que les gusten pero en dos horas nos veremos reunidos en la cubierta principal para dar unas reglas.-Ordené y todos inmediatamente me hicieron caso.

-Supongo que esta es tu habitación.-dijo Colin con Enzo en las manos.

-Supongo...-pensé algo incómoda.-debería ser de Andrew, el sabe manejar barcos, dime, ¿Como seré capitana de un barco si no se como manejarlo?

-Tu eres su reina y solo a ti te hacen tanto caso,-refutó Colin serio y luego rió un poco recordando algo-hay veces que hasta a mi me desobedecen y hacen lo que quieren los soldados, pero a ti nunca.-dijo Colin soltando unas risitas.- Mira, se que Andrew no tendrá problemas con darte la habitación además de que necesitarás una mas grande ahora que ya no eres solo tu.

-De igual forma, hablaré con el.

-¿Hablar conmigo? ¿Sobre qué?-dijo Andrew haciendo acto de presencia.

AmbroseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora