Ya era el día de Sara para ir a España, ya sus maletas están lista dese hace un día, Mindi la está ayudando con ellas, Sandy lamentablemente no podía ir al viaje así que Mindi irá con ella y así Sandy se quedaba tranquila sabiendo que tendría compañía y alguien que la pudiese ayudar si algo le llegase a pasar, Sandy trabaja en una escuela muy prestigiosa y le pidieron ser guía de un curso nuevo y ella era la mejor calificada para ese tipo de cosas, Sara se despide de su madre, su padre y su hermano, les da un gran abrazo y les dice que volverá en dos cinco días máximo.
Mindi y Sara toman el rumbo y se van a pie hacia una parada para tomar un taxi, pero antes Sara quiere ir a ver a la Sra Samanta o ver como seguía la casa ya que se suponía que ella se iría a Canadá como se lo dejó dicho la última vez que hablaron, al llegar a la casa se da cuenta que la puerta esta medio abierta lo cual hace que se asusten las dos ya que Sara le había contado a Mindi por el camino la última conversación, entran lentamente a la casa y ven a la Sra Samanta en la cocina haciendo su almuerzo.
—Hola Sra Samanta, ¿Cómo sigue de su salud? Lo pregunto por lo de ese día, las gazas y esas cosas de medicamentos que tenia sobre la mesa, además, vaya pensé que estaría en Canadá venia ver como estaba la casa, anteriormente no pude. Dice Sara sonriente.
—Vaya, muchas preguntas. Dice la Sra Samanta con una sonrisa muy agradable.—Pues, no me fui de viaje, he estado aquí desde entonces, y ya yo estoy bien niña, más bien dime tú ¿cómo sigues? ¿Qué harás con esa maleta? Hola pequeña Mindi.
—Hola Sra Samanta, huele muy rico. Responde Mindi.
—He, ya estoy bien, bueno dentro de lo que cabe, estoy viva aunque sea por fuera. Pues la maleta quiere decir que me voy de viaje, me iré a España necesito resolver un asunto que quedé en hacer con Mark, él ya no está lo sé, pero estoy completamente segura que si la historia fuese al revés, el hubiese hecho lo mismo, el hubiese cumplido lo que hablamos, estoy muy mal pero debo hacerlo. Responde Sara.
—¿Q..que dijiste? ¿Vas a España?. Pregunta la Sra Samanta muy asombrada.
La Sra Samanta se pone tensa, su asombro e impresión se deja notar mucho, recordó en cuestiones de segundos lo que le dijo Mark que iría a España a hacer algo que quedó de hacer con Sara la noche del Incendio y si Sara iba a hacer lo mismo tal vez se podrían encontrar, la Sra Samanta se sienta en una silla como si se hubiese dejado caer y empieza a tomar café, Sara y Mindi se la quedan mirando muy extraño y salen corriendo para donde está ella.
—¿Le pasa algo Sra Samanta? ¿Está bien?. Preguntan las dos al mismo tiempo.
—Sí, sí estoy bien, solo que me ha dado un mareo es todo. La Sra Samanta apenas si podía hablar.—¿Pero no te sientas mal para viajar? Yo creo que es mejor que vayas otro día, o dejes pasar una semana para que te recuperes mejor Sara.
—Yo estoy bien, además lo mío no fue enfermedad ni nada por el estilo, además lo que tengo no se me quitara nunca y no es enfermedad, a mi quien me preocupa es usted y la verdad es que ya compre el boleto del avión y ya tengo todo planeado, pero solo serán como cinco días luego le prometo que estaré aquí para usted. Responde Sara.
Todo se estaba complicando según la Sra Samanta, Mark solo podía dormir y recuperarse en la casa de la Sra Samanta pero con Sara allí es imposible y si ellos se llegaran a conseguir en España seria al doble de peor, Sara pensaría muy mal de Mark, y sería un caos, pero no había mucho que podía hacer la Sra Samanta para evitar eso en España, lo de la casa era más fácil pero lo de España era otro cuento ya que Sara no la dejó ir con ella ya que ella se lo pidió pero por obvias razones que conoce Sara la Sra Samanta no podía viajar con ella ya que la sorpresa no sería sorpresa y rogaba porque saliera todo bien.
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No sé dañar
Teen Fiction-Ganadora de los premios Shadow Awards como mejor portada- -Ganadora de los primos GOD2018 como mejor trama- Mark un chico un tanto callado, desolado, siempre había soñado con un gran amor. Sara es el reflejo de Mark. Son casi parecidos, viven en un...