CAPÍTULO 15: PETICIONES [2].

11.9K 646 18
                                    

– Te preguntare algo y quiero que me contestes con la verdad – Anker hablo de repente, su mirada estaba fija en mí – ¿Amas a Valentina?

– Más que a mi propia vida, la amo desde antes de saberlo – era el momento se sincerarme y decir lo que por tantos años he guardado – nunca he soportado verla llorar o ser regañada por Ernesto por eso en cantidad de ocasiones me echaba la culpa para que no fuera regañada

"... Desde que llegaron me he repetido "Su felicidad es mi felicidad" por esa razón no impedí que se casaran, verla sonreír contigo me llena el corazón de una mezcla entre felicidad y dolor; me hace feliz verla alegre, contenta, sana y bien pero me duele que no sea yo el responsable de esa alegría, de sus sonrisas, de su buen estado de salud..."

"... Me frustra saber que ella ya no podrá ser mía y que nunca lo fue, que cometí el peor error de mi vida cuando entre en pánico aquel día, el cual deseo borrar o al menos remediar pero no puedo; me siento el hombre más miserable sobre la tierra por haberla tratado así y que ni en sueños puedo dejar de pensar en ella porque las pesadillas donde la veo morir por mi culpa me atacan..."

– Ernesto me comento que tomaste terapia después de que Valentina dejara la casa ¿Por qué?

– Tenia pesadillas donde la veía morir de diferentes maneras frente a mis ojos y yo no podía hacer nada porque algo me sostenía y no me dejaba llegar a ella; al final siempre aparecían Ernesto y mi madre diciendo que me odiaban por haberla matado

– ¿Qué hiciste después de saber que ella intento matarse?

– Corrí a su habitación para llorar desde ese momento su cuarto se convirtió en un santuario, solo yo entraba para limpiar el polvo y a llorarle cuando la extrañaba; después se volvió como una costumbre ir cada semana y desde hace tres años iba a limpiar y llorar una vez al mes; me convencí de que jamás regresaría, que la dañe tanto que me odiaba

"...Incluso contrate a varios investigadores privados pero ninguno me pudo dar alguna pista sobre su paradero, Ernesto jamás me quiso decir nada sobre ella, siempre evito hablarme de Valentina algo que siempre le he recriminado; cuando volví de las vacaciones con mi padre aquel verano estaba decidido a confesarle mi amor, pero me entere de que se intentó matar y que fue internada en una clínica..."

"...En esas vacaciones me di cuenta de cuanto la amaba, que yo no la veía como hermana, sino como mujer, entendí que sentía celos de solo verla hablar con un chico, que no podía concebir la idea de que tuviera un novio; que la razón por la que me gustaba estar a su lado, consentirla, hacerla reír y cumplir todas sus peticiones era porque la amaba, la amo y la amare por el resto de mi vida..."

– Creo que Valentina eligió bien al enamorarse de ti – Anker dejo salir un largo suspiro – ella estará en buenas manos cuando me muera

– Por favor no digas eso, bien sabes que ella me alejara cuando tu faltes

– Quiero que me prometas que cuidaras de ella por siempre...

– No hagas esto, por favor no hagas peticiones que no prometeré porque estoy seguro de que no las podré cumplir

– Sé que esta si la podrás cumplir, prométeme que cuidaras de mi esposa cuando yo muera

– Buscare una solución, al menos para poder alargar tu vida

– ¿Por qué lo haces?, sabes que esta es tu oportunidad para quedarte con mi esposa

– La amo y quiero que este conmigo pero no así, tú eres la felicidad de valentina y sé que ella recaerá en el momento en que mueras por lo que haré lo humanamente posible para que estés más tiempo a su lado evitándole el dolor de perderte

– Eres un buen hombre Robinson

El silencio se hizo de nuevo presente entre los dos, tome asiento en la silla donde me encontraba al principio de nuestra conversación; hablaría con Pedro para que me contactara con los especialistas en neurología que conociera, tenía que ayudarlo para así ver feliz a valentina

– Entonces ¿Me prometerás estar junto a Valentina cuando me muera?

– Lo prometeré solo si tú me prometes a mí tomar todos los tratamientos que puedan funcionarte ya sea para alargar tu vida o curarte

Anker pareció meditar mis palabras pero al final accedió, extendió su mano la cual tome cerrando nuestro acuerdo ahora más que nunca tendría que aguantarme los celos y dejar a un lado mi frustración por no tener a mi pequeña para mí, la prioridad era salvar a su esposo

– Valentina me dijo que tienes novia

– Tenia, esa mujer no entiendo lo que es un NO

– ¿La terminaste cuando Valentina volvió?

– Si y no, termine con Kelly el día que anunciaron su compromiso, fue en la mañana cuando aún no sabía que ella había regresado

Tras nuestra platica algo intensa nos relajamos al prender la televisión, aun alcanzamos a ver el final del partido de las Panteras quienes enfrentaba a los Jaguares, en estos momentos Anker y yo parecíamos de cierta manera amigos, pues ambos conversábamos sobre los pases de los jugadores

– Futbol soccer o futbol americano

– Americano, tengo dos amigos en el equipo de las Panteras

La puerta se abrió dejando ver a una cansada Valentina, detrás de ella entraron Elie, Ernesto y mi madre; Anker abrió los brazos y de inmediato mi pequeña corrió hacia él abrazándolo, después de nuestra platica el ver esas muestras de cariño dolían un poco menos

– Te ves cansada linda – Anker beso la frente de ella – ve a descansar mañana vendrás a verme

– No me iré, quiero quedarme a tu lado

– Valentina – Elie llamo la atención de todos – permíteme cuidar esta noche de mi hijo, él y yo necesitamos un momento de madre e hijo

Aun con las constantes negativas de mi pequeña pudieron convencerla de ir a casa a descansar, tras despedirnos de Anker nuestros padres, Valentina y yo abandonamos el hospital, los cuatro subimos al auto de Ernesto, el silencio reino durante todo el camino

De vez en cuando miraba a Valentina la cual poco a poco iba cerrando los ojos por el cansancio, al llegar a casa ella ya estaba dormida, sin mucho esfuerzo la levanté en brazos para llevarla a su habitación, era mucho más liviana de lo que creí, tenía que asegurarme de que comiera más

La dejé en su cama, quite sus zapatos, la arrope y la mire por un tiempo; mi madre tenía razón ella había cambiado y ahora estaba mucho más hermosa que antes ¿Cómo pude dejarla ir? No más bien ¿Cómo pude lastimarla?, fui un total cobarde por lastimarla de esa manera

– Perdóname pequeña – acaricie su rostro – fui un total hijo de puta al lastimarte

Su mano salió de la sabana y tomo la mia llevándola a su pecho donde la aprisiono, mis intentos por zafarme no resultaron nada favorables; me resigne a esperar a que me soltara por lo que me senté en el suelo y recargue mi cabeza en la cama solo me tenía que esperar a que me soltara 

Misión: Recuperarla. [COMPLETA✔ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora