– James apresúrate o el desayuno se enfriara
– Pequeña tranquila – bese su frente – el día de hoy te siento algo nerviosa
– Será porque el día de hoy nos entregan la casa nueva
Sonreí al ver su emoción, tomados de las manos bajamos al comedor donde nos esperaban Lilah y Elie, las cuales conversaban animadamente mientras acomodaban la mesa
– Buenos días, veo que no solo Valentina está emocionada
– Como no estar emocionadas si por fin hoy nos entregan nuestra casa – Elie me abrazo – gracias por dejarme estar a su lado
– No tienes nada que agradecer, eres parte de nuestra familia
– Bien a desayunar – Lilah nos miró con una sonrisa
Han pasado tres meses desde que mi pequeña vive conmigo, Ernesto ha estado distanciado desde que Valentina le dejo muy claro que no volvería a casa y no me dejaría de verme, ni a mí ni a Elie; la tranquilidad que tenemos no me gusta pues él prometió que nos arrepentiríamos de no alejarnos
– Ernesto no hará nada – Elie me comento cuando mi pequeña platicaba con Lilah – Valentina es su hija no la dañara
– Eso espero, porque no sé de qué seré capaz si llega a dañarla
Con un mal presentimiento salimos de la casa del tío de Ramón y nos dirigimos en auto a una de las zonas residenciales más conocidas de la ciudad, a mi pequeña le gusto la casa y a mí la seguridad que brindaba la zona; la necesitaba sana y salva de todo
Mi pequeña sostiene mi mano durante todo el camino, verla sonreír felizmente me da tranquilidad pero aun así mis alertas se encienden cuando noto como una camioneta negra nos sigue, trato de mantenerme en calma pero da los mismos giros que hago yo
– ¿Sucede algo?
– No pequeña, solo parece que la llanta del lado derecho esta algo baja ¿Les molesta si pasamos a un taller?
– Claro que no – Lilah tomo la palabra – creo que es mejor revisarlo antes de que haya un accidente
Manejo hasta el taller de Juan un viejo conocido, al llegar le pido a mis acompañantes que se queden arriba mientras hablo con el encargado del taller
– Hola, tanto tiempo James
– Hola lo sé, lamento no haber venido pero tuve algunos contratiempos
– Lo sé la vida no es fácil amigo – Juan palmea mi hombro – dime ¿Qué tiene tu auto?
– La verdad nada, pero un auto me viene siguiendo y traigo a tres personas importantes y les dije que la llanta estaba baja por eso entre aquí, no sabía a donde más ir
– ¿Qué has hecho para que te sigan?
– El padre de mi chica se opone a nuestra relación ¿Por favor ayúdame?
– Bien amigo, mira revisare tu auto y te diré que se le viene saliendo el aceite así podrán pasarse a uno de los autos que presto
– Muchas gracias
Camine hacia el auto bajo la atenta mirada de mis acompañantes, al entrar les regale una sonrisa tratando de darles confianza no quería que se alteraran, abrí el cofre del auto y Juan de inmediato se acercó a revisarlo
– ¿Todo bien?
– Si, solo le dará una revisión rápida ya que no lo he traído en los últimos tres meses
– James ¿Cómo puedes olvidar algo tan importante? – Mi pequeña acaricio mi cabello
– Amigo creo que tendrás que dejármelo el auto está chorreando aceite – las tres chicas se bajaron del auto con sus bolsos mirándome como cuestionando que haríamos – les prestare uno de mis autos y mañana puedes pasar por él ¿De acuerdo?
– Claro gracias
– Bien síganme, les daré las llaves
Después de despedirme de mi amigo y darle las gracias; salimos del taller mire a ambos lados y la camioneta aún seguía allí esperando por nosotros, afortunadamente no nos siguieron por lo que maneje directamente a la nueva casa; en cuanto llegamos mi pequeña se bajó y evito que Lilah entrara
– Antes que nada quiero decirles que si algo no les agrada podemos cambiarlo ¿Ok?
– Bien pero ya déjanos entrar
Lo primero que captan mis ojos es una sala en tonos cafés y grises dándole un toque muy moderno, las paredes eran blancas y el suelo tenía una loseta estilo madera; todo era hermoso, mi pequeña nos dirigió a la segunda planta mostrándonos las habitaciones
– Ven tengo una sorpresa para ti
Mi pequeña me guio a la última habitación la cual abrió dejándome entrar primero, todo el cuarto estaba pintado de colores vivos, los muebles eran de un color caoba clásico mis favoritos; la cama era enorme para una sola persona y al mirarla con detenimiento encontré dos pijamas, una de hombre y otra de mujer
– ¿Te gusta nuestra habitación?
– ¿Qué?
Me quede paralizado, desde que decidimos vivir juntos no dormíamos en la misma habitación, cada uno tenía su propio cuarto; decidimos no tener una relación tan romántica por respeto a Elie y la memoria de Anker, pero ahora escuchar a mi pequeña decir que esta era nuestra habitación me lleno de miedo al pensar en lo mal que haríamos sentir a Elie
– Esta es nuestra nueva habitación
– Pequeña es hermosa pero...
– Nada de peros – la voz de Elie me hizo girar – James es momento de que ustedes estén juntos – nos tomó de las manos y las junto – estuve de acuerdo en esto porque Val me tomo en cuenta y no estaría más feliz si por fin se deciden a formalizar su relación
Abrace a Elie, ella se ha convertido en alguien importante para mí, mi madre me ha dado la espalda por estar con mi pequeña sin embargo Elie ha hecho menos dolorosa la decisión que mi madre tomo, sin duda alguna Anker nos dejó un Angel a nuestro lado
– Gracias Elie, muchas gracias
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Misión: Recuperarla. [COMPLETA✔ ]
Teen FictionEscrito para mayores de edad (+18 años), contiene descripciones violentas, inapropiadas e ilegales; leer bajo su responsabilidad. - Nana ¿Dónde está Valentina? Necesito hablar con ella - La niña no está, Valentina se fue a estudiar al extranjero ...