Cariño,Te Amaré Por Siempre (Adaptación camren G!P)

Capítulo 24

Lauren

Estaba terminando de secarme el pelo cuando sonó mi móvil. Era Verónica.

-Te vas a morir cuando te diga con quién voy a cenar, Vero -susurré al micrófono.

-¿Estás respondiendo desde un búnker subterráneo?

-¿Qué? No.

-Entonces, ¿por qué me hablas en susurros?

-No lo sé -volví a susurrar-. ¿Quizá para que no suene tan malo?

-¡Oh, Dios! La última vez que me hablaste así, estabas pasando el fin de semana en Las Vegas con una estrella porno.

Solté una risita tonta.

-Bueno, es irónico que menciones precisamente eso.

Oí un chillido al otro lado de la línea y aparté el móvil de mi oreja al tiempo que hacía una mueca.

-¡Por Dios, Verónica! -dije en un tono normal-. ¿Estás tratando de reventarme el tímpano?

-Dime que no vas a pasar el fin de semana con otra estrella porno, Lauren.

Me reí. Me sentía bien. Necesitaba la relajación que traía consigo aquella risa. Me había dado un largo baño caliente cuando llegué a casa, pero todavía me sentía tensa y reticente ante la idea de ir a cenar con Camila. Por no mencionar que no le había dicho nada a Noah sobre mis planes de esta noche. Él todavía seguía reunido con algunos testigos y solo nos habíamos comunicado por mensajes de texto.

-Vale, no. -Me aclaré la garganta-. Sin embargo, voy a ir a cenar con la estrella porno -añadí con otro susurro.

-¿Qué dices? -gritó Vero.

-Verónica, para, que vas a asustar al bebé. -Mi amiga estaba embarazada de ocho meses.

Se rio.

-El bebé está bien. Eres tú quien me preocupa. ¿Qué ha pasado?

Suspiré.

-Hoy he acompañado a una detective a realizar una entrevista para un caso en el que estoy trabajando. Imagina mi sorpresa cuando, al entrar en ese despacho, ha resultado ser el de Camila Cabello. Y no es broma. He estado a punto de desmayarme.

-¿El despacho de Camila Cabello? -preguntó. Parecía completamente confundida -. ¿A qué se dedica? ¿Dónde está?

-Es la jefa de seguridad en un hotel nuevo del Strip. Al parecer, después de que nos separamos se alistó en la Marina y estuvo destinada en el extranjero casi todo este tiempo. No conozco todos los detalles. Me ha invitado a cenar para ponernos al día y le he dicho que sí.

Vero se quedó en silencio unos segundos.

-Así que se alistó en la Marina..., ¡guau! Te aseguro que quiero conocer esa historia. Será mejor que me llames cuando estés de vuelta. ¿Qué le parecen a Noah tus planes para ir a cenar? -me preguntó con cierta vacilación.

Hice una pausa.

-Todavía no se lo he dicho. Pero ya conoces a Noah, todo le parece bien. Creo que no le importará.

Resopló.

-Eso es lo que me preocupa.

-¿Qué quieres decir exactamente? -pregunté, frunciendo el ceño mientras conectaba el altavoz para poder quitarme la bata y ponerme la ropa interior mientras seguíamos hablando.

Verónica se lo pensó durante un rato.

-Es solo que... ¿Recuerdas cuando te tiró los tejos aquel tipo en Acción de Gracias? - Vero y Brian habían venido a Las Vegas hacía menos de un mes para pasar aquí ese fin de semana. Yo llevaba en ese momento un caso importante y no había tenido tiempo para desplazarme a casa y estar con mi padre y mis hermanas. El día de Acción de Gracias habíamos ido a cenar fuera las dos parejas y cuando me levanté para ir al cuarto de baño, un hombre me bloqueó el paso e intentó ligar conmigo.