35

474 34 3
                                    

chapter thirty five

Narrador omnisciente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Narrador omnisciente

Kyle cayó al suelo, con la sangre brotando sin control de su pecho en el momento en que John sacó sus garras ahora rojizas y con una vida más entre ellas.

— ¡NO!— el grito de Sandra se escucha en toda la bodega. Siente un dolor tan intenso que no puede explicar. Corre hacia el cuerpo de Kyle y se arrodilla a su lado.

Nadie se ha ido tras de John, ni siquiera Derek que está en alguna clase de shock luego de que un desconocido a dado su vida por él. ¿Cómo pudo pasar esto?

— Sandra— susurra Kyle y la loba acaricia su rostro con una mano y con la otra su rizado cabello. Ambos tienen sudor provocado por el esfuerzo de mantenerse con vida, además de la adrenalina del momento.

— No te esfuerces Kyle— le ruega Sandra que siente su dolor, pasando por sus manos y también por sus brazos ya que las manos de Kyle le dan caricias como si con ello le dijera que todo estará bien.

— Sé que me voy a ir— Sandra pasa saliva con fuerza; su garganta arde. Los ojos de Kyle están tan cristalizados que tiene miedo de ella ponerse a llorar frente a él y no ser lo suficientemente fuerte para darle valor—, pero está bien porque sé que tú estarás bien, con Derek.

— Kyle...

— Te amo Sandra— le susurra Kyle en medio de una punzada que le atraviesa el pecho

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— Te amo Sandra— le susurra Kyle en medio de una punzada que le atraviesa el pecho. Hay un momento en que no puede respirar bien y tiene que cerrar los ojos para soportar el dolor.

— Te amo Kyle— le responde Sandra de vuelta. Ella de pronto tiene duda en que si lo dijo sinceramente porque así lo sentía o si sólo lo ha dicho una mentira porque sabe que Kyle partirá y quiere que lo haga sabiendo que la mujer que él ama le corresponde.

Kyle abre los ojos de nuevo. El dolor parece haberse esfumado de sus pupilas y ha sido reemplazado por amor, ternura y agradecimiento. Sandra siente aquellos sentimientos inundarla y por un momento desea que esto sea una pesadilla de la que pronto despertará.

Corriendo con lobosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora