En ocasiones debemos correr para protegernos, no importa que estemos dentro de una manada porque puede ser que los lobos estén en peligro...
~Cuarta temporada de la Saga Lobos~
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Narrador omnisciente
Meredith Walker estaba viva. Otra de las mentiras y misterios que Beacon Hills quiso guardar pero que siempre, tarde o temprano, salen a la luz.
Los oficiales de policía la tuvieron en la comisaría toda la noche, intentando que la chica dijera el por qué de su 'visita' pero no lograron nada, hasta que Lydia logró saber que Meredith quería hablar con Peter Hale.
¿Peter Hale?
Sentados, frente a frente, en la sala de interrogaciones, estaba Peter y Meredith. Ambos eran vigilados por Parrish dentro de la misma sala, y detrás de un ventana lo hacían Lydia y John Stilinski. Estos últimos se dieron cuenta de que la chica Walker conocía a Peter desde hacía mucho tiempo pues estaba sorprendida de ver al hombre lobo sin una sola quemadura en su piel, y mucho menos sin una cicatriz.
Peter Hale estaba un poco molesto por aquello porque él no tenía ni la menor idea de quién era ella, es más, ni siquiera recordaba haberla visto una sola vez en su vida. Pero Meredith decía lo contrario, argumentando que no sólo lo conocía sino que ambos compartían un secreto sobre lo que estaba pasando en estos momentos en Beacon Hills.
El lobo estaba molesto y ansioso por saber de una buena vez a qué demonios se refería la loca. Arremetió contra ella, quitando primero al oficial del camino, para luego encajar sus garras en la nuca de Meredith, creando con ello una conexión que lo llevaría directamente a los recuerdo de ella.
Meredith Walker fue hospitalizada luego de que fuera casi asesinada por los parapsicólogos que la torturaron en la casa del lago. Fue en el mismo momento en que Peter Hale fue internado después de que la casa Hale fue envuelta en llamas por la loca de Kate Argent. Ambos estaban en coma por sus respectivos males.
Meredith, al ser una banshee, podía escuchar los pensamientos de Peter, que eran tan fuertes, que se oían como si él estuviera contándole todos sus planes, a un lado de su cama.
Peter Hales sólo quería venganza, una venganza provocada por los daños que había hecho Kate, mermando la presencia de hombres lobo en Beacon Hills al momento de acabar casi por completo con la familia de lobos más poderosa de la región y sus alrededores. El lobo quería acabar con cada uno de los sobrenaturales débiles, como los que había logrado hacer su hermana, Thalia Hale, cuando fue alfa. Contrataría a los mejores cazadores, exterminadores, para que lograran su propósito, y luego les pagaría con los bonos que guardaban en la bóveda familiar. Todo esto lo comunicaría creando una lista de muerte que esparciría por todos los rincones posibles con tal de que muchos tuvieran la oportunidad de ganar un poco de dinero a cambio de un sobrenatural muerto. Cuando ya no hubiera ningún sobrenatural, él crearía a los suyos, a su imagen y semejanza.
Rompió la conexión.
Ahora todos se daban cuenta de que Peter Hale era el responsable de que las muertes de los sobrenaturales se hubieran propagado como pólvora. Incluso él se dio cuenta de que podía ser culpable pero no del todo pues él en ningún momento le había pedido a la loca chica que pusiera en marcha su plan. ¡Era una locura! ¿Cómo él iba querer matar a sus hijas? ¡Era absurdo!
