Las tropas de búsqueda llegaron al Molino poco después de la ida de Dash y Sofia. Aunque Luck les dijera que no habían estado allí, los guardias examinaron la zona encontrando huellas y cabello rubio. Esto fue suficiente para que lo arrestaran , aunque Selfire consiguió escapar.
No sabían que la orden del rey era tan estricta, no sabían que llegarían a este extremo solo por un poco de información.
- Dash, ¿cuanto queda para llegar a los montes?- suspiró cansada-.
- Pues... a este paso y con descansos mínimos en dos días como mucho. - miró a la niña-.
Dash se percató de que el tobillo de Sofia se resentía de tanto caminar ; es una secuela de la caída que no se puede curar.
-Se que te duele el tobillo. - cerró los puños-.
-El equipaje y las grandes caminatas no me ayudan demasiado- gruñó-.
Dash no podía coger a Sofia y estaba hasta arriba de maletas, aunque ella solo llevara una , para su tamaño debe ser una enorme carga.
En la distancia un arroyo se podía escuchar , esto los animo a llegar lo más rápidamente posible para llenar sus recomiendes de agua fresca.
En la noche; oscuridad temible y desconocida , un ruido volvió a los oídos de Dash, últimamente interrumpen demasiado su cena...esta noche tampoco comerá pesadillas.
ESTÁS LEYENDO
La maldición.
FantasiaSofía es espectadora de una epidemia que azota su pueblo, acabando con casi toda la población, su madre, para salvarla, la esconde fuera de las murallas que protegían a los habitantes sanos y fuera de peligro.